ELIZABETH RODRÍGUEZ LEZAMA
Tehuacán. “Todo lo hice bien” declaró en esta ciudad Norberto Rivera Carrera, arzobispo primado de México, al ser cuestionado sobre el caso del sacerdote pederasta Nicolás Aguilar Rivera, donde al cardenal se le señala de encubrimiento.
Norberto Rivera trató de evadir el tema al hablar con los medios, luego de participar en la inauguración del nuevo edificio de Cruz Roja Tehuacán, donde estuvieron presentes el presidente nacional de esa institución, David Goñi Díaz y el gobernador del estado, Rafael Moreno Valle Rosas.
Al inicio de la entrevista se declaró contento de estar en Tehuacán, donde fue obispo durante 10 años y de donde salió para hacerse cargo de la arquidiócesis de la ciudad de México.
Durante su trabajo como obispo de esta diócesis se dieron las primeras acusaciones en contra de Nicolás Aguilar Rivera, por pederastia y, según los familiares de las víctimas, Rivera Carrera fue el más interesado en evitar que el caso trascendiera al grado de sugerir que no lo denunciaran y le otorgaran el perdón porque, para el prelado, el sacerdote era simplemente un hombre enfermo.
Ayer no pudo evitar el tema luego de que una víctima más de Nicolás Aguilar inició una denuncia en la corte de Los Ángeles California, donde vuelvió a aparecer el nombre del cardenal como presunto encubridor.
Sobre este nuevo caso, el purpurado aseguró que no ha recibido ninguna notificación y no le han citado para que se presente a declarar; aseveró que “los juicios en que fui citado ya los ganamos todos” y agregó que él considera que nadie puede ser juzgado nuevamente por la misma acusación.
El arzobispo aseguró que no se siente culpable por todo lo relacionado con el pederasta Nicolás Aguilar, pues a su juicio hizo todo correctamente por lo tanto, sostuvo, “no tengo ninguna cosa que me remuerda la conciencia (…) no hay ningún problema, no me preocupa en lo más mínimo”.
Por su parte el obispo diocesano, Rodrigo Aguilar Martínez, también trató de evitar a los medios que le cuestionaron sobre el asunto del sacerdote Raymundo Hernández Gálvez, a quien se le vincula con la muerte de un joven homosexual.
Se limitó a decir que el cura se recupera de un accidente en Oaxaca y que él le brinda su apoyo para su recuperación física, pero también en la psicológica “y dentro del cauce legal, la verdad y la caridad”.
Fuente: La Jornada de San Luis
No hay comentarios:
Publicar un comentario