Es una falta de respeto que visite una comunidad indígena, haciendo gala del despilfarro de dinero
ROBERTO GARDUÑO
Ciudad de México, DF, 8 de mayo.- La asistencia del presidente Felipe Calderón Hinojosa al pueblo de San Juan Chamula, donde se le observó junto a un candidato perredista de esa la región chiapaneca, provocó enojo entre diputados del PRD, PRI y PT, quienes identificaron el costoso calzado italiano (Salvatore Ferragamo) del mandatario en aquel acto celebrado en la comunidad indígena.
Sebastián Lerdo de Tejada (PRI), presidente de la Comisión Especial de Gastos Fiscales en San Lázaro, recordó al Ejecutivo federal que encabeza un Estado laico. “Grave es que se haya encomendado a Dios para que ilumine a los gobernantes. Respetando las creencias, más que estar buscando recomendaciones divinas, que se dedique a cumplir las promesas que le ha hecho a sociedad y a dar respuestas concretas y ciertas sobre todo en zonas de alta marginación, donde los contrastes no sólo se miran en los zapatos que calza y los huaraches del líder chamula, sino en el diseño de las políticas públicas porque éstas profundizan gravemente en preocupante pobreza”.
Con dureza, Porfirio Muñoz Ledo (PT) reprochó la imagen. “Es una falsedad: el mundo de Calderón no tiene ninguna relación con el que vive la mayoría empobrecida de mexicanos. Es un hombre que no entiende a los mexicanos, para él sólo existen distancias máximas entre seres humanos”.
“Vivimos ya tiempos extras de un gobierno que todo el mundo declara que es un gobierno fracasado, y en nosotros no somos capaces de reaccionar ante la mentira. ¡No tenemos que estar sufriendo esto! Es la inexistencia de un poder en México”.
También, Mauricio Toledo (PRD) se dijo indignado. “Al comprar hoy el periódico me enervó lo que se presentó ante mis ojos. Ahí se manifestó el contraste de la realidad del país, ahí está la verdadera situación de nuestra atribulada patria: una clase enriquecida por el poder, y por otro lado, la gente que no tiene oportunidad, donde no existen políticas públicas para mitigar la enorme pobreza: no hay compromiso social. ¡Se demuestra cómo vive el gobierno en la opulencia y cómo vive el país en la pobreza extrema!”.
–¿Tan identificable es el calzado del Presidente de la República?
–¡Claro! Son unos (Salvatore) Ferragamo que en los centros comerciales cuestan 7 mil pesos. Es una irresponsabilidad que un gobernante vaya a una zona pobre y humilde y vaya con esos zapatos, mientras el indígena a su lado tiene unos huaraches de suela de llanta, es una falta de respeto, una grosería, es un insulto.
Herón Escobar (PT) se dijo sorprendido con la imagen. “Sólo faltaba eso. Al llegar vestido así incurrió en una falta de respeto a la pobreza; ya no respeta ni la pobreza misma, lo que refleja es que no entiende la cultura indígena. Es una ofensa a la pobreza del país, no veo más que intención de humillar a los más pobres. Ésa es la intención, es cada vez más deprimente. Cómo te acercas a la gente humilde vestido así, eso ofende, es contra-natura, y es precisamente como conviven la pobreza y la opulencia”, denunció.
Fuente: La Jornada de Michoacán
Difusión: Soberanía Popular
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