Corrige Slim a Calderón: sí viene una catástrofe

JESUSA CERVANTES

MÉXICO, D.F., 9 de febrero (apro).- El empresario Carlos Slim hizo caso omiso del llamado presidencial para abandonar ánimos "catastrofistas" y pintó un panorama negro para México.

Durante su participación  en el foro "México ante la crisis: ¿qué hacer para crecer?", organizado por el Congreso de la Unión, Slim pronosticó que, como nunca antes en la historia del país, la crisis financiera internacional provocará que el Producto Interno Bruto (PIB) se desplome, lo que, dijo, disparará el desempleo a niveles similares a los años 30 y obligará a los dueños de comercios a cerrar sus puertas.

         Redondeó:

"El comercio internacional se va a caer, se va a caer el empleo, va a haber mucho desempleo como no teníamos noticia en nuestra vida personal, solamente en los años 30".

Luego, ante la mirada expectante del auditorio, el segundo hombre más rico del mundo, según la revista Forbes, criticó el actual modelo económico y las políticas neoliberales.

Lamentó, así mismo, que dichas políticas no fueron vigiladas por las autoridades responsables. En su opinión, faltó que las autoridades regularan a las instituciones financieras en sus derivados y los llamados commodities y, por si fuera poco, dijo, permitió que se especulara con el petróleo y surgieran ajustadores y especuladores neófitos.

         Slim dijo que para hacerle frente a la crisis mundial debe cuidarse la economía interna, atendiendo la infraestructura del país e implementando nueva tecnología.

Abundó:

"La crisis financiera va a ser una situación que va a ser delicada, no quiero ser catastrofista, hay que prepararse para prever y no estar viendo las consecuencias después y no estar llorando". 

         Comentó que la actual crisis inició en los años 90, luego trató de frenarse en el 2000 y el 2001, "pero lo que se hizo fueron reglas más laxas que hicieron que todo se saliera de proporción".

         México, dijo, debe voltear hacia la banca de desarrollo, "es fundamental para mejorar la infraestructura y modernizarla". La otra salida es educar, pero no sólo alfabetizar, sino digitalizar, añadió.

         El magnate aceptó que México requiere referencias internacionales, por lo que demandó estar abiertos a la globalización "porque no nos podemos cerrar", pero también hay que apoyar a las Pymes (pequeñas y medianas empresas) y al sector agrario, agregó.

         Carlos Slim hizo énfasis en renovar y dar mantenimiento a las escuelas, pues "hay 30 mil escuelas en mal estado". 

         Añadió:

"Me llama la atención que todavía sigan señalando los dogmas después de 26 años de fracaso, porque a la clase media la hemos hecho chica, la gente no tiene ingresos y los estudiantes de la UNAM sobreviven con 400 dólares al mes".

         La riqueza, insistió, debe ser pública, debe haber una mejor distribución del ingreso, lograr una mejor educación y mejores empleos.

         Slim también criticó que el Estado utilice lo que tiene bajo su control como una manera de allegarse de más recursos, y citó como ejemplo el aumento a la energía eléctrica y a los combustibles.

         Es necesario impulsar un "nacionalismo económico para el consumo", pero no hay que entender esto, dijo, como "México for sale, es decir, vendamos a México".