martes, 20 de septiembre de 2016

Comunicado del PDPR - EPR

AL PUEBLO DE MÉXICO
A LOS TRABAJADORES DE LA COMUNICACIÓN
AL SEÑOR ALFREDO MARTÍNEZ DE AGUILAR

Ante los múltiples, insistentes y dolosos señalamientos del señor Alfredo Martínez de Aguilar, donde se vincula desde hace años a organizaciones populares y militantes de ellas con nuestro partido y ejército, manifestamos de frente a nuestro pueblo y exponemos a los trabajadores de la comunicación:

Una cosa es la lucha en el terreno de las ideas, donde se defiende una concepción ideofilosófica y se plantea una propuesta de solución a los problemas económicos, políticos y sociales que laceran al país, la cual es inevitable, necesaria y válida en cuanto que como sujetos políticos analizamos la realidad, pero otra cosa es ampararse en el ejercicio del periodismo para hacer señalamientos policíacos, que tienen como propósito que el Estado se ensañe con sevicia en los luchadores sociales y organizaciones populares.

Existe una gran diferencia en el ejercicio del noble oficio del periodismo que informa de manera imparcial de la realidad que prevalece en el país y, en asumir una posición dolosa e inquisitoria donde se justifica, se exige a gritos la represión y los crímenes de Estado contra el conjunto del movimiento popular, poniéndolo como diana para que los cuerpos policíacos-militares practiquen el tiro al blanco en la humanidad de la larga lista de luchadores sociales que se señala de manera dolosa de pertenecer a nuestro partido y ejército.

Señor Alfredo Martínez de Aguilar, usted no ejerce el periodismo, mucho menos tiene ética profesional en su labor "informativa", porque sus furibundas acusaciones, sus señalamientos incriminatorios, sus intrigas policíacas son propias de los voceros oficiosos de los órganos de inteligencia del aparato represivo del Estado; en los hechos se confirma que usted forma parte de las plumas y voces mercenarias que apuntalan la dictadura de opinión, asume el papel oficial del régimen al no morderse la lengua y afirmar categóricamente que lo que se vive en Oaxaca y otros estados de la República, en relación a la protesta, se trata de una guerra, donde usted por propia voz se ubica como parte de las fuerzas represivas.

Inexorablemente los hechos así lo confirman, ello lo hace corresponsable de ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, persecución y encarcelamiento de luchadores sociales a quienes usted ha acusado insistentemente de ser guerrilleros, de pertenecer a nuestro partido y ejército.

Hoy en el ejercicio del derecho a réplica y por principio político le respondemos, porque se ha dedicado un largo tiempo a calumniarnos, a criminalizarnos, a denostar nuestra práctica política, y vincular tanto a organizaciones populares como a luchadores sociales de pertenecer a nuestro partido con un solo propósito, que sean reprimidos brutalmente al situarlos de tiro al blanco y una vez logrado su objetivo se sigue haciendo leña del árbol caído, de manera pérfida trata de responsabilizarnos de éstos crímenes, dando muestras de sobra de su condición fascista.

El esbirro de Estado cree que todos son de su condición y proceder criminal, por eso elabora y recrea expedientes criminales, tramas detectivescas, construye y reconstruye conjeturas policíacas del pasado y presente con las que se justifica el asesinato, la desaparición forzada y la represión. Maquinaciones que nada tienen que ver con el periodismo y el ejercicio del derecho de la libertad de expresión. Desde su lógica criminal, usted supone que se le amenaza, ¡No señor!, nosotros no utilizamos esos métodos propios del Estado burgués a los que usted está acostumbrado, ¿o no?

Señor Alfredo, qué fácil es aventar la piedra y esconder la mano; qué cómodo es pegarle al mono de paja; qué sencillo es desarrollar una supuesta batalla política cuando a quienes acusa han sido silenciados por las balas asesinas del régimen. Usted quiere y desea que sus interlocutores sean sólo muertos, porque estos ya no pueden desplegar defensa alguna. Hoy que hemos dado respuesta política a la bazofia policíaca que vierte por comisión y oficio, cual fiel cancerbero del Estado mexicano pega el grito en el cielo y se refugia en las instituciones del régimen.

