Fuente: La Jornada de Veracruz
Son momentos de zozobra los que viven los habitantes de San Isidro, localidad costera ubicada al norte de Chachalacas, en donde una serie de personas con placas provenientes del norteño estado de Durango, han iniciado la invasión de la playa de San Isidro, en parte de sus propiedades ejidales, al parecer, debido a las reacciones negativas que suscitó el desarrollo de la zona de dunas de Chachalacas.
A partir (ayer) han iniciado la invasión con trascabos y bulldozers para iniciar el aplanamiento del área de dunas costeras, sin contra con permiso alguno y protegidos por personas disfrazadas de policías estatales, quienes cuidan a las personas que se hacen pasar por "inversionistas".
Las playas de San Isidro son el hogar de numerosas especies de plantas y animales y son las últimas dunas costeras en tener un estado de Área Natural Protegida, con Áreas Privadas de Conservación, UMAS y espacios protegidos por la CONANP y principalmente por los pobladores de la zona, que constituyeron un comité de vigilancia avalado por PROFEPA y por el H. Ayuntamiento de Actopan con la colaboración de la Agencia Municipal, entre otros. Constituyen un sitio de belleza paisajística excepcional.
La playa de San Isidro ha sido objeto de recolectas de basura y, es considerada, una de las playas más limpias de Veracruz, y tiene en su último tramo de 2 kilómetros un área certificada como "Playa de Conservación”, con la participación del Gobierno del Estado y el Programa Tu Decides.
Se solicita a las autoridades municipales, estatales y federales, su intervención inmediata en este conflicto de invasión de tierras, en donde los ejidatarios y propietarios se sienten indefensos y desprotegidos ante las autoridades y temen perder sus tierras ante un grupo de foráneos que sólo han causado malestar entre la población.
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