viernes, 21 de octubre de 2011

Alto a los hospitales del horror en Siria


Queridos amigos y amigas,

No puedo sacarme esta imagen de mi mente: un joven manifestante sirio entrando a un hospital con una herida en la pierna, y saliendo con un disparo en su frente. Su familia, llorando, me contó como el régimen les había devuelto el cuerpo sin vida diciéndoles, "Ya no hay ningún lugar seguro en Siria - ni siquiera los hospitales".

Durante seis meses, he hablado con supervivientes de torturas y violaciones y he llorado a algunos de mis amigos más cercanos, quienes eran pacíficos defensores de los derechos humanos. Pero la presión está aumentando en la región y hay algo que todos podemos hacer para ponerle fin a estas masacres y a estos hospitales del horror: podemos persuadir urgentemente a Rusia, aliado clave y principal proveedor de armas de Siria, a que deje de bloquear la acción de la comunidad internacional para detener la represión del gobierno de Assad.

Hasta ahora, nadie le ha pedido a Rusia que rinda cuentas por suministrar las armas que causan estas atrocidades, pero si te unes a mi ahora, podemos cambiar eso. Merkel, la Canciller alemana, y Erdogan, el Primer Ministro de Turquía, ejercen gran influencia sobre Rusia, y ya han declarado su apoyo al movimiento pro-democracia de Siria. Juntos, pidámosles que unan esfuerzos con la Liga Árabe y presionen a Rusia para que deje de bloquear las acciones de la ONU en Siria. Firma esta urgente petición dirigida a los gobiernos de Alemania y Turquía -- y la entregaré a los dos Ministerios de Relaciones Exteriores esta semana:


Al menos 5.500 personas han sido asesinadas en Siria, tantas como durante la guerra de Kosovo. Según personal médico y testigos con los que Avaaz ha hablado, las fuerzas de seguridad del gobierno de Siria han estado utilizando hospitales y vehículos de la Media Luna Roja para arrestar, matar y torturar a decenas de manifestantes pacíficos pro-democracia, en claro desafío al derecho internacional.

En una intervención vergonzosa, hace dos semanas, Rusia hizo uso de sus poderes para asegurarse de que el Consejo de Seguridad de la ONU bloquease cualquier medida dirigida a detener la masacre de ciudadanos sirios. Mientras tanto, Rusia sigue abasteciendo con armas de alto poder al sangriento régimen.

Pero la presión sobre Assad está escalando. Las sanciones económicas están empezando a privar a su ejército de recursos esenciales, y sus soldados están cada vez más agotados. Por otro lado, la Liga Árabe le ha dado un plazo de dos semanas para que inicie negociaciones con los líderes reconocidos de la oposición. Ahora hay dos países clave que puedan ayudar a darle un vuelco a este conflicto y parar el derramamiento de sangre: Turquía, como poder regional emergente y país vecino de Siria, y Alemania, segundo socio comercial de Rusia y mediador tradicional ante el gobierno de Moscú.

Ambos, Turquía y Alemania son sensibles a la opinión internacional y ya han declarado públicamente su apoyo al movimiento pro-democracia en Siria. Un fuerte empujón ciudadano podría hacerles aumentar la presión a Rusia para que deje de armar al régimen sirio. Firma la petición ahora y corre la voz:


Mientras que algunos gobiernos se desesperan y no saben qué más pueden hacer, los miembros de Avaaz estamos marcando una diferencia real en Siria. Hemos ayudado a impulsar sanciones contra el petróleo que financia la represión de Assad. También hemos logrado romper el silencio de los medios de comunicación, trabajando sin descanso para documentar múltiples casos de desapariciones y otros crímenes, desmantelando las mentiras del régimen sirio. Mantengamos encendida la llama de la esperanza, para que su luz ilumine el camino hacia una Siria democrática y en paz.

Con esperanza,

Wissam Tarif y el resto del equipo de Avaaz

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