lunes, 12 de enero de 2009
Reducen aerolíneas costo de boletos hasta en 50%
Carmen Aristegui- Hernández
Los grandes cárteLes no fueron
La forma de operar de los atacantes de Televisa Monterrey no coincide con la de los cárteles de la droga en el país. Aunque muchos han señalado al narcotráfico, dentro de la misma televisora dicen que no han publicado nada especial sobre esos grupos. Entonces ¿quiénes fueron?
Por Hugo Gutiérrez
Entre los propios reporteros de Televisa Monterrey hay confusión. Cuando hay un ataque del crimen organizado contra los medios de comunicación, siempre se debe a una publicación. Pero dentro de la misma televisora dicen que son muy cuidadosos de la información relacionada con la delincuencia organizada.
Que no difundieron alguna información extraordinaria en relación al narcotráfico.
Entonces, se preguntan ¿por qué a ellos?
Incluso, públicamente declararon que quizás es un mensaje contra todos los medios de comunicación, pero los eligieron a ellos para buscar la caja de resonancia en la Ciudad de México.
Y los que más saben de este tema, cuestionan la manera en que operaron quienes accionaron el arma calibre 40. Hay varias características que no corresponden con la operación de los grandes cárteles de la droga.
Fueron muy exactos para no causar daño a nadie en la televisora. Incluso, midieron muy bien el momento en que ese día acabara la fila de personas que estuvo esperando afuera del canal, porque regalaron juguetes esa tarde.
Regularmente, el crimen organizado dispara sobre cristales de instalaciones y no le importa si causa algún daño a la gente. Lo han hecho con armas largas y metralletas.
Quien disparó la pistola calibre 40 pudo ser un inexperto. Aunque le disparó a un portón de 3 metros de altura, el descontrol provocó que los balazos fueran subiendo hasta que tres de ellos se perdieron en el aire. Entonces, el agresor tuvo que volver a bajar el brazo para seguir disparando sobre el portón. La forma en que dejaron los disparos comprueba esto.
El vehículo Trans Am color rojo con placas de Texas fue abandonado apenas a cuatro cuadras de la televisora. El arma estaba adentro.
Los comandos de cárteles del narcotráfico no abandonan sus armas y sus vehículos a unas cuadras de donde cometen, incluso, homicidios.
Además, regularmente utilizan automóviles y camionetas grandes de reciente modelo, con placas colgadas. La leyenda escrita en una manta que dejaron en el lugar tiene una correcta redacción.
De hecho, aparece la palabra “narcomandatarios”, un vocablo compuesto en el que utilizan el término “mandatario”, muy raramente usado por las personas. Regularmente la gente, y más quienes están relacionados con la delincuencia, les llaman gobernantes o políticos, pero no mandatarios.
Por todos estos factores, dentro de la propia Televisa Monterrey muchos descartan que el atentado haya sido producto de un cártel.
Si no fue un comando del crimen organizado, ¿quién más tendría el interés de golpear a un medio de comunicación?
Fuente: Reporte Índigo.
Aristegui regresó a la radio con programa "crítico y plural"
Después de un año de ausencia en las ondas hertzianas, Aristegui recordó que hace alrededor de un año su proyecto fue interrumpido en la tarea de informar y consideró un "silenciamiento" su salida de W Radio el 4 de enero de 2008.
Durante nueve minutos, la periodista agradeció las muestras de apoyo del auditorio tras su salida de W y ofreció un programa de noticias "crítico, incisivo y plural".
Durante el transcurso del programa, la periodista recibió múltiples felicitaciones tanto del público como de personalidades de la política y el espectáculo, como el actor Daniel Giménez Cacho y el ex senador Diego Fernández de Cevallos.
Además, recibió el apoyo del director editorial de EL UNIVERSAL, Jorge Zepeda Patterson, quien resaltó que "la libertad de expresión es la sangre que hace fluir la vida, que hace funcionar el cerebro de las sociedades".
Su nuevo espacio se difundirá de lunes a viernes entre las 06:00 y las 10:00 horas.
Lydia Cacho
Plan B
12 de enero de 200
Jóvenes por la muerte
Enciendo la radio y escucho una voz juvenil, con el tono de denuncia de quien defiende sus principios con pasión. La mujer reclama con indignación que la Cámara de Diputados se negó a discutir la pena de muerte, a continuación explica que el Partido Verde Ecologista está por la defensa de nuestros derechos y por la seguridad, es por eso que propone la muerte para asesinos y secuestradores. Acto seguido el partido político se anuncia como el espacio que sí representa a la juventud.
