HÉCTOR BRISEÑO
Activistas internacionales expresaron que la oposición de comuneros a la construcción de la presa La Parota, representa un ejemplo de la forma en que las comunidades locales han emprendido la defensa de sus tierras.
Entrevistado antes de iniciar la Caravana Internacional de Denuncia y Resistencia rumbo a Cancún, con motivo de la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP-16), el investigador y ambientalista Larry Lohmann expuso que “estamos iniciando esta caravana en Guerrero, en particular en La Parota, ya que es un ejemplo de la manera en que la gente se organiza para defenderse y defender sus recursos”.
Subrayó: “lo que hay entender es que no habrá una solución global a los problemas de contaminación, si no se atienden las luchas a nivel local, donde la gente se está movilizando para defender sus recursos y defender sus vidas. Esa es la importancia de la caravana, que llama la atención de las luchas locales”.
La representante del Programa para las Américas, Laura Carlsen, denunció que en la ejecución del proyecto, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) tiene previstos 400 millones de dólares de manera disfrazada a través de diversos rubros y programas, situación que contraviene sus propias normas.
“Después de que el gobierno anunció que el proyecto de edificación de la presa se reanudaría, aparece un nuevo financiamiento de 400 millones de dólares por el BID, para supuestos proyectos contra el cambio climático y generación de energía del gobierno de México; el proyecto La Parota se encuentra en la lista”, advirtió la especialista.
Puntualizó que “el financiamiento del BID para ese proyecto es una violación de sus propias reglas, las cuales dicen que hay que evitar cualquier obra que implique el desplazamiento de poblaciones humanas, y en esto caso, hay un desplazamiento de unas 25 mil personas”, y subrayó el hecho de que tampoco se han estudiado otras alternativas de generación de energía.
Explicó que el grupo de ambientalistas y organismos no gubernamentales se ha topado con problemas de transparencia en la investigación de los recursos con que el gobierno mexicano pretende construir La Parota.
Especificó que “encontrar una línea de financiamiento es difícil, ya se ha vuelto un caso internacional de resistencia, los organismos no quieren pagar el costo político, entonces el proyecto está metido en otro proyecto, que está metido adentro de otro que está financiado por el banco, pero el dinero ahí está”.
Fuente: La Jornada de Guerrero
Difusión: Soberanía Popular
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