MÉXICO, D.F. (apro).- La ola de violencia que afecta al país dejó 12 muertos, entre ellos un padre de familia que fue ejecutado cuando iba a comprar pan y leche para sus hijos.
En Nuevo León, al menos cuatro personas fueron ejecutadas en la zona metropolitana de Monterrey durante las últimas horas.
En el primer incidente, el lunes cerca de la medianoche, un pistolero solitario entró a un domicilio ubicado en el 307 de la calle Mina de Cobre, en la colonia Estancia Minera, para asesinar a balazos a dos hermanos identificados como Edmundo y Priscila Páez, de 25 y 23 años.
El novio de ella, de nombre Daniel, también fue baleado y luego trasladado en estado grave a un hospital local.
Este martes por la mañana fueron encontrados, en un camino vecinal del municipio conurbado de Apodaca, un hombre y una mujer asesinados a tiros.
Los cuerpos fueron hallados en la calle Orión, sin pavimentar, en la colonia Palmas Diamante. La mujer vestía únicamente ropa interior.
En el sitio fueron encontrados casquillos de arma larga.
En Sinaloa, dos hombres fueron privados de la vida de forma violenta. El cuerpo de uno de ellos, identificado como Leobardo, fue colocado en la vía del tren en el municipio de Elota.
Autoridades policiacas dieron a conocer que el sujeto fue asesinado por una o más personas a golpes y, para tratar de ocultar los hechos, colocaron su cadáver sobre la vía del tren.
Mientras, en la zona del Piggy Back, a la salida sur de Culiacán, se descubrió el cuerpo de un hombre de unos 40 años, esposado con las manos al frente y varios disparos de calibre nueve milímetros.
En el Estado de México, un hombre identificado únicamente como Alejandro, fue ejecutado de siete impactos en la cabeza cuando salió a comprar leche y pan para sus hijos en la colonia Granjas de Guