lunes, 16 de febrero de 2009

El dedazo panista en Nuevo León


L. CAMPOS Y A. RODRíGUEZ

En Nuevo León los panistas se muestran indignados por la forma en que Fernando Elizondo fue designado por el Comité Ejecutivo Nacional de su partido como candidato a la gubernatura. Algunos de los aspirantes alegan que al suprimir la Convención del pasado 15 de enero y optar por el dedazo, se coartaron los derechos de los militantes. Mauricio Fernández, un connotado panista, renunció incluso al Consejo estatal "por dignidad". Dice que la democracia "está de luto" y asegura que ahora ya no hay diferencia entre el PRI y el PAN en la selección de candidatos.


MONTERREY, NL.- Los aspirantes del PAN a la gubernatura de esta entidad sostienen que al recurrir a la práctica del dedazo que tanto le criticó al PRI, su partido rompió sus principios doctrinarios, pues no sólo despreció a sus militantes sino que atropelló también su propia historia.

La noche del martes 3, casi a la misma hora, los dos partidos dieron a conocer a su respectivo abanderado para la gubernatura. El PAN se inclinó por Fernando Elizondo Barragán, senador con licencia, y lo designó por "el estatutario método de designación". El PRI determinó que Rodrigo Medina de la Cruz fuera su "candidato de unidad", ungido incluso por la presidenta de ese partido, Beatriz Paredes Rangel.

En el caso del PRI, sus militantes aceptaron la operación de Paredes Rangel, no así en el PAN, donde los panistas con más trayectoria en la entidad mostraron su indignación y acusaron tanto a su líder nacional, Germán Martínez Cázares, como al presidente Felipe Calderón, de imponer al candidato.

Esos panistas se quejaron de que no hubo operación política previa. Dijeron que ni siquiera les avisaron. Dos de los tres aspirantes excluidos, Fernando Margáin Berlanga y Fernando Larrazábal Bretón, aseguran que se enteraron de que Elizondo Barragán era el ungido cuando Joaquín López Dóriga dio la noticia en su espacio televisivo esa misma noche.

Al día siguiente de la designación, el miércoles 4, ninguno de aspirantes descalificados manifestó su respaldo a Elizondo.

El Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN evitó la convención, programada para el 15 de enero, y también rechazó una elección mediante proceso abierto. La razón aparente era frenar a Adalberto Madero Quiroga, alcalde de Monterrey, quien iba adelante en las encuestas electorales y al que se le acusaba de manipular el padrón. 

En diciembre pasado Fanny Arellanes, delegada de la Secretaría del Trabajo en la entidad y consejera nacional, se pronunció por el método de designación directa. A su juicio, una contienda abierta favorecía en ese momento a Madero Quiroga y a Larrazábal Bretón, por lo que consideró "una burla para la democracia" realizar esa contienda.

Este es un extracto del reportaje que publica la revista Proceso en su edición 1685 que empezó a circular el domingo 15 de febrero.

No hay comentarios: