AL PUEBLO DE MÉXICO
A LOS PUEBLOS DEL MUNDO
A LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN
A LOS ORGANISMOS NO GUBERNAMENTALES DEFENSORES DE LOS
DERECHOS HUMANOS
A LAS ORGANIZACIONES POLÍTICAS, POPULARES Y REVOLUCIONARIAS
¡HERMANOS, HERMANAS, CAMARADAS!
La crisis económica en la que se
encuentra sumergida la sociedad mexicana eminentemente trastoca las relaciones
capitalistas a tal magnitud que el régimen de producción, intercambio y
distribución han entrado en contradicción entre sí.
Las causas provienen del modo de
producción y la política económica con la que gobiernos anteriores y el
presente han conducido al país por la senda de las ataduras del dominio
imperialista. Desde la consolidación de la burguesía en el poder la economía ha
sido conducida de forma ascendente a la dependencia al capital monopolista, hoy
en la actual crisis capitalista, dicha relación de subordinación cobra severas
cuotas de expoliación, sujeción y entreguismo a favor del imperialismo. Como
siempre las consecuencias inhumanas de este fenómeno capitalista recaen
directamente sobre el pueblo.
Como antaño, el Estado mexicano
se escuda en supuestas causas exógenas para evadir su responsabilidad; utiliza
factores de menor magnitud para ocultar la esencia de la realidad económica y
minimizar las demandas populares; recurre a los monopolios de la comunicación y
despliega campañas mediáticas para imponer la dictadura de opinión con el
propósito de sobreponer el interés burgués como interés general.
Lo que revelan el conjunto de
acontecimientos económicos, políticos y sociales en la actual coyuntura de
emergencia sanitaria nacional y las medidas tomadas por el consejo general de
salubridad es la recesión de la economía mexicana; los intereses y carácter de
clase de las medidas gubernamentales; la condición de pauperismo creciente de
los explotados y oprimidos; la continuidad del terrorismo de Estado para
mantener el Estado policíaco militar y el estado de derecho oligárquico.
Cierto que existe el covid-19, no
obstante, el fenómeno ha sido magnificado para justificar intereses económico
políticos eminentemente burgueses y de salvaguarda del actual régimen
oprobioso. Las tasas de mortalidad más altas en el país no son por agentes
"externos" como el covid-19, el lugar lo ocupan las víctimas de la
violencia que engendra el régimen.
Las principales causas de muerte
están asociadas a problemas y enfermedades curables relacionadas con la miseria
material y humana, la precariedad económica y la desigualdad social; éstas se
incrementan en los periodos de crisis. Cientos de miles mueren en nuestro país
cada año por estas causas factibles de resolver.
Las desapariciones forzadas,
ejecuciones extrajudiciales, el desplazamiento forzado por la violencia del
Estado y la represión sistemática no han cesado, se ocultan con la campaña
mediática que el régimen ha desplegado en alusión al Covid-19.
El uso mediático de la nueva cepa
de coronavirus es parte del terrorismo de Estado en su variante psicológica,
para distraer la atención del pueblo sobre la profundidad de la crisis,
contener e inhibir la voluntad popular de combatir contra el régimen y evitar
posibles brotes de descontento y protesta popular ante la magnitud de la crisis
económica mundial, así como imponer mayores medidas fascistas que fortalecen al
Estado policíaco militar.
Las medidas tomadas en torno a la
emergencia sanitaria fortalecen el estado de derecho oligárquico que avanza de
manera acelerada hacia el fascismo, expresado en estados de excepción de facto,
en la anulación de las garantías constitucionales, en la violación sistemática
de derechos fundamentales y en la militarización de todas las instituciones
públicas.
Las declaraciones de los
funcionarios de Estado rayan en la hipocresía al sostener que "el país no
se va a militarizar" con la emergencia sanitaria, cuando ésta ya es un
hecho desde anteriores administraciones; las decisiones trascendentales de la
vida política y social pasan por la aprobación de la cúpula militar enmascarada
en mesas y consejos civiles de diversa índole, de acuerdo a las necesidades que
se les presenten. La política de salud en el actual contexto de emergencia
sanitaria la determinan los mandos de las fuerzas policíaco militares y tiene
un carácter contrainsurgente.
Gobiernos antipopulares y
represivos como el de Rutilio Escandón Cadenas en Chiapas hacen gala de su
oportunismo político, utiliza la actual coyuntura para endurecer su carácter
represor e implementar mayores medidas profascistas que garanticen la
materialidad de sus intereses mezquinos e impunidad ante los crimines que se
perpetran contra el pueblo. En Chiapas se aplica el estado de excepción de
facto, se despoja al pequeño comerciante, se aterroriza a la población y se dan
garantías para el consumo en los grandes monopolios mercantiles, se impone la
dictadura de opinión para que prevalezca como verdad absoluta el criterio de
Estado. Todo se justifica con la emergencia sanitaria nacional.
Para el pueblo en el actual
contexto de agudización de la crisis económica y la imposición de medidas
policíaco militares se hace necesario estrechar la unidad de clase, la
solidaridad y el humanismo proletario; romper el terror que nos impone el
Estado para enfrentar en unidad la violencia de clase y las vicisitudes de la
crisis económica; combatir las medidas político militares que nos imponen con
organización de combate popular y garantizar por el medio y las formas que sean
necesarias la subsistencia material y los intereses del pueblo.
Si las riquezas que mantiene en
su poder los monopolios las produce el pueblo con su trabajo, las masas tienen
el legítimo e inalienable derecho de tomar lo que les pertenece, dondequiera
que se encuentren atesoradas y centralizadas por los personeros del capital.
El actual estado de cosas revela
con mayor claridad que la única garantía de las masas trabajadoras para no
padecer las consecuencias de las crisis y las pestes capitalistas es abolir el
actual régimen de explotación y construir una sociedad socialista.
¡POR LA REVOLUCIÓN SOCIALISTA!
¡VENCER O MORIR!
¡POR NUESTROS CAMARADAS
PROLETARIOS!
¡RESUELTOS A VENCER!
¡CON LA GUERRA POPULAR!
¡EL EPR TRIUNFARÁ!
COMITÉ ESTATAL DEL PARTIDO
DEMOCRÁTICO POPULAR REVOLUCIONARIO
PDPR
COMANDANCIA MILITAR DE ZONA DEL
EJÉRCITO POPULAR REVOLUCIONARIO
EPR
Año 56. Chiapas, a 19 de abril de
2020.