Amparado mañosamente en el periodismo del que usted vuelve parapeto, sistemáticamente de manera dolosa injuria, calumnia, incrimina, azuza a la represión y al cometido de crímenes de lesa humanidad; cuando éstos se ejecutan, los justifica y utiliza perversamente para seguir exigiendo el baño de sangre sobre el pueblo. ¿Quién es el "mafioso" y criminal?, ¿quién es quien tiene responsabilidad en el cometido de ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas y encarcelamientos por motivos políticos? Usted es corresponsable al ser parte del engranaje represivo del Estado.

En su columna detrás de la noticia se ha dedicado desde hace años a elaborar meticulosamente el expediente incriminatorio judicial contra luchadores sociales, defensores de derechos humanos, representantes de organizaciones populares y trabajadores de la educación agrupados en la CNTE, la mayoría de éstos hoy son víctimas de la violencia y terrorismo de Estado.

Se desprende de sus afirmaciones policíacas una confesión de parte que tiene patente y origen de Estado, sus columnas revelan su corresponsabilidad en estos crímenes, porque como usted mismo dice en política no hay casualidad, qué curioso que a muchos de los que usted ha señalado hoy son parte de la lista de los ejecutados extrajudicialmente, de los desaparecidos de manera forzada y de los presos políticos.

A quienes usted, otras plumas y voces mercenarias acusaron de ser "guerrilleros" fueron ejecutados, desaparecidos o encarcelados injustamente, sólo por citar un ejemplo está el caso de los profesores Carlos René Román Salazar y Rafael Vicente Rodríguez Enríquez, el primero detenido desaparecido de manera forzada en marzo de 2011, y el segundo ejecutado extrajudicialmente en diciembre de 2011. Ambos crímenes de Estado cometidos en Oaxaca con los que usted sigue medrando, revictimizando a los familiares de las víctimas, reelaborando conjeturas policíacas para justificar más represión y nuevos crímenes de Estado.

Por las implicaciones de sus afirmaciones y acusaciones dolosas debe responder ante los tribunales, porque estas imputaciones inquisitorias han derivado en el cometido de múltiples crímenes de Estado y de lesa humanidad.

Para los trabajadores de la comunicación les decimos, siempre hemos respetado y valorado seriamente su trabajo nada fácil ante la dictadura de opinión, el oficio de los columnistas que vierten su posicionamiento político ante el acontecer nacional, con algunos podemos coincidir o divergir y eso no ha sido motivo de odio y/o rencor personal, por mucha discrepancia política que exista nunca personalizamos la discusión, no obstante, lo que nunca permitiremos es que se nos calumnie, se nos criminalice, se nos utilice para cotizarse ante el régimen y como argumento para justificar crímenes de Estado que se perpetran contra el pueblo.

Que quede claro, nuestra posición es política, sostenemos que hay plumas y voces que asumen el papel de mercenarios de la comunicación, en los hechos constituyen el andamiaje para imponer la dictadura de opinión y a la vez se revelan como voceros oficiosos del aparato represivo, esta es una realidad inocultable, cada vez que desde estas columnas se señala a un luchador social de ser parte de la guerrilla, al poco tiempo o es ejecutado extrajudicialmente, detenido desaparecido o encarcelado injustamente.

Por esta razón, Señor Alfredo Martínez de Aguilar, usted debe responder por sus actos y acusaciones dolosas e incriminatorias, lo responsabilizamos de los crímenes que se cometan sobre todos y cada uno de los que ha acusado de pertenecer a nuestras filas, será corresponsable de los futuros crímenes de Estado que se perpetren contra luchadores sociales, defensores de derechos humanos, representantes de organizaciones populares, trabajadores de la educación y pueblo en general.

Sepa que daremos puntual seguimiento y respuesta a todas y cada una de sus acusaciones dolosas, perversas, calumniosas, tendenciosas e incriminatorias.

Convocamos al pueblo a desenmascarar las plumas y voces mercenarias que ante cada acto de protesta popular, cual esbirros del Estado, desde su cómoda posición enfilan sus calumnias contra el pueblo, allanando el camino para la represión y el terrorismo de Estado. Siempre será legítima y necesaria la defensa y respuesta política ante los embates de los mercenarios de la comunicación.

¡JUICIO Y CASTIGO A LOS CRIMINALES DE ESTADO!
¡VIVOS SE LOS LLEVARON, VIVOS LOS QUEREMOS!
¡LIBERTAD A TODOS LOS PRESOS POLÍTICOS Y DE CONCIENCIA!

¡POR LA REVOLUCIÓN SOCIALISTA!
¡VENCER O MORIR!
¡POR NUESTROS CAMARADAS PROLETARIOS!
¡RESUELTOS A VENCER!
¡CON LA GUERRA POPULAR!
¡EL EPR TRIUNFARÁ!

COMITÉ DE PRENSA Y PROPAGANDA DEL PARTIDO DEMOCRÁTICO POPULAR REVOLUCIONARIO
PDPR

Año 52.

República mexicana, a 6 de julio de 2016.

Foro “Periodismo y Desaparición Forzada”

Foro “Periodismo y Desaparición Forzada” realizado el 25 de mayo de 2016 en el Museo Casa de la Memoria Indómita.


Comunicado del PDPR - EPR Oaxaca

AL PUEBLO DE MÉXICO
A LOS PUEBLOS DEL MUNDO
A LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN
A LOS ORGANISMOS NO GUBERNAMENTALES DEFENSORES DE LOS DERECHOS HUMANOS
A LAS ORGANIZACIONES POLÍTICAS, POPULARES Y REVOLUCIONARIAS
A LOS TRABAJADORES DE LA EDUCACIÓN
AL PUEBLO DE OAXACA
¡HERMANOS, HERMANAS, CAMARADAS!

Recordemos que nuestro pueblo tiene historia y tradición de lucha, en ese contexto en Oaxaca los explotados y oprimidos hemos escrito páginas de ella, donde se ha signado la combatividad y persistencia de la lucha contra los gobiernos antipopulares y represivos.

Cómo olvidar que en los años cuarenta y cincuenta del siglo pasado se conformaron movimientos populares que entre sus demandas exigieron la destitución de los gobernadores Edmundo M. Sánchez Cano (1944-1947) y Manuel Mayoral Heredia (1950-1952); en la década del setenta el movimiento popular estudiantil logró la destitución del gobernador Manuel Zárate Aquino.

Gobiernos que se caracterizaron por reprimir brutalmente al pueblo y sus organizaciones, no obstante, la magnitud de la violencia institucionalizada nunca han logrado quebrantar la voluntad popular de combatir, por consecuencia, la actitud combativa de nuestro pueblo de resistir ante los opresores ha estado presente y latente en estas tierras que históricamente han forjado tanto sujeto crítico y revolucionario.

La política represiva contra el pueblo no ha cesado y entre sus métodos tampoco podemos olvidar que en el sexenio de López Portillo se recurrió a la estrategia contrainsurgente utilizada en Argelia, en este caso se desplegaron en la ciudad de Oaxaca 20 mil efectivos del ejército federal que desfilaron y realizaron maniobras de carácter ofensivo con el propósito de intimidar al pueblo y acto seguido pasaron a imponer el terror de Estado y el estado de sitio. Continuidad de esta estrategia fue imponer al genocida, general Eliseo Jiménez Ruiz (1977-1980), que entre sus "haberes militares" está el "mérito" de reprimir al movimiento popular-estudiantil en el Distrito Federal en 1968; y la represión contra el pueblo de Guerrero.

Sí que en estas tierras nos ha tocado lidiar con gobiernos antipopulares y represivos. En los gobiernos de Diódoro Carrasco Altamirano (1992-1998), y de José Murat Casab (1998-2004), la represión se expresó con la organización y preparación de los cuerpos policíacos y paramilitares para especializarlos en sus haberes represivos, donde la violencia de Estado se generalizó en toda la entidad.

Política represiva que alcanza mayor intensificación en el gobierno del genocida Ulises Ruiz Ortiz (2004-2010) donde los crímenes de Estado y de lesa humanidad se cometieron de manera sistemática y generalizada.

Esto es sólo parte de la negra historia represiva de los gobiernos estatales que obedecen a la misma política de los gobiernos federales. Es la historia de la represión contra el pueblo, violencia que no para porque dichos gobiernos no obedecen a la voluntad popular, sino a una minoría que se enriquece en la medida que se hunde al pueblo en la pobreza y la miseria.

En Nochixtlán nuevos crímenes de Estado se cometieron el 19 de junio del presente año, donde las fuerzas represivas federales y estatales fueron desplegadas en campaña ofensiva para cercar y sofocar violentamente la protesta popular. El asalto policíaco-militar consistió en lanzar el ataque desde varias posiciones accionando sus armas de fuego y apoyados con artillería aérea.

El operativo policíaco militar que se implementó en todo el estado fue diseñado desde las altas esferas gubernamentales con la consigna de tirar a matar, cadena de mando que inicia con Enrique Peña Nieto, pasa por Osorio Chong y la cúpula policíaco-militar, porque los cuerpos represivos no se mandan solos, obedecen a un mando único que planificó y ordenó la masacre en Nochixtlán y el intento de sofocar a sangre y fuego el movimiento magisterial-popular.

Pero en su estrategia represiva minimizaron la historia y tradición de lucha de este nuestro pueblo, que siempre ha respondido con unidad y combatividad a los opresores de ayer y hoy. Nochixtlán enseña a todo el pueblo de México que la voluntad popular de combatir nunca ha sido quebrantada, que la solidaridad entre pueblos y comunidades tiene una larga historia que nos identifica en el terreno de la lucha de clases, porque cuando un pueblo hermano es reprimido la respuesta colectiva no se hace esperar y del tamaño de la agresión gubernamental es la respuesta popular.

Previo al despliegue y operatividad del aparato policiaco-militar se desplegó una campaña de guerra psicológica donde se satanizó hasta el hastió a los trabajadores de la educación y las organizaciones populares con claros fines represivos, era el ablandamiento del terreno para ejercer el terrorismo de Estado, en donde voces y plumas progobiernistas se sumaron a la campaña de linchamiento político y mediático, fase en la cual los crímenes de lesa humanidad han sido una constante.

La campaña de guerra psicológica se intensificó a partir del 18 de junio hasta la fecha con el propósito de desvirtuar la realidad, diluir la responsabilidad del Estado y sus cuerpos represivos de los crímenes cometidos en Nochixtlán. Parte de esta campaña de desinformación y manipulación de la realidad es la burda farsa del desabasto de alimentos y combustible.

Desde Oaxaca decimos claro y fuerte, el gobierno federal y estatal mienten desde la A hasta la Z, los productos de primera necesidad nunca han escaseado; verduras, abarrotes y granos se comercializan como de costumbre, basta un recorrido por el mercado 20 de noviembre y el mercado de abastos para dar cuenta de la normalidad en la realización de las mercancías.

A lo que como pueblo nos hemos enfrentado son las maniobras desplegadas por el propio gobierno y los grupos empresariales que han creado de manera dolosa la especulación en la industria de la construcción, en los productos agropecuarios y las mercancías que se exhiben en los supermercados de la oligarquía. Es del conocimiento público que por órdenes gubernamentales se obligó a los pequeños empresarios a no vender combustible.

Es obvia la maniobra gubernamental, manipular la percepción de la realidad para deslegitimar al movimiento popular-magisterial y justificar una nueva campaña represiva, a la vez que los grupos empresariales pretenden lucrar ahora con el falso argumento de declararse en desastre económico y exigir indemnizaciones que cuantifican en cifras millonarias.

Gobierno antipopular y grupos empresariales medran con la pobreza de nuestro pueblo, los niños de las comunidades a los que hipócritamente hoy dicen defender y proteger con programas asistencialistas, desde siempre se debaten entre el hambre y la miseria, aquí no se consume la leche por desabasto, sino porque no hay dinero para comprarla. Sus multicitadas tiendas Diconsa nunca cubren la necesidad real de los pueblos, porque en ellas sólo se vende galletas, jabón, aceite, sopas y en general casi nunca se encuentran maíz y frijol, y por si fuera poco los precios de los productos son mucho más caros que en las tiendas particulares.

