LAURA REYES MACIEL
El secretario de la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos (Afadem), Julio Mata Montiel, calificó de “engaño” la identificación de los 55 cadáveres que fueron localizados en el respiradero de una mina de Taxco, por lo que dudó que se logre conocer si en ese grupo de cuerpos estén los de personas desaparecidas en los últimos tres años, que se agravó la violencia por el narcotráfico.
“No hay equipos de antropología forense, no hay personal, no hay forma de ver el ADN de las personas que fueron localizadas, entonces es un engaño lo que se intenta hacer. Se necesita un equipo forense que no se tiene aquí (en la Procuraduría General de Justicia del Estado)”.
En entrevista en Acapulco, Mata sostuvo incluso que los gobiernos estado y federal han tratado de relacionar esas últimas desapariciones de personas con el crimen organizado, llamándolos, en muchos casos, narcotraficantes.
“No hay investigaciones y ya los llaman narcotraficantes, como con las narcofosas de Taxco, no hay investigaciones y ya dicen que son narcotraficantes. Es un juego de palabras que utilizan para encubrir”, reclamó.
Insistente en el caso de los cadáveres identificados en un respiradero de Taxco, Mata Montiel precisó que, incluso, no fue adecuada la forma en cómo se levantaron y sacaron los cuerpos, sino que se tuvo que haber hecho una investigación forense previa.
“Eso es lo que nosotros venimos exigiendo, que aunque ya se sacaron los cuerpos, la identificación se haga de acuerdo con los estándares internacionales y es lo que no hace el Estado. Creen que con sólo decir los nombres de unos ya está el trabajo cumplido, digo que ya lo vimos en Ciudad Juárez con los restos de las mujeres”.
En el caso de las personas desaparecidas en lo que va de este sexenio, el activista afirmó que la cifra es elevada y se debe a la “impunidad” que, señaló, existe en el proceso de justicia de una entidad como Guerrero, aunado a que todos los casos son relacionados con organizaciones delictivas del narcotráfico.
Además, recalcó, la mayoría de las desapariciones forzadas están encaminadas a defensores de derechos humanos.
En este tema, el Taller de Desarrollo Comunitario (Tadeco) había revelado en mayo pasado, que en lo que va de 2010, han registrado 15 casos de personas desaparecidas, sobre todo de las regiones de Costa Grande, Tierra Caliente y Centro.
Mientras que en 2008, según cifras de esa misma organización, sumaron 107 desapariciones forzadas, y la mayoría de los casos se dieron en Acapulco, Chilpancingo, Atoyac, Zihuatanejo e Iguala.
Fuente: La Jornada de Guerrero
Difusión: Soberanía Popular
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