La tridilosa

En concreto | Laura Itzel Castillo

La tridilosa es un sistema estructural que desarrolló el ingeniero Heberto Castillo en los años 60 del siglo pasado, sin embargo, perdió el registro de la patente en los años 70, a causa de la represión emprendida por el entonces presidente de México, Luis Echeverría Álvarez. De tal manera que la patente pasó a ser desde aquella época y hasta la fecha, del dominio público.

Heberto, siendo maestro de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, se había involucrado activamente en el movimiento estudiantil de 1968, dentro de la Coalición de Profesores de Enseñanza Media y Superior Pro Libertades Democráticas, agrupación en la que participaban también: José Revueltas, Eli de Gortari y Luis Villoro, entre otros prominentes universitarios.

Después de una larga persecución de nueve meses en los que el ingeniero estuvo literalmente a salto de mata, de rocas y bardas, finalmente el presidente Gustavo Díaz Ordaz lo encarceló en mayo de 1969. Permaneció en prisión dos años y al salir de Lecumberri, decidió recorrer el país para formar el Partido Mexicano de los Trabajadores (PMT), a lado de un puñado de seguidores, pero de manera relevante, junto a otra víctima de la represión política: el líder ferrocarrilero Demetrio Vallejo, quien también recientemente había salido de prisión, después de más de 11 años de permanecer en ella, a causa de su participación en el movimiento ferrocarrilero de 1958.

Al morir el ingeniero Castillo, en abril de 1997, se constituyó una fundación que lleva su nombre, cuyo objetivo central consiste en preservar el pensamiento político y científico del incansable luchador social que fue Heberto.

El ingeniero Gilberto Borja, amigo cercano desde que ambos cursaban la carrera de ingeniería, al fallecer Heberto le dijo a la familia que “tradicionalmente las fundaciones se constituían cuando quienes morían dejaban una herencia para administrar. Que este no era el caso, ya que aquí no había recursos económicos”.

Heberto decía que “quienes acumulan conocimientos y —lo que es más importante— los que interpretan la realidad y la plasman en leyes, obras de arte, o en métodos de trabajo que sirven para transformar y mejorar esa realidad; al morir, su riqueza no sólo no se consume, sino que se acrecienta, pues los estudiosos de la realidad resultan los herederos naturales de esos hombres”.

Como parte de las actividades que desarrolla la Fundación Heberto Castillo Martínez, A.C., está la impartición de cursos, foros y presentaciones de libros. A partir del sábado 23 de febrero se va a llevar a cabo un curso sobre la tridilosa, dirigido a ingenieros, arquitectos, técnicos y constructores interesados en este método.

El sistema consiste en lograr que una estructura espacial se convierta en entrepiso, mediante la optimización del acero y el concreto, pues con ello se permite abatir el número de columnas en superficies muy grandes. El maestro Castillo decía que la tridilosa era una estructura socialista, pues en ella “cada uno de sus elementos trabaja según su necesidad y aporta según su capacidad”.

El curso se realizará durante cuatro sesiones de las 10 a las 14 horas. Sábados 23 de febrero y 2, 9 y 16 de marzo. Para quienes estén interesados se pueden inscribir en tridilosalaoriginal@hotmail.com, o llamar directamente al 55548278 de las 11 a las 15 horas de lunes a viernes.