Parte del terrorismo de Estado son los mensajes a celulares, donde a nombre del Sr. Guzmán y Caro Quintero se anuncia una nueva oleada de crímenes de Estado, se blande la espada de la represión contra "esos maestritos que andan de revoltosos" y amenazan con descaro "levantar, torturar y matar sin piedad", lo que habla de la hechura policíaca de estos mensajes.

La actual administración local encabezada por Gabino Cué, se muestra tal cuál es: defensora de los intereses y privilegios oligarcas, también responsable de la represión y el terrorismo de Estado en Oaxaca. Qué ironía, aquellos que hablaban de democracia y que en nombre del pueblo impulsaron las alianzas pragmáticas hoy quedan expuestos en su condición proempresarial y verdugos del pueblo.

Gobiernos de esta condición no obedecen a la voluntad popular, es la oligarquía quien dicta la política a seguir y la que hoy está exigiendo que el baño de sangre no pare, señores burgueses, no se victimicen sus negocios están garantizados por la actual junta administrativa.

Señores empresarios agrupados en sus distintas cámaras, el pueblo ha tomado nota que ustedes son los principales responsables de la represión contra los trabajadores de la educación y el pueblo movilizado, los únicos beneficiarios directos de las políticas antipopulares que se le imponen al pueblo. La violencia que hoy azota a los mexicanos emana de todas las estructuras del Estado y obedece a sus exigencias.

Hermanos de Oaxaca y pueblo mexicano:

Los gobiernos federal y estatal creen que con violencia policíaco-militar van a inhibir la voluntad de combatir, se equivocan, en los hechos es evidente que si reprimen a uno, nos movilizamos todos; tradición de resistencia y lucha existe, voluntad de combatir también, sólo resta que se expresen en la acción política de masas, en autodefensa popular, en la solidaridad en el vivo campo de la acción.

La lucha que hoy se libra contra la reforma educativa de carácter burgués, no sólo es una demanda de los trabajadores de la educación, es una exigencia popular. Que a nadie asuste el manotazo autoritario que se dio desde Bucareli, como pueblo tenemos toda legitimidad en la defensa de nuestros derechos, combinando todas las formas de lucha y desarrollando creatividad e iniciativa en el terreno de la lucha.

¡ANTE EL TERRORISMO DE ESTADO, LA AUTODEFENSA ARMADA DE LAS MASAS!
¡PRESENTACIÓN CON VIDA DE LOS TODOS LOS DETENIDOS DESAPARECIDOS!
¡A ORGANIZAR LA LUCHA POR LA LIBERTAD DE LOS PRESOS POLÍTICOS!
¡POR LA REVOLUCIÓN SOCIALISTA!
¡VENCER O MORIR!
¡POR NUESTROS CAMARADAS PROLETARIOS!
¡RESUELTOS A VENCER!
¡CON LA GUERRA POPULAR!
¡EL EPR TRIUNFARÁ!

COMITÉ ESTATAL DEL PARTIDO DEMOCRÁTICO POPULAR REVOLUCIONARIO
PDPR

COMANDANCIA MILITAR DE ZONA DEL EJÉRCITO POPULAR REVOLUCIONARIO
EPR

AÑO 52

Desde algún lugar de Oaxaca, a 15 de julio de 2016.

Foro ¿Estado de Derecho? Sentencias, Resoluciones y Recomendaciones en casos de Desaparición Forzada en México.

Foro ¿Estado de Derecho? Sentencias, Resoluciones y Recomendaciones en casos de Desaparición Forzada en México.

Sesión de preguntas y respuestas.

26 de mayo de 2016

Foro celebrado en el marco de la Semana Internacional del Detenido Desaparecido 2016.


Carta abierta sobre la agresión al movimiento popular en San Cristóbal de las Casas, Chiapas

EJÉRCITO ZAPATISTA DE LIBERACIÓN NACIONAL.

MÉXICO.

21 de Julio del 2016.

A quien sea ahora el gobernador en funciones y demás capataces del suroriental estado mexicano de Chiapas:

Damas (já) y Caballeros (doble já):

No reciban nuestros saludos.

