Es un reajuste porque no se le midió por ocho meses, le avisan en oficio
Fuente: La Jornada de San Luis
PAULINA BÁRCENAS
La señora Melquiades Hernández, quien en su humilde vivienda tiene dos televisores, refrigerador, plancha y licuadora, se dice dañada por la Comisión Federal de Electricidad, pues a pesar de tener el servicio cortado por varios meses, tiene que pagar siete mil pesos de luz, esto derivado a que le colocaron un medidor que no funciona bien; a pesar de que se quejó ante los responsables, estos le dijeron que no había nada que hacer y por si fuera poco le anunciaron que recibirá otros dos por poco más de dos mil pesos cada uno.
En una vivienda en la que habitan cinco personas y que cuenta con los aparatos electrónicos básicos, la señora Melquiades Hernández pagaba un promedio de ochocientos pesos de luz, sin embargo un mal día su medidor dejo de funcionar, al reportarlo, el personal de la comisión federal de electricidad acudió a cambiarlo, al siguiente bimestre le llego un recibo por el monto de dos mil 247 pesos, el cual con muchos sacrificios pudo pagar, para el siguiente bimestre el recibo fue de dos mil 400 pesos, y también lo volvió a pagar.
Con el paso de los días se dio cuenta de que el medidor de nuevo no funcionaba por lo que llamó a las oficinas de la mencionada institución, “una señorita que me contestaba siempre me decía que si tenía el servicio no había de que preocuparme, que tener luz era lo importante y que no había problema”; posteriormente durante dos bimestres el recibo llegó en ceros “volví a llamarles y pues decían que lo iban a revisar, pero nunca vinieron”; al siguiente bimestre la señora Melquiades se llevó el susto de que el recibo ahora le llega por concepto de siete mil pesos, acompañado por un oficio con número de notificación 3080/2009 firmado por el ingeniero Carlos Calvez Turrubiates, en el cual le informaban que se había detectado una anomalía que consistía en medidor destruido lo que provocó que en el periodo entre el 8 de octubre del 2008 y el 21 de mayo de 2009 “hayamos facturado menor energía a la que realmente consumió, razón por la cual hemos hecho un ajuste a su facturación la cual arroja una diferencia de siete mil 734.00 pesos”, apunta el oficio.
Posteriormente como no pudo pagar tal cantidad el servicio le fue cortado “no conforme con eso a los quince días me llegó otro recibo por ochenta pesos que porque les habían faltado” a pesar de que doña Melquiades ha intentado llegar a un acuerdo con los responsables no ha podido, ya que ni siquiera le han dado la oportunidad de pagar en partes; “ya me dijeron que no se puede hacer nada y que incluso me van a llegar dos recibos más que van a ser arriba de los dos mil pesos, pero como si ya tengo mes y medio sin luz, aparte de que aquí ni gastamos luz, tenemos lo indispensable, por qué cometen ese tipo de abusos, la verdad es que yo no tengo la posibilidad de pagar esa cantidad, los ingresos aquí son mínimos”, externo indignada.
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