En el mundo los partidos verdes se caracterizan por la defensa de la vida en general, han surgido y se han sumado a las grandes causas contra la crueldad hacia los animales, contra la destrucción del ecosistema, a favor del respeto a la diversidad, por una vida más sana para todos los seres vivos. Las campañas más importantes de los verdes españoles, por ejemplo, se vinculan con el acceso al agua limpia para toda la gente del planeta, contra la matanza de focas, ballenas y otras especies en peligro de extinción; invierten y promueven, entre las nuevas generaciones el reciclaje y la reutilización de basura; motivan la conciencia sobre los efectos nocivos de la guerra y la violencia para la tierra y sus habitantes.
La gente joven que se ha decepcionado sistemáticamente de las y los políticos corruptos, ineficientes y egoístas, encontró en los movimientos pro-ecologistas un espacio para reafirmar la vida, la salud, la solidaridad social y el bienestar. Raúl Romeva, eurodiputado por el Partido Verde español, ha denunciado los feminicidios de mujeres mexicanas, argumentando el derecho a una vida libre de violencia. Romeva tiene un grupo de aliados jóvenes impresionante; ha logrado establecer prioridades para hacer política al interior de su país y en el Parlamento Europeo. Solamente en Chihuahua durante el 2008 se reportaron mil 653 ejecuciones, sin tomar en cuenta los feminicidios. Alguien debería informar a los jóvenes verdes que la violencia de estado sólo genera más ira, más descomposición social y más miedo.
En México en cambio, el líder del Partido Verde es un muchachito de vocabulario limitado, más preocupado por su look mientras camina las playas de Cancún en un hotel de lujo, que por la defensa del ecosistema. Su partido carece de liderazgo y es un simple comodín electoral para el PAN y el PRI.
La mayoría de jóvenes en las cúpulas del Verde mexicano, son intolerantes, limitados en sus principios, poco capaces de demostrar la congruencia entre su discurso y su vida cotidiana. El mexicano es el único partido joven, de aparentes causas ecologistas, que propone la pena de muerte. Por si fuera poco, en un país con los más altos índices de impunidad y corrupción y un elevado margen de fabricación de sentencias sin elementos de prueba. Más allá de la estulticia de semejante campaña, el oportunismo para reivindicar la violencia contra la violencia resulta ofensivo.
Afortunadamente, el Partido Verde no representa a la juventud mexicana, sino a una élite de jóvenes oportunistas que, como los nuevos anuncios de la Pepsi, proponen que las causas que deben defender son las de su bolsillo, burlándose de la pobreza, de la violencia y de la hambruna que abate al país. Afortunadamente, cada día me encuentro por todo México mujeres y hombres jóvenes con hambre de paz, de justicia, que no se resignan ni se dejan vencer por el cinismo o las viejas costumbres del poder.
John M. Ackerman - Secretarìa de la Disfunción Pública
El concurso para encontrar “el trámite más inútil” que culminó la semana pasada es la cereza del pastel de la incapacidad de los gobiernos panistas para elaborar una estrategia integral de combate a la corrupción. Más que fortalecer el principal órgano responsable de limpiar la administración pública federal, la Secretaría de la Función Pública (SFP), tanto Vicente Fox como Felipe Calderón han dejado esta estratégica institución en manos de políticos sin el menor conocimiento de la materia, quienes han utilizado el puesto como trampolín político.
En 2000, el “gobierno del cambio” nombró a Francisco Barrio, ex-gobernador de Chihuahua, como titular de la Secretaría de la Contraloría y Desarrollo Administrativo (Secodam), instancia antecesora de la SFP. El político no destacó en su nuevo trabajo y pronto lo abandonó para colocarse como coordinador de la fracción parlamentaria del PAN en la Cámara de Diputados. Fue entonces relevado en el gabinete por su fiel amigo y ex-secretario de gobierno de Chihuahua, Eduardo Romero, cuya escasez de experiencia en la materia solamente fue superada por su ausencia de carisma y arrojo.