Antes de que se les ocurra inventar (como ya está haciendo la PGR en Nochixtlán, Oaxaca) que la cobarde agresión contra el campamento de resistencia popular en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, fue orquestada por ISIS, les pasamos, gratis, el informe que hemos recabado:

Las siguientes son palabras de un hermano indígena partidista (PRI) de San Juan Chamula, Chiapas, México:

“A las 9 de la mañana (del día 20 de julio del 2016) llamaron a los del Verde a su casa del gobernador.  Ahí regresaron y que les dijeron que hagan como hicieron el otro día.

 (NOTA: se refiere a cuando un grupo de indígenas del Partido Verde Ecologista se pusieron pasamontañas y fueron a hacer desmanes en el bloqueo de San Cristóbal y en Tuxtla Gutiérrez, capital de Chiapas.  Cuando fueron detenidos por la seguridad de la CNTE primero dijeron que eran zapatistas (no lo eran, ni lo son, ni lo serán), luego ya dijeron que son partidistas.

  Pero que esta vez iban a ir a dialogar, para que los del bloqueo dejaran pasar los camiones de los chamulas que hacen comercio en Tuxtla.  El presidente municipal (del Verde Ecologista) puso las patrullas y la ambulancia locales.  El de San Cristóbal otro tanto de policía.  Los gobiernos de Tuxtla un buen tanto más.  De por sí hicieron trato con los policías, o sea que tenían su plan pues.  Y entonces llegaron como que quieren dialogar y un grupo se cruzó y entonces empezaron a romper todo, a robar y a quemar, o sea que por dos lados los agarraron.  Luego, como traen armas, porque de por sí los Verdes andan armados, pues a disparar como bolos y mariguanos.  Y los policías estaban como cuidándolos, o sea que eran su apoyo.  Eso que hicieron los verdes ya no estamos de acuerdo.  Porque de por sí ahora los turistas tienen miedo de venir a la cabecera (de San Juan Chamula) y eso perjudica a todos porque baja el comercio mucho.  No es el bloqueo, son los pinches verdes que están chingando todo.  Ahora vamos a ir a protestar a Tuxtla para que quiten a ese presidente que es tan pendejo.  Y si no hacen caso, pues ya lo vamos a ver aquí cómo le hacemos.”

En lo que se refiere a su torpe maniobra de encapuchar paramilitares para presentarlos como zapatistas (además de que es un refrito usado antes por el Croquetas Albores), es un fracaso rotundo.  Cuestionadas sobre si creían que eran zapatistas los que habían desalojado el bloqueo y hecho desmanes, esto respondieron dos personas del pueblo, sin filiación política conocida:

Un comerciante ambulante, edad aproximada 60 años responde:

  “¡No! Los que hicieron destrozos ayer son gente pagada del gobierno, de por sí lo sabemos. No son los que apoyan a los maestros.  Porque la lucha de los maestros está bien, si no, vamos a terminar pagando la educación nosotros. Y ¿de dónde sacan para pagarle a los maestros? Pues del pueblo. Lo que falta es que por lo menos la mayoría de los estados se decidan a entrarle, porque ya hay cuatro estados que están ya puestos, pero los demás no sabemos para cuándo.”

Una indígena Chamula, comerciante ambulante, contesta:

  “¡Naaaa!!!, no son ellos, ¡ellos no se comportan así! Ellos (los zapatistas) sí están apoyando a los maestros y los de ayer se quieren hacer pasar como ellos, pero no son, sólo se ponen sus pasamontañas, pero no se portan igual.

– ¿y quién era la gente de ayer?
– Son otros, les pagan.
– ¿y cómo ve lo de los maestros?
– Pues es que sí se necesita apoyarlos”

-*-

Estamos seguros que ustedes lo ignoran (es eso, o que las tonterías que hacen es por lo mismo, o sea por tontos), pero resulta que el así llamado “conflicto magisterial” surge por la estúpida prepotencia del gris aspirante a policía que todavía despacha en la Secretaría de Educación Pública (SEP, por sus siglas en español, oh, de nada, no hay por qué darlas).  Después de movilizaciones y de la respuesta gubernamental a esas movilizaciones con amenazas, despidos, golpes, cárcel y muertes, el magisterio en resistencia logró que el gobierno federal se sentara a dialogar.  Es, pues, un asunto federal.  Corresponde al gobierno federal y al magisterio en resistencia dialogar y llegar o no a acuerdos.

