ESTHELA DAMIÁN PERALTA
La renuncia de Arturo Chávez Chávez como procurador General de la República era algo que ya se esperaba, así lo hacían prever la situación que enfrentamos en materia de inseguridad y las constantes quejas en su contra.
Resulta innegable que su salida también es un reflejo de la falta de congruencia y eficacia en el sistema de procuración de justicia. En ese sentido, urge analizar lo que está fallando, pues se trata de una de las instituciones pilares del país.
El Gobierno federal está obligado a revelar las causas que motivaron la renuncia del titular de la PGR, debido a que no es cosa menor, el pueblo debe saber qué está ocurriendo en dicha dependencia en momentos en los que se libra una guerra contra el narcotráfico.
La renuncia de Arturo Chávez a la PGR ocurrió luego de 19 meses de realizar una gestión que podríamos calificar de deficiente.
Desde su nombramiento, Chávez Chávez fue cuestionado por organizaciones de derechos humanos por sus escasos resultados al frente de la Procuraduría de Justicia de Chihuahua, donde fracasó en su intento por resolver los feminicidios. Incluso, el hoy ex embajador de Estados Unidos en México, Carlos Pascual, llegó a considerar el nombramiento como “totalmente inesperado” e “inexplicable políticamente”.
Como procurador, desde la Cámara de Diputados Chávez Chávez fue objeto de críticas por su desconocimiento del operativo “Rápido y Furioso”, por el que Estados Unidos permitió el ingreso ilegal de armas a México.
También se le criticó por la falta de resultados en los homicidios del candidato del PRI a la gubernatura de Tamaulipas, Rodolfo Torre Cantú, así como del ex gobernador de Colima, Silverio Cavazos.
Chávez tampoco dio algún resultado sobre el secuestro del ex senador Diego
Fernández de Cevallos, en el cual intervinieron hasta después de su reaparición, ya que antes la familia les pidió no intervenir.
Abandonó el cargo sin responder a la solicitud de información que le hiciera la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación, acerca de las 34 denuncias que la Auditoría Superior de la Federación presentó por irregularidades en el manejo de los recursos públicos correspondientes a la Cuenta Pública 2009.
Las querellas que formuló la Auditoría Superior de la Federación han merecido la absoluta atención de la Comisión de Vigilancia, y no vimos que la PGR actuara de una manera consistente para lograr que a los responsables de ilícitos en materia de responsabilidades de servidores públicos o en malversación de recursos del erario, se les castigara con cárcel.
Un sinnúmero de ocasiones le hicimos ver que lo más importante era que la PGR hiciera bien su trabajo y que no ocurriera como en otros casos, donde no hubo respuesta, atención ni información.
Ahí está por ejemplo la impunidad que rodeó el asunto del ex director de operaciones de la Comisión Federal de Electricidad, Néstor Moreno, acusado en Estados Unidos de recibir regalos millonarios, incluso yates, automóviles de lujo y dinero, para entregar licitaciones de la paraestatal a la empresa ABB. Ni siquiera informó a esta soberanía si el Ministerio Público lo había citado a declarar, pese a los múltiples requerimientos que realizamos desde la Cámara de Diputados.
Respecto de las 34 denuncias interpuestas por la ASF, solicitaremos al nuevo (a) titular de la Procuraduría General de la República una atención oportuna y el ejercicio de la acción penal contra los responsables.
Insistiremos en que tal y como ocurre con la entrega de la Cuenta Pública, que de cara a la nación acudan los funcionarios de la PGR a la Cámara de Diputados y nos digan qué es lo que han podido hacer y cuántas personas están detenidas o encarceladas a partir de las denuncias presentadas por la Auditoría Superior de la Federación.
Le requeriremos también el avance y estado que guardan mil 400 pliegos de observación, 129 solicitudes de aclaración, 306 recomendaciones, 225 promociones de responsabilidad administrativa sancionatoria y 41 denuncias de hechos presentadas por la ASF de 2006 a 2008.
Por lo pronto, en el PRD habremos de revisar con lupa la propuesta que hiciera el Ejecutivo federal para que Maricela Morales ocupe la titularidad en la PGR, ya que de ninguna manera apoyaremos o ratificaremos ‘cargos fácticos’.
Fuente: La Jornada de Guerrero
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