Condena la APPG y Bertoldo Martínez el atentado y exigen el esclarecimiento del asesinato
REDACCIÓN
Hombres armados acribillaron el mediodía del domingo a Isabel Ayala Nava, de 54 años, última esposa del guerrillero Lucio Cabañas Barrientos, a la que conoció de 13 años de edad en noviembre de 1973, en la comunidad de Santa Rosa, en la sierra de Coyuca de Benítez, madre de su única hija, Micaela Cabañas Ayala.
El asesinato ocurrió en la comunidad de Xaltianguis, en la zona rural de Acapulco. Isabel iba acompañada de su hermana Reyna, de 58 años, quien también fue asesinada.
La Secretaría de Seguridad Pública y protección Civil estatal confirmó que a las 13:05 horas en la colonia Las Flores de Xaltianguis, ambas fueron acribilladas de “varios impactos de bala” cuando salían de la iglesia donde acudieron a vender alimentos, por individuos que se trasladaban en un vehículo compacto azul, para posteriormente darse a la fuga.
En septiembre de 1974 nació Micaela Cabañas, la hija de Lucio. Dos meses después, ella y la familia de Lucio fueron detenidas y encarceladas en el Campo Militar Número Uno, donde fue torturada por Mario Arturo Acosta Chaparro. A mediados de 1976, la dejaron libre.
El presidente del comité político de la Asamblea Popular de los Pueblos de Guerrero (APPG), Nicolás Chávez Adame, condenó el hecho y exigió a las autoridades que se investigue el crimen.
Por separado, el presidente del Frente de Organizaciones Democráticas del Estado de Guerrero, Bertoldo Martínez Cruz, también condenó el asesinato y exigió su pronto esclarecimiento.
“Condenamos este asesinato como cualquier otro, pero este más por su connotación nacional, pues Isabel Ayala fue pareja sentimental del comandante Lucio Cabañas, fundador del Partido de los Pobres”, dice el escrito.
Lucio Cabañas nació en diciembre de 1938, en El Porvenir, municipio de Atoyac de Álvarez. Fundó el Partido de los pobres y mantuvo secuestrado por 100 días al ex gobernador Rubén Figueroa Figueroa, siendo candidato a la gubernatura.
El guerrillero falleció en una emboscada a manos del Ejército el 2 de diciembre de 1974 en la comunidad de El Otatal, en la región de Costa Grande Guerrero.
El 18 de mayo de 1967 en un mitin en la plaza central de Atoyac de Álvarez, policías estatales coludidos con caciques intentaron impedir el acto desatando una balacera. En el hecho murieron cinco de los participantes y dos policías. La fecha se recuerda como el inicio de lucha de Lucio Cabañas, quien huye a la mañana siguiente hacia la sierra, contra la injusticia y la marginación de los campesinos desde la clandestinidad.
Fuente: La Jornada de Guerrero
No hay comentarios:
Publicar un comentario