CITLAL GILES SÁNCHEZ ( )
Chilpancingo, 20 noviembre. Organizaciones sociales criticaron que a 100 años de la Revolución mexicana, la situación en México y en Guerrero “es peor”, pues se vive una delincuencia organizada y tolerada por las autoridades.
Mientras que en Guerrero, señalaron, los efectos de la Revolución sólo fueron redituables para las grandes oligarquías, que con su poder violan los derechos humanos de los guerrerenses, sobre todo de aquellos que viven en la marginación y pobreza.
Organizaciones como la de Pueblos Originarios para el Desarrollo Social, el Centro Regional de Defensa de Derechos Humanos José María Morelos y Pavón; la Red Guerrerense de Organismos Civiles de Derechos Humanos y el Consejo Ciudadano de Chilapa, entre otras, lamentaron que las causas que originaron el estallido violento y armado de una revolución en México están, además de vigentes, “peor”.
“Actualmente las finanzas públicas no son prósperas como lo eran en el siglo pasado; la delincuencia organizada, tolerada, fomentada e incluso integrada por las autoridades, esparce el terror y la violencia por todo el territorio nacional; al mismo tiempo quienes tienen la encomienda de velar por la seguridad y la legalidad en nuestro país, se han vuelto en contra de la sociedad misma violentando el Estado de Derecho, cometiendo delitos graves y permitiendo que la impunidad”, destacó Manuel Olivares, de la Redgroac.
En Guerrero, dijo, los efectos de la Revolución sólo fueron redituables para las oligarquías, lo que dejó “políticos ambiciosos que se apropiaron de enormes dimensiones de tierra” y lamentó que las violaciones a derechos humanos por las autoridades “son una historia que se repite de manera cotidiana, la pobreza, la marginación y el olvido mantienen al campo guerrerense debilitado, improductivo y expulsando de manera permanente a su población”.
Criticó que hace cinco siglos, los indígenas fueron usados “como carne de cañón” en una lucha que no les benefició, pues continúan resistiendo los embates de una política que pretende exterminarlos.
Los organismos sociales rechazaron festejar “los huecos” del centenario revolucionario, porque “el atraso, la desigualdad, la falta de oportunidades, la discriminación, la corrupción, los abusos desde el poder, la represión y la criminalización de la sociedad siguen siendo una realidad en Guerrero y México”.
En cambio, planteó, se debe reflexionar que se ha utilizado al pueblo guerrerense por varios años “por caciques y ambiciosos” que actúan de la misma forma que hace 10 años, por lo que destacó, lo único que resta es seguir con la lucha para la defensa de los derechos a la libertad y la igualdad.
Fuente: La Jornada de Guerrero
Difusión: Soberanía Popular
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