Calderón ha seguido la misma línea de Fox. Su primer titular de la SFP fue Germán Martínez, quien se limitó a utilizar el puesto para promover su candidatura a la presidencia del PAN. Después de una breve gestión de 10 meses sin resultados o iniciativas notables, Martínez fue relevado por Salvador Vega, titular del organismo, quien como otros integrantes del actual gabinete federal se sostiene más por su amistad con el titular del Ejecutivo que por alguna capacidad demostrada en las trincheras del quehacer gubernamental.
Los resultados están a los ojos de todos. México se mantiene entre los países más corruptos, de acuerdo con todos los índices internacionales, como Transparencia Internacional, Global Integrity y el Barómetro de las Américas. Una de las explicaciones de esta falta de efectividad es la impunidad. En una revisión efectuada en 2005, la Auditoría Superior de la Federación descubrió que el gobierno federal logra cobrar apenas 0.03 por ciento de todas las multas impuestas por la SFP, ya que los sancionados casi siempre ganan sus litigios en los tribunales.
Pero la razón principal del fracaso de las estrategias de la SFP durante los últimos ocho años es la falta de voluntad política. Ya en estas páginas, Irma Eréndira Sandoval ha señalado la vacuidad del nuevo Programa Nacional de Rendición de Cuentas, Transparencia y Combate a la Corrupción (La Jornada, 24 de diciembre de 2008). Este presunto “programa”, como los que lo antecedieron, no es más que una cortina de humo. En lugar de implantar estrategias nuevas o promover las reformas necesarias, el gobierno prefiere hacerse de la vista gorda y distraer nuestra atención con “pan y circo”: propaganda, declaraciones y concursos vacíos.
Respecto del concurso del “trámite más inútil”, es de celebrarse que durante los 52 días que duró la convocatoria más de 20 mil personas acudieron a denunciar abusos de la autoridad. Este nivel de participación demuestra tanto el tamaño del problema como la buena voluntad de los ciudadanos que aspiran a participar en la construcción de soluciones.
Sin embargo, en lugar de tomar en serio esta ejemplar muestra de participación ciudadana, el gobierno se limitó a organizar una ruidosa actividad, donde el Presidente entregó cheques a los tres ciudadanos “ganadores” como si se tratase de un concurso de recetas de cocina. Con poca elocuencia, externó su voluntad de transformar la administración pública y prometió “no echar en saco roto” las miles de denuncias recabadas. En ningún momento habló de castigar a los responsables de los actos denunciados ni se comprometió a entregar resultados concretos en materia de combate a la corrupción.
De manera conveniente, en su informe final, los integrantes del jurado del concurso (Federico Reyes Heroles, Leo Zuckerman, Maricarmen Cortés, María del Carmen Pardo y Fuad Juan Zazar) explícitamente deslindan al gobierno de cualquier responsabilidad. “En opinión del jurado, la gravedad de los casos considerados en el ejercicio no pueden ni deben considerarse como patrones generalizados de comportamiento.” En su opinión, el concurso es apenas un “ejercicio ciudadano” que no puede servir como un “diagnóstico” de la realidad.
La limpieza del proceso de selección de los ganadores también está en entredicho. El informe señala que los cinco miembros del jurado dedicaron un total de 108 horas para evaluar las 21 mil 113 denuncias. Esta cifra se desdoblaría en un total de 21 horas de reuniones colectivas entre todos, lo cual implicaría la revisión de un promedio inverosímil de mil denuncias por hora. El informe no resume la metodología utilizada ni las razones para haber seleccionado a los tres casos ganadores. Tal como ha argumentado también en estas páginas Bernardo Bátiz (La Jornada, 10 de enero), todo indica que hubo línea política en el fallo.
Una vez más, la SFP y los gobiernos de la alternancia han ratificado tanto su compromiso con la simulación en el combate a la corrupción como su abierto desprecio a la participación plena de una ciudadanía vigorosa y comprometida.
Astillero
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
■ Tragicómico año electoral
■ Pugnas por candidaturas
■ Zimapán, un retroceso más
El año electoral arranca con un panista formalmente gobernante que se emociona en Washington por ser el primero de la lista de recepciones oficiales, un (pre)candidato presidencial perredista que maniobra para dejar el barco electoral enchuchado y pasarse a las balsas de emergencia que con él Convergen y Trabajan, y un priísmo que ve a Quique Gaviotón disparar comerciales de salva a diestra y siniestra mientras el acechante Manlio Fabio espera el momento de retomar delantera por la vía de la maña histórica que mata (políticamente) carita atlacomulca. El espectáculo político del año en curso se anuncia tragicómico a la luz de las desgracias económicas por venir, a las que el hacendoso secretario Carstens atribuye mimética forma de cero en cuanto a crecimiento económico anual, vaticinios a los que el antes sudoroso Memo Ortiz califica de optimistas desde el Banco de México, que prevé números negativos y no solamente estancamiento.
Los panistas esperan crecimiento legislativo deficitario, metidos entre las patas de los caballos rabiosos del felipismo y el vicentismo nuevamente confrontados. Éste puede ser el año del tosco Manuel Espino, quien pretende ganar puntos a costa del desinflado e insoportable Germancito Martínez. Empequeñecido, o reducido a un poco más de su talla real, el antes poderoso César Nava trata de aparentar que algo de poder felipense le quedó, mientras le carcomen las versiones de que fue desalojado de la secretaría particular de Los Pinos por haber hecho comentarios altamente críticos y burlones del ex secretario de Gobernación, cuya memoria es intocable en el ámbito íntimo del calderonismo. Véase como se vea la situación del partido cada vez más azul oscuro que blanco, lo cierto es que los pronósticos para las elecciones intermedias poco le favorecen, establecida desde ahora la percepción de que el PRI viene de regreso y que la distribución de diputaciones federales en este tramo intermedio de 2009 no alentará los sueños felipenses de tener fuerza legislativa suficiente para impulsar sus proyectos de por sí ya bastante ajados.
La izquierda parece encaminada a llegar dividida a las urnas este año. El juego de las semanas por venir se llama lista de candidatos. Los Jesuses lanzaron a los Andreses el anzuelo simplón de las invitaciones para que envíen sus propuestas de candidaturas a las oficinas institucionales del sol azteca, a lo que el lopezobradorismo respondió zafándose del garlito infantil y acelerando el proceso de conformación de la nómina de aspirantes que competirían bajo las siglas de los partidos que en los hechos dirigen Dante Delgado y Alberto Anaya. Según eso, en las postulaciones de la renacida coalición Por el Bien de Todos (a la que concurren solamente dos de las tres partes originales) serán incluidos personajes que destacaron en los movimientos populares de rechazo al fraude electoral y a la privatización del petróleo, pero la dinámica natural de los arreglos de cúpulas podría llevar a las boletas electorales a ejecutantes de artes de oportunismo y engaño si no hay participación y presión reales de quienes han empujado una alternativa política y electoral que no merece (como en 2006 con los chuchos, y muchísimas veces en otros comicios) ser convertida en masa votante para favorecer a personajes turbios que muchas veces están predestinados a la traición de la que luego se quejarán quienes no se opusieron a tiempo a esas postulaciones.
Aunque en realidad la vía electoral sólo ofrece esperanzas desvaídas de cambio y firmes promesas de decepción, como demuestra lo sucedido en Zimapán, Hidalgo, donde una larga y vigorosa lucha contra un tiradero de desechos tóxicos promovido por empresarios españoles creyó encontrar en las urnas la manera adecuada de expresar sus puntos de vista y construir opciones institucionales de combate al negocio ambiental, bien visto e impulsado por autoridades estatales y federales. El pasado 9 de noviembre hubo elecciones municipales y el Movimiento Todos Somos Zimapán, más otras agrupaciones de defensa ambiental y ciudadanos sin adscripción grupal, obtuvieron el triunfo por 6 mil 565 votos en favor de José María Lozano, dirigente del movimiento antes dicho y postulado por el PRD, contra 5 mil 514 del candidato propuesto por el PRI y el Panal. La diferencia de ocho puntos porcentuales fue echada abajo el pasado día 7 por la sala regional, con sede en Toluca, del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación mediante un súbito y extraño ataque de juarismo que invalidó los comicios porque sacerdotes impulsaron desde el púlpito y mediante impresos la defensa de la vida que, en el contexto local, se asociaba con la propaganda formalmente perredista, que pedía apoyar al candidato opositor al tiradero tóxico para así votar por la vida. La defensa de la separación entre Iglesia y Estado, y la sanción a formas de injerencia clerical en procesos electorales, sería válida si ese mismo poder electoral federal hubiese demostrado una pizca de tal celo en los comicios presidenciales de 2006, cuando empresarios, extranjeros y el entonces presidente Fox intervinieron abiertamente en contra de un candidato que apenas logró una diferencia oficialmente reconocida de medio punto porcentual a su favor.
El rigor jurídico de los juzgadores federales significa, en los hechos, tiempo de oro para que el consorcio hispano Abengoa-Befesa y los funcionarios federales y estatales que impulsan el confinamiento de residuos industriales consoliden jurídica y prácticamente las operaciones que ya comenzaron en ese poblado de la entidad gobernada por un priísmo caciquil y depredador, siempre dispuesto a hacer buenos negocios privados en asuntos públicos, así sean tan delicados como los ambientales, sobre los cuales, en todo el país, pasea la amenaza de la corrupción oficial asociada a intereses económicos extranjeros, particularmente los españoles.
Y, mientras es de celebrarse que Carmen Aristegui vuelva a los micrófonos públicos, ¡hasta mañana, en esta columna que, ya de regreso, da a todos sus mejores deseos!
Llaman transportistas de Veracruz a paro nacional
PROTESTAN MILES CONTRA LA MATANZA EN PALESTINA
Hoy todos a ampararse contra la Reforma Energética
Muñoz Ledo advierte: Agotada, la vía electoral
El regreso de Aristegui
JENARO VILLAMIL
Detención de mis escoltas es parte del bloqueo de Calderón: AMLO
No es que se haya cumplido con la ley, sino para hacer escándalo y ponernos piedras en el camino, dijo.
Ciro Pérez, enviado
Puero Peñasco, Sonora. La detención del grupo de seguridad que apoya las giras de Andrés Manuel López Obrador “fue una provocación”, insistió el tabasqueño, quien sostuvo que es parte del bloqueo y de los obstáculos “de quienes no nos ven con buenos ojos, de quienes les molesta mucho lo que hacemos, de (Felipe) Calderón y sus achichincles”.
En entrevista, López Obrador enfatizó que el equipo de seguridad tenía en regla los documentos que les fueron requeridos, “sin embargo actúan así. No es para que se cumpla la ley como ellos dicen, es para hacer el escándalo, para ponernos piedras en el camino, para obstaculizarnos. Cuando anda uno en esto es necesario tener una protección, porque cuando quieren hacer algo lo hacen, lo hicieron con Colosio y lo hicieron con Kennedy. Y en el caso de los cinco agentes de la Policía Bancaria e Industrial, su trabajo es que no tengamos contratiempos”, insistió.
Agregó que, si de acuerdo con el “gobierno usurpador” y la mayoría de los medios de comunicación, el Movimiento Nacional en Defensa de la Economía del Pueblo, del Petróleo y de la Soberanía Nacional no representa nada, no se explica por qué hay un ataque permanente, “son numeritos que montan, como no tienen cómo frenarnos, tienen que buscar alguna manera. Pero no lograron nada ni van a conseguir nada con toda su campaña de desprestigio.
Durante el cuarto día de gira de trabajo por 21 municipios Sonora y Baja California, el "presidente legítimo" manifestó que el aumento de 4 por ciento anunciado a los salarios mínimos es una burla toda vez que el precio de la canasta básica se ha encarecido en 14 por ciento.
“Esto es inaceptable cuando hay funcionarios que ganan hasta 600 mil pesos mensuales o se autorizan hasta 6 mil millones de pesos para atención médica privada, se hacen hasta cirugías plásticas y en los municipios que aquí mismo en Sonora se conocen como del tercer mundo, tienen un presupuesto anual, en el mejor de los casos, de 10 millones de pesos al año. Esto es lo que gastan en atención médica los altos funcionarios, representa varios siglos del presupuesto de esos municipios”, condenó.
Respecto del diesel recordó que fue una propuesta de su campaña el bajar el precio de los combustibles y de la luz, “propuesta que nos robó el pelele de Calderón pero que incumplió, y ahora resultó hasta un mal copión porque está haciendo exactamente lo contrario”.
Asimismo, López Obrador reiteró la invitación al pueblo de Sonora para acudir el próximo 25 de enero a la asamblea informativa nacional, que se llevará a cabo en el Zócalo de la Ciudad de México, donde se presentará el plan para defender la economía popular.
Ante la crisis, simulación
MIGUEL ÁNGEL GRANADOS CHAPA
Ante los efectos de la crisis global, y los impactos autóctonos, los que surgen de las contrahechuras de la economía mexicana, el gobierno federal escogió no una estrategia que permita eficazmente combatirla, sino una que parezca que la combate. Eligió la ruta de la simulación, y contó para ello con las "fuerzas vivas de la sociedad".
Por eso no quiso emitir, al modo en que lo hizo en octubre, un programa gubernamental de auspicio a la actividad económica, sino que le dio la apariencia de un acuerdo y así lo denominó y presentó: Acuerdo Nacional a Favor de la Economía Familiar y el Empleo. A diferencia del firmado el 21 de agosto, referido a la seguridad, la justicia y la legalidad, en el suscrito el 7 de enero no hay un listado de compromisos de los firmantes. Cuando más, expresaron su adhesión o su apoyo al programa del Ejecutivo, resumido en cinco ejes que de pronto, sin mínima conciencia de la ingeniería, se trasmutaron en otros tantos pilares, integrados a su vez por un total de 25 medidas.
No sólo carece el presunto acuerdo de esos compromisos, sino que los firmantes lo conocieron sólo al momento de suscribirlo. Y lo hicieron sin apuro alguno, porque su rúbrica no los obliga a nada. De modo que no tomaron a pecho las palabras iniciales del presidente Felipe Calderón, quien dijo que los había convocado "para que asumamos un compromiso común", para lo cual, añadió, "nos hemos reunido los sectores público, privado y social y las diferentes instancias de gobierno para sumar voluntades y acciones", y hasta llegó a decir que el documento a cuya firma se había llamado "incluye una amplia participación y compromiso de todos los actores".
Eduardo Bours, el gobernador de Sonora, reveló que no hubo participación de los gobernadores en la redacción del documento. Cuando se le avisó que el propósito era que los titulares del Poder Ejecutivo en los estados lo hicieran suyo, pidió conocerlo, y cuando le explicaron que aún no estaba listo, pero que lo conocería en la ceremonia ritual a realizarse en el Palacio Nacional, se abstuvo de asistir siquiera, y, por lo tanto, hay un hueco en la lista de los gobernadores.
El discurso de Natividad González Parás, quien habló en nombre de los gobernantes locales, así lo confirma: "Los gobernadores vemos con simpatía las medidas que se han asumido en lo general por el gobierno de la República (...) Aquí se van a fijar compromisos generales y deberemos, cada uno de los sectores del país y de los niveles de gobierno, posteriormente, establecer medidas más específicas...". Por lo pronto, dijo, "nos sumamos a este gran Acuerdo Nacional". ¿Por qué debe sumarse quien es parte del consenso?, nos preguntamos tras oír ese primer ejemplo de la "tempestad de frases vanas" que acompañaron a la firma del acuerdo, y de las que aquí escogemos algunas.
José Luis Aguilera, quien preside el Consejo Agrario Permanente, fue más franco. Se limitó a decir que "el compromiso de la mayoría de las organizaciones" del CAP "es mantener un diálogo abierto y colaborar con el gobierno, en donde privilegiemos nuestras coincidencias...", etcétera.
Igualmente sincero, y en sentido contrario a la sistemática prédica del sector privado contra el intervencionismo de Estado, el líder del Consejo Coordinador Empresarial, Armando Paredes, dijo que ante "la espiral de descenso en la economía, los sectores privado y social difícilmente pueden contrarrestar esa dinámica; es en el Estado en quien recae la principal responsabilidad".
El acuerdo cuya iniciativa correspondió al gobierno, expresó Paredes, "ratifica el liderazgo firme y comprometido de nuestras autoridades orientando a generar las condiciones necesarias para afrontar la crisis". Puesto que se trataba de enunciar compromisos, señaló que el de la cúpula del sector privado consiste en hacer lo que hace, "mantener en operación la planta productiva y sensibilizar a las empresas asociadas sobre la importancia de mantener estable hasta el máximo posible la plantilla laboral". Para fortalecer su dicho dijo que las cadenas comerciales afiliadas a la ANTAD (Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales) y sus proveedores, afiliados a otras agrupaciones empresariales, "negocian descuentos y promociones que habrán de ofrecer a sus consumidores día a día y en todas las tiendas y a lo largo del año". Una investigación del diario Reforma probó, en sentido contrario a esa afirmación, que la mercancía ha sido reetiquetada y que los precios subieron de diciembre a enero en amplia proporción.
