Queridos amigos y amigas,
Un miembro de Avaaz en Siria nos ha contactado, enviándonos un desgarrador mensaje grabado en video, poniendo su vida en riesgo, para pedirnos ayuda.
El régimen sirio está sitiando ciudades enteras, y parece dispuesto a arrasarlas con el fin de sofocar el emergente movimiento pacífico pro-democracia. Las fuerzas de seguridad del estado han cortado el suministro de comida, agua y medicinas a estas ciudades, a la vez que han asesinado a cientos de ciudadanos, deteniendo y torturando a miles. En muchos casos, a los prisioneros les han arrancado las uñas antes de liberarlos, con la intención de intimidar a los otros manifestantes.
A pesar del escalofriante terror reinante, el pueblo sirio se niega a ser silenciado, y siguen luchando por salir de esta pesadilla a través de vías no violentas. A estos manifestantes no les falta valentía, pero sí recursos. Ahora nos están pidiendo apoyo económico para cubrir necesidades vitales, tales como ayuda médica urgente, y financiar anuncios y mensajes publicitarios pidiéndole a los soldados que se nieguen a disparar contra los manifestantes.
Nuestra mejor oportunidad de proteger a millones de familias sirias que están en riesgo es apoyando su lucha pacífica. Haz clic para ver este conmovedor video y súplica, y haz una donación ahora para apoyar los cruciales esfuerzos de los manifestantes sirios:
La implacable toma de las ciudades de Deraa, Homs y Banias, los arrestos masivos y las torturas a más de 11.000 manifestantes pacíficos, la total prohibición a cualquier presencia de prensa extranjera, el bloqueo de internet de los servicios telefónicos y el alarmante número de muertos en todo el país, están incitando una nueva ola de demandas ciudadanas en favor de una verdadera reforma democrática. Los expertos dicen que el régimen ha llegado a un punto de no retorno, y que la mejor manera de aspirar a la paz es lograr que las figuras clave más cercanas al régimen rompan relaciones con el gobierno y exijan el fin de la violencia.
La reciente cascada de renuncias y deserciones de funcionarios evidencian las grietas del régimen, que puede llegar a desmoronarse bajo el empuje de los activistas, particularmente ahora que la violencia se está intensificando y aumenta la presión internacional.
Con el apoyo de decenas de miles de miembros de Avaaz, un grupo de periodistas ciudadanos están logrando difundir imágenes de las protestas a los diferentes medios de comunicación mundiales. Reuters, CNN, BBC, AFP y Al Jazeera han estado usando sus fotos y material audiovisual -- muchas veces éste ha sido el único material disponible para la prensa extranjera, dados los intentos del gobierno de bloquear todas las comunicaciones. Ahora, a medida que la violencia empeora, los pacíficos activistas le están pidiendo a la comunidad de Avaaz que les ayude para poder intensificar su estrategia, su incidencia política y sus esfuerzos organizativos.
Podemos ayudarles de muchas maneras: financiando campañas de anuncios y mensajes públicos pidiéndoles a los soldados que paren la violencia, cubriendo sus costos de viaje para continuar implementando estrategias de impacto político al más alto nivel, proporcionandoles equipos de telecomunicaciones más seguros, costeando las cuentas de sus teléfonos, sufragando asesores expertos en materia de reformas legales, comprando suministros médicos urgentes, y muchas cosas más. Si somos suficientes los que nos unimos, podremos ayudar a sostener a estos valientes activistas ahora que tratan de darle un empujón crucial a la lucha por la paz y la reforma, y de paso seguir promoviendo el poder ciudadano en toda la región.
Los miembros de Avaaz han jugado un rol fundamental apoyando a movimientos ciudadanos en el Medio Oriente. Varios contactos de Avaaz han desaparecido, algunos han sido heridos durante la horrible ola de represión. Pero ellos están convencidos de que lo importante es perseverar en la lucha por los derechos humanos y la libertad, aun cuando se enfrentan a una terrible violencia. Reunamos toda la fuerza de nuestra comunidad para apoyar su lucha y su coraje.
Con esperanza y determinación,
Stephanie, David, Mohammad, Rewan, Brianna, Luis, Andrew, Laura, Ricken, Sam, Alice y el resto del equipo de Avaaz
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