miércoles, 5 de enero de 2011

• Y que se enojan los marines…

Julio Ricardo Blanchet Cruz
• Y que se enojan los marines…

05 enero 2011
jrbc@diariolibertad.org.mx

Como era de esperarse, el arribo de nueva cuenta de Jerry Brown a la gubernatura de California, sustituyendo al ex gobernador Arnold Schwarzenegger…

Trajo cambios y, en pocas palabras, envió a la congeladora las propuestas de organizaciones ciudadanas para que volvieran a legalizar los matrimonios entre personas del mismo sexo…

Mismos que en 2004 fueron autorizados con gran pompa y platillo por el Alcalde de la cosmopolita ciudad de San Francisco; y que el propio Gobernador Schwarzenegger los prohibió unos meses después…

Iniciándose así una larga historia de demandas y contrademandas que acaban de terminar congeladas (cuando menos por el momento)…

Pero algo va a pasar cuando los marines de un buque de guerra norteamericano, con la autorización de su Comandante, subieron a la Red un video donde se burlan de los homosexuales…

En clara protesta al Gobierno de Obama que acaba de autorizar a los de preferencias anti natura para que puedan libremente ingresar a las Fuerzas Armadas…

Tal vez no muy se quiera hablar del tema; pero no es que sea discriminación el que en muchos lados a los homosexuales no los acepten de buen grado, es, al igual que ellos, una preferencia…

Así como ellos escogen a los hombres, así habemus muchos que preferimos a las mujeres. Eso es todo. Y de alguna manera generan incomodidad entre grupos donde tradicionalmente no han sido aceptados…

Para terminar…

El que la Arquidiócesis de la iglesia católica en los EEUU se haya declarado en quiebra, a pocos les queda duda de que es una sucia maniobra para no pagar las indemnizaciones correspondientes a las víctimas de los curas pedófilos a los que ellos mismos protegieron…

Como ha quedado más que demostrado con los documentos que en ese entonces recibió el Cardenal Ratzinger, hoy conocido como Benedictus XVI…

Toda vez que declarándose en bancarrota, se pagará hasta donde alcancen los bienes, sin que responda por ello el Vaticano.

Pero eso es tanto como si el Consulado mexicano en California (por poner el mismo ejemplo) se declarara en quiebra por malos manejos o fraudes, y el Gobierno no respondiera…

Pero, en tratándose de dineros, así se las gastan los ínclitos representantes de dios…

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.

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