El director de derechos humanos de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) de Colombia, Luis Alberto Vanegas, denunció este martes que en lo que va del año 36 sindicalistas han sido asesinados en ese país.
Vanegas sostiene que en lo que va de 2010 se ha registrado 10 crímenes más que en año anterior cuando, en la misma fecha, habían sido asesinados 26 dirigentes sindicales.
Agregó que la Asociación de Institutores de Antioquia, al noroccidente, (Adida) ha sido la que más afiliados asesinados ha registrado, con cinco en lo que va de año.
El representante de la CUT también indica que el pasado mes de abril fue el más violento, con 11 sindicalistas asesinados.
Señala que es frecuente en el país que se distribuyan panfletos amenazantes contra los dirigentes, sobre todo por parte de grupos paramilitares relacionados con el narcotráfico entre los cuales se encuentran Las águilas Negras y Los Urabeños.
"Un alto porcentaje de quienes amenazan y persiguen a los sindicalistas son los ejércitos privados de paramilitares financiados por empresarios latifundistas", indica Vanegas.
Según un estudio realizado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en junio pasado, Colombia sigue siendo el país con mayor número de sindicalistas asesinados.
Entre estos crímenes, al OIT citó el de Leslien Peñaranda Blanco, educadora afiliada a la Asociación Sindical de Institutores Nortesantandereanos (Asinort), quien fue ultimada en mayo último mientras se trasladaba a su trabajo en el departamento de Santander (norte).
También fueron asesinados Antonio Abello Rebollo, miembro del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Agropecuaria (Sintrainagro) en Nariño (sur), y Hernán Ordoñez, de la Asociación de empleados del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Aseinpec), en la ciudad de Cali (Valle del Cauca, suroccidente) mientras se desplazaba con su madre por las calles del lugar.
En este informe, la OIT acotó que estos sucesos dumuestran la crítica situación que vive el país y el incumplimiento por parte de Colombia de las observaciones hechas por los órganos de control de la institución internacional.
En el 2009, la nación latinoamericana también quedó de primera como la más peligrosa del mundo para los movimientos sindicales con 48 dirigentes o activistas asesinados en todo el año.
Desde que se fundó el CUT, la mayor central obrera del país, en 1986 han sido asesinados unos 2 mil 721 sindicalistas, 573 de ellos a partir de 2002, momento en que Álvaro Uribe comenzó a gobernar.
El pasado junio, el director Vanegas Zuluaga, denunció en una entrevista ofrecida a teleSUR que el Gobierno colombiano continúa ocultando las violaciones de los derechos de los sindicalistas y las denuncias que ratifican que este país suramericano es el más peligroso para ser líder gremial.
"El Gobierno persiste, se obstina en reconocer esta situación y manifiesta que las cifras que da, no una ONG sino la Central Unitaria, la Escuela Nacional Sindical, las centrales internacionales que ratifican Colombia es el país más violento para ejercer la libertad sindical", afirmó.
Fuente: TeleSur
Difusión: Soberanía Popular
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