José Luis de la Cruz, director del Centro de Investigaciones en Economía y Negocios del Tecnológico de Monterrey, consideró que existe el suficiente margen para realizar ajustes en los gastos que realiza el gobierno federal, más allá de sólo sueldos y salarios.
El especialista, comentó que si bien las declaraciones del secretario de Hacienda, José Antonio Meade, son correctas, respecto a que los salarios del gobierno federal comprenden alrededor de 275 mil millones de pesos; lo que el candidato de izquierda, Andrés Manuel López Obrador plantea para obtener una reducción de 300 mil millones de pesos, aplicando su plan de austeridad, va más allá de sólo este concepto.
Y es que, de acuerdo con el académico del Tec de Monterrey, si se toman en cuenta los salarios de Pemex, CFE, IMSS, ISSSTE y todas las entidades del sector público, así como las aportaciones que el gobierno federal hace a estados y municipios, más sueldos y salarios se llega a obtener una cifra de 900 mil millones de pesos.
Al respecto, abundó en que esto se logra revisando todos los preceptos de servidores públicos, no sólo del gobierno federal, sino también de empresas a las que se les llama entidades de control directo, que conforman el sector público, es decir, donde están Pemex, CFE, IMSS, ISSSTE, etcétera y de donde se obtienen 300 mil millones de pesos.
Además, si a esta cifra se agrega la revisión de sueldos y salarios bajo el concepto de aportaciones que se mandan a entidades federativas y a municipios, existe otra cantidad adicional, que en resumen nos dan los 900 mil millones de pesos, que el Presupuesto de Egresos de este año destina a sueldos y salarios.
Aunque, a ello, todavía debe agregársele asesorías, viáticos, transportes, arrendamientos bancarios y financieros, concluyó.
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