Ustedes simpatizan con la cerrazón del gris policía.  Nosotras, nosotros, zapatistas simpatizamos con las demandas del magisterio y lo respetamos.  Y no sólo a la CNTE, también y sobre todo al movimiento popular que se ha levantado en torno a sus demandas.  Como zapatistas que somos, hemos hecho pública nuestra simpatía apoyándolos, además de con la palabra, con el poco alimento que pudimos juntar de nuestras mesas.

¿Ustedes creen que a ese movimiento, ya popular, lo van a derrotar con desalojos, así sea disfrazados de “indignación ciudadana”?  Pues ya lo vieron que no.  Al igual que los hermanos pueblos originarios hicieron en Oaxaca, si los desalojan, se vuelven a poner.  Así una y otra vez.  Porque resulta que acá abajo, no hay cansancio.  Sus patrones de ustedes calcularon que el movimiento del magisterio en resistencia se iba a desinflar por las vacaciones.  Ya vieron que se equivocaron (mmh, ya son más de 3 fallas en la evaluación, si les aplicaran la “reforma educativa” ya estarían despedidos, y buscando empleo en Iberdrola al lado del psicópata).

El movimiento no hace sino crecer y concertar simpatías, mientras ustedes sólo convocan antipatías y repudio.

Como lo señalamos desde hace casi dos meses, el movimiento ya acuerpa distintos sectores sociales y, claro, sus demandas específicas.  Por ejemplo, no están ustedes para saberlo, pero ya piden la destitución de Cancino (supuesto presidente municipal de San Cristóbal de Las Casas, ciudad que está, tal vez ustedes lo ignoren, en el estado de Chiapas, México) y el encarcelamiento de Narciso, jefe paramilitar de la ALMETRACH.  Eso y otras cosas que demandan, que se pueden resumir en una sola: buen gobierno.  ¿Qué tarda en que se den cuenta de que ustedes, tod@s, estorban, que no son sino parásitos que enferman a la sociedad entera arriba y abajo?

Pero entonces pasa que ustedes se sienten muy seguros y mandan a sus perros a robarles sus pocas pertenencias a esas personas que se están manifestando PACÍFICAMENTE.  Bueno, pues entonces nosotros, nosotras, zapatistas, volveremos a juntar alimentos y los enseres que les quitaron, y se los volveremos a mandar. Así una y otra vez.

En lugar de hacer declaraciones ridículas (como la del deslinde del cobarde ataque al plantón POPULAR en San Cristóbal), podrían contribuir en algo a la distensión necesaria para que ese diálogo y negociación siga el rumbo que determinen sus partes (que, les recordamos, es entre el Gobierno Federal y la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación), harían bien en amarrar a sus perros (de nombres Marco Antonio, Domingo y Narciso).  Sólo sílbenles agitando un fajo de billetes y verán cómo obedecen.

Y un consejo no pedido: no jueguen con lumbre en San Juan Chamula, el descontento y la división que, dentro de ese pueblo, están fomentando ustedes con sus tonterías, puede provocar un conflicto interno cuyo terror y destrucción no se podrán tapar ni con bots en redes sociales, ni con inserciones pagadas, ni con el poco dinero que Manuel Joffrey Velasco Baratheon-Lannister haya dejado en la tesorería estatal.

Entonces tranquilos.  Paciencia y respeto.  Esperemos que el gobierno federal dialogue y negocie con seriedad y compromiso.  No sólo porque las demandas magisteriales son justas, también porque tal vez ésta es de las últimas veces en que habrá con quién dialogar y negociar.  Es tal la descomposición que han alentado ustedes que, pronto, no sabrán ni a quién calumniar.  Además, claro, que no habrá nadie en el otro lado de la mesa.

¿Entendido?

Entonces, ustedes a lo suyo, es decir, al Photoshop, las páginas de sociales, las fiestas de relumbrón, los anuncios monumentales, las revistas del corazón, la frivolidad de quien carece de inteligencia.

