Durante su gira de trabajo por el municipio de Cochoapa el Grande en el estado de Guerrero, un maestro indígena increpó al presidente Enrique Peña Nieto al gritarle que "la educación no se vende", a lo que el mandatario le pidió que no se deje confundir por campañas mal intencionadas.
Y es que previó a su evento oficial, el jefe del Ejecutivo Federal fue increpado por un maestro que se dentro de un grupo que encontraba concentrada en el atrio de la iglesia de la cabecera municipal.
Ante los gritos contra la reforma educativa, Peña Nieto pidió a sus guardias del Estado Mayor acercar al maestro luego de que fue jaloneado.
Ahí, en plena calle, el maestro le reclamó que la Presidencia, junto con la OCDE y la organización Mexicanos Primero, habían privatizado la educación y reclamó que pese a ser maestro en el municipio no había sido consultado para llevar a cabo la reforma educativa.
El presidente de la República le pidió que no lo confundan las campañas mal intencionadas pues la educación seguirá siendo gratuita y a los maestros se les evaluará de acuerdo a las condiciones específicas de cada estado.
Peña Nieto le garantizó que sus derechos laborales no serían violados y le pidió que no hiciera caso a las campañas que buscan desinformarlos, dijo también que la evaluación sería para darles mayores y mejores posibilidades de desarrollo en lo profesional y efectuar su labor con mejor calidad.
Asimismo, el primer mandatario le pidió que se uniera a los trabajos para que se de cuenta de lo realmente es la reforma educativa y sus beneficios. El incidente no trascendió, y minutos más tarde el evento oficial ante indígenas se llevo a cabo en la unidad deportiva del poblado.
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