JOSÉ GIL OLMOS
MÉXICO, D.F., (proceso.com.mx).- Un grupo de “rondas comunitarias” del municipio Los Reyes La Paz consideró que la situación en Michoacán es de “completa ingobernabilidad” porque “los malos” sólo se están burlando de las autoridades, que han mostrado ineficiencia para resolver los múltiples conflictos en la entidad.
A pesar de ello, demandó la intervención del gobierno federal para terminar con las extorsiones del crimen organizado.
Encapuchada, una decena de indígenas denunció que las autoridades municipales están coludidas con el crimen organizado, que exige una extorsión de dos mil pesos por hectárea.
Las “rondas comunitarias” son grupos de vigilancia autónoma que no utilizan las armas para defenderse, como sí ocurre con las policías comunitarias.
En conferencia de prensa en la ciudad de México, los inconformes exigieron al presidente Enrique Peña Nieto viajar de inmediato a Michoacán para que se cerciore del nivel de complicidad entre las autoridades y los grupos criminales.
Consideraron que la intervención de la Policía Federal y el Ejército es insuficiente en la zona, pues el problema es mucho más complejo y profundo.
Los campesinos tenían el rostro cubierto con paliacates para resguardar su identidad.
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