En concreto | Laura Itzel Castillo
Día con día es mayor el número de voces que cuestionan la política habitacional impulsada por las administraciones panistas, sobre la base del modelo mercantilista que ha ocasionado que más de 20% de las viviendas construidas por el Infonavit esté abandonada.
Catherine Paquette Vassalli, del Instituto Francés de Investigación para el Desarrollo en México, explicó que a partir del año 2000 en nuestro país se ha desarrollado una política pública de vivienda masiva que ha generado ciudades excluyentes, con una urbanización descontrolada. La especialista señala que al menos una quinta parte de lo construido durante este periodo por parte del Infonavit se encuentra abandonado.
Contrasta la situación de pobreza y degradación del hábitat con los impactos positivos que han tenido las desarrolladoras inmobiliarias y los políticos.
Recientemente el catedrático Sergio Armando Flores Peña, responsable del Programa de Ordenación de la Zona Metropolitana del Valle de México 2012, coincidió con que la construcción de conjuntos habitacionales alejados de las zonas urbanas ha contribuido al crecimiento discontinuo de la metrópoli, con lo que se limita el acceso a bienes y servicios públicos y por tanto se genera el abandono de la vivienda.
Hace unos meses, Arturo Chavarría Sánchez, presidente del Colegio de Arquitectos y Urbanistas del Estado de México, declaró que 80% de los más de 353 fraccionamientos autorizados en su entidad durante estos últimos 12 años son de mala calidad. Además que en sus proyectos autorizados, las compañías inmobiliarias no incluyeron escuelas, agua potable ni áreas verdes.
Denunció que según estadísticas oficiales se había construido en su estado 660 mil viviendas en los dos últimos sexenios, pero que en realidad corresponden al doble, si se toma en cuenta el crecimiento ilegal promovido por empresas fantasmas.
Cómo estará el infierno que hasta los diablos se están saliendo, reza un dicho. José Brakarz, del Banco Interamericano de Desarrollo, ha declarado recientemente que el impacto de la política habitacional en México ha ocasionado que la mancha urbana haya aumentado seis veces su tamaño. Esto genera problemas financieros mayores a los municipios, dado que se incrementan los costos para dotar de los servicios e infraestructura necesaria por la lejanía en la que se encuentran los nuevos fraccionamientos.
Incluso el panista Eduardo Sojo, presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, señaló después de dar a conocer los resultados del Censo de Población y Vivienda de 2010, que 14% de las viviendas de este país se encontraba deshabitada, lo cual representa la descomunal cantidad de 5 millones de viviendas.
Según los datos censados, en nuestro país existen alrededor de 35.5 millones de viviendas particulares, de las cuales alrededor de 28.5 millones están habitadas, 5 millones deshabitadas y 2 millones consideradas de uso temporal.
No vive ya nadie en la casa es el título de un poema del latinoamericano César Vallejo, del cual reproduzco lo siguiente: “…No vive ya nadie en la casa, me dices; todos se han ido. La sala, el dormitorio, el patio, yacen despoblados. Nadie ya queda, pues todos han partido...
…Las casas nuevas están más muertas que las viejas, porque sus muros son de piedra o de acero, pero no de hombres. Una casa viene al mundo, no cuando la acaban de edificar, sino cuando empiezan a habitarla…”
Fuente: El Gráfico
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