Campeón de la retórica vacua, de la demagogia insulsa como corresponde a su vetusta condición, el dirigente cetemista Joaquín Gamboa Pascoe no expresó compromiso propio alguno. Sí obligó, en cambio, y sin base, a "todos los mexicanos (...) conforme nuestras posibilidades y alcances, a hacer la aportación que corresponda, sumando esfuerzos". También reveló la ajenidad de la CTM al presunto acuerdo cuando manifestó que en él "se le da una consideración especial a los trabajadores del sector obrero, que tengo el honor de representar en este momento". No soportó las ganas de retroceder al pasado al que pertenece y espetó el ritual "gracias, señor Presidente".
Y en vez de asumir compromisos, celebró que el documento que estaba por firmar los contenga a favor de sus representados y señale que "cualquier modalidad que corresponda a la relación laboral (...) tendrá necesariamente que respetar los derechos de los trabajadores" que (atención al altisonante y vacío énfasis oratorio) "le consigna, le respeta, le consagra el artículo 123".
El panista chihuahuense Gustavo E. Madero no entró en embrollos. Como presidente de la Mesa Directiva del Senado, simplemente indicó que esa cámara "garantiza su compromiso de que estaremos analizando todas aquellas propuestas de reformas legales que nos permitan defender el empleo, la economía de las familias y (un añadido por su cuenta) la competitividad de nuestro país". Apenas lo superó en la vaguedad del compromiso su homólogo en San Lázaro, el diputado César Duarte, quien, "con responsabilidad" (ojo, no frívolamente, no impensadamente), expresó "...nuestro compromiso para trabajar estrechamente con los demás poderes, con todos los órdenes de gobierno para que la población mexicana sea atendida por sus gobernantes en este momento histórico".
Las palabras son aire y van al aire, definió el poeta. Por eso todos los presentes se lanzaron a firmar ese evanescente documento. Con esos conjurados es fácil adivinar a quién corresponderá la victoria en el combate a la crisis...
El villano del calderón
• El otro chisguete
• El levantamiento social…
Por el regreso de Carmen Aristegui
Donde termina la ley, mi estimado, comienza la tiranía. Espectacular comienzo de año con las clásicas estupideces vertidas por el Gymboree presidencial que, sumadas a las de su jefecito, colocan a México al borde del ridículo y de la casa de la risa histérica… en un perfecto timing para poner los puntos sobre las íes en la relación bilateral con el gobierno de Barack Obama.
La perlita de enero escupida hace unos días en la típica encerrona anual ante embajadores y cónsules, my friend, donde Felipe, encarrerado, recetó un país digno de una buena dosis de prozac (que por mucho rebasa al utilizado por Fox… nuevo villano favorito del calderón), ha desencadenado muecas y comentarios simpáticos alrededor de la salud (evidentemente mental) del inquilino de Los Pinos, que percibe el actual caos (restrained term, eh?) como ficticio… y que el desmadre del tsunami rojo que da la vuelta en los cintillos de las principales cadenas de televisión internacionales es un mito genial, no deja de ser, digamos, alarmante.
Sobre todo porque una vez más Felipe se pone para la foto… bilateral que tanto se ha cacareado en torno al seductor encuentro que sostendrá con Obama el día de hoy... y donde la imagen de México no pasa por sus mejores momentos ante la escalada de violencia, la ausencia del Estado, el nulo marco jurídico y la absoluta impunidad que por mucho ha rebasado la estrategia whatever de estos improvisados en el poder (del no poder)… y que con las palabras de Felipe sobre las muertes, que lamentamos, están vinculadas a la lucha entre los criminales… faltó que le agregara el detallito de que, efectivamente, esos criminales están encapsulados en su administración.
Así que si la visión de Calderón es de paz y tranquilidad, concordia política y de que su barco de gran calado navega estable ante la emocionante adversidad sumado al atractivo y tan atinado pronóstico de su secretario (otro genio) Agustín Carstens, sobre el inofensivo “catarrito”, mi estimado, más vale prepararse para lo peor en este año catalogado ya como el de la tormenta perfecta. Este año donde el plan anticrisis presidencial fue, hay que reconocerlo (no seamos pesimistas ni hojaldras) coherente con todo lo desarrollado por su (des)gobierno: un chisguete.
Y si a la congruencia del sello del chisguete sexenal le complementa las distintivas ligerezas de aventar pendejadas al micrófono, nada como aquellita de que este año el crecimiento será del cero por ciento…
¡¡Chingón!!
¿No crecer ni madres habrá sido el estupendo vaticinio sobre las secuelas del inocuo “catarrito”...? ¿Dónde quedaron las cifras alegres y la solidez del barco de gran calado…? ¿O será que el chisguete y la mediocridad (paralelas a la corrupción y el cinismo) son las metas emocionantes de este sexenio…? Y si de escupir drinks mañaneros se trata, nada como despertar y encontrarse con el tubazo del Banco de México, de Guillermo Ortiz, recetando que con la pena, mi Agustín, pero tu pronóstico del cero crecimiento (u shithead) es... optimista.
A lo que el descansado respetable preguntaría, por supuesto con inmensa ingenuidad, si el no crecer es la estimación optimista… ¡¿cuál será, según el banco central, el escenario pesimista ya navegando los emocionantes mares de los números negativos…?!
Porque como siempre Felipe y su caterva de imb… erbes pretenden insultar la inteligencia doméstica y, de pasados, la internacional. ¿Ajá?
Sencillo.
Los choros presidenciales sobre instruir a embajadores y cónsules para promover la imagen de nuestro país como uno de paz y tranquilidad sirven para… hacer el ridículo (qué… ¿hay de otros?). Los informes sobre el desmadre, la infiltración de la organizada delincuencia en su (des)gobierno y el fracaso de la estrategia contra los traviesos, es motivo de la descomunal presión que no tarda en sentirse, y donde las puntillosas señales enviadas ¿diplomáticamente? en entrevistas por Bush y recientemente por Chertoff preparan el terreno para lo que ya está en sus tableros de valoración...
Y si como cereza del pastel le añade un muy interesante escenario que ya circula en poderosos despachos de analistas financieros internacionales, donde “The Calderon Effect”, con su arreglón PRI-PAN, se va en este año al nabo sin escalas, con el agravante de un peligroso levantamiento social detonado por la severidad de la crisis… Felipe para estos amigous, otrora aliados my friend, ya trae respiración artificial…
You´re welcome.
gomezalce@aol.comNueva derecha radical asume rol más público
Intentan vetar iniciativas de corte progresista
Salvador Frausto Crotte
El Universal
Lunes 12 de enero de 2009
sociedad@eluniversal.com.mx
Luego de la despenalización del aborto en la ciudad de México, en abril de 2007, se multiplicaron las marchas “en favor de la vida” en decenas de ciudades del país. En Celaya, León, Guadalajara, Guanajuato, Tampico y Distrito Federal, entre otras localidades, se escucha otra vez el “¡Viva Cristo Rey!” que distinguió a los cristeros que resistieron las restricciones en materia religiosa que impuso Plutarco Elías Calles. A estas manifestaciones acuden miles de católicos radicales que militan en grupos ligados a la jerarquía eclesiástica.
A diferencia de los cristeros de los años 20, que empuñaron fusiles para oponerse al Estado laico, hoy las armas son la movilización, el cabildeo y el reclutamiento de jóvenes en colegios privados. “En México hay un millón de católicos practicantes menores de 25 años”, dice el padre Pedro Agustín Rivera Díaz, rector de la Antigua Basílica de Guadalupe y comandante en jefe de la Alianza Mexicana por la Vida, asociación con más de 100 grupos conservadores como Provida, Red Familia y Caballeros de Colón.
Esta cruzada busca combatir legislaciones y políticas públicas de corte progresista. Están en contra del aborto, de las uniones gay, de la eutanasia, del divorcio exprés, de que las mujeres usen anticonceptivos, del condón, de la pildora del día siguiente. Están a favor de la educación religiosa en escuelas públicas. A finales de 2007 lograron que en los congresos de Sonora y de Baja California se aprobaran leyes antiaborto, y están cabildeando para que en Morelos, Veracruz y Guanajuato prosperen iniciativas similares.