¿Gobernar?  ¡Vamos, eso ya no se los creen ni los medios de paga!

Mejor háganse a un lado y aprendan, porque éste es Chiapas, y el chiapaneco es mucho pueblo para gobierno tan miserable.

-*-

A quien corresponda:

Como zapatistas que somos es nuestra convicción, y obramos en consecuencia, que se deben respetar las decisiones, estratégicas y tácticas, del movimiento. Y esto va para todo el espectro político.  No es legítimo querer montarse en un movimiento para tratar de llevarlo a un lado fuera de su lógica interna.  Ni para frenarlo, ni para acelerarlo.  O si no, digan claro que lo que quieren es usar ese movimiento para sus fines y propósitos particulares.  Si lo dicen, tal vez el movimiento sí los sigue, tal vez no.  Pero es más sano hablarle claro al movimiento sobre lo que se busca ahí.  ¿Cómo quieren dirigir si no respetan a la gente?

Nosotras, nosotros, como zapatistas que somos, no vamos a decirle a nuestras maestras y maestros actuales (l@s de la CNTE y los pueblos, barrios y colonias que apoyan) qué hacer o qué no.  Esto les debe quedar bien claro a todas esas nobles personas que luchan: CUALQUIER MOVIMIENTO QUE HAGA EL ZAPATISMO EN LO QUE SE REFIERE AL MOVIMIENTO POPULAR EN CURSO (o los que surgirán después) LO HARÁ SABER PÚBLICAMENTE CON ANTELACIÓN y siempre respetando sus tiempos y modos.  Tanto la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, como los movimientos de pueblos originarios, colonias y barrios que apoyan al magisterio, deben entender que, cualquiera que sea su decisión, sea sobre el rumbo, el destino, los pasos y la compañía que decidan, recibirá nuestro respeto y saludo.

Lo de “disfrazarse” de zapatistas y gritar consignas que involucren a otr@s, está bien para que se diviertan un rato y tener una medallita en su curriculum, pero no deja de ser falso y deshonesto.  Nosotr@s no nos alzamos para repartir comida chatarra robada, sino por democracia, libertad y justicia para tod@s.  Si creen que es más revolucionario y que ayuda más al movimiento, romper vidrios y robar comida que ni alimenta, pues que el movimiento valore y decida.  Pero aclaren que no son zapatistas.  A nosotr@s no nos molesta ni enfada que nos digan que no entendemos el momento coyuntural, o que no tenemos visión de las ventajas electorales, o que somos pequeño burgueses.  Sólo nos interesa que esa maestra, ese maestro, esa señora, ese señor, ese joven o jóvena, sientan que acá, en las montañas del sureste mexicano, hay quienes les quieren, les respetan y les admiran.  Aunque en las grandes estrategias electorales o revolucionarias no entren en juego esos sentimientos.

Porque el magisterio en resistencia y, como se hace cada vez más frecuente, el movimiento popular que se acuerpa en torno a él, enfrenta condiciones adversas muy difíciles.  No es justo que, en medio de todo esto, tenga que sortear ya no sólo barrotes, toletes, escudos, balas y, ahora, paramilitares; también “consejos”, “orientaciones”, y órdenes “con-todo-respeto” indicándoles lo que deben o no hacer, avanzar o retroceder, es decir, pensar y decidir.

Nosotras, nosotros, zapatistas, no les mandaremos comida chatarra a quienes luchan, sino tostadas de maíz no transgénico, no robadas, sino hechas con el trabajo de miles de hombres y mujeres que saben que ser zapatista no es ocultar el rostro, sino mostrar el corazón.  Porque las tostadas zapatistas, recalentadas, alivian el hambre y alientan la esperanza.  Y eso no se consigue en las tiendas de conveniencia ni en supermercados.

Desde las montañas del Sureste Mexicano.

Subcomandante Insurgente Moisés.                          Subcomandante Insurgente Galeano.


México, 21 de julio del 2016.

Comentarios en la presentación del Documental “Retratos de una búsqueda”

Comentarios en la presentación del Documental “Retratos de una búsqueda”. Cineteca Nacional Julio 10, 2016.