A nombre del Frente Amplio Social (FAS) en Puebla, Ricardo Jiménez Ávila consideró que la propuesta a la reforma energética que envió el presidente Enrique Peña Nieto a la Cámara de Diputados es una traición y robo al pueblo mexicano, pues entrega a la iniciativa privada el petróleo que es un bien de la nación y que mantiene a más del 40 por ciento del gasto público del país, por lo que advirtió que se avecina una crisis severa e irreversible en México por la enterga de Petróleos Mexicanos (Pemex) a manos extranjeras.
En el ámbito local informó que los integrantes del FAS se reunieron la misma noche de este lunes, cuando fue presentada la propuesta, a fin de coordinarse para comenzar una serie de movilizaciones en la capital.
Precisó que como parte de las acciones harán un llamado a la militancia de los supuestos “partidos de izquierda”, como el PRD, PT y Movimiento Ciudadano, para que salgan a defender los recursos energéticos, pues sus dirigentes están participando como comparsa del gobierno neoliberalista.
Señaló que los partidos citados están aislados de la lucha del sector energético, así como otros temas torales del país, como es la defensa del territorio y el agua.
El Frente Amplio Social aglutina a diferentes organizaciones sociales, campesinas y sindicatos, como el SME, de Telefonistas, el Instituto Mexicano del Seguro Social, el Hospital para el Niño Poblano, el Movimiento Social Alternativo, el SITBUAP y la 28 de Octubre, por citar algunos.
En entrevista, Jiménez Ávila, quien es dirigente del Movimiento Social Alternativo, aseveró que lareforma de los artículos 27 y 28 Constitucionales confirma que se va a privatizar el sector energético nacional.
En ese sentido, agregó que si la reforma se aprueba, lo cual es inminente, habrá un retroceso histórico en el país, pues señaló que según especialistas en la materia se pretende compartir con particulares la renta petrolera, de la cual subsiste México.
Por lo tanto, refirió que “las organizaciones sociales deben ser el freno de esa reforma, que pretende privatizar lo poco que queda a los mexicanos, como es el petróleo, de donde sale gran parte del recurso que impulsan los programas de atención a la pobreza, educación, salud e infraestructura”.
Explicó que este catástrofe se vislumbró desde la época de Miguel de la Madrid en 1982, cuando inició la privatización de los recursos naturales en el país en beneficio de unos cuántos, quienes ni mexicanos son.
“Van a entregar el petróleo a manos extrajeras, lo cual es una incongruencia”, lamentó el dirigente social.
Por último, Ricardo Jiménez Ávila expuso que también estarán trabajando en la defensa de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), porque el gobierno peñista intenta convencer al pueblo mexicano de que está en quiebra para el desmantelamiento de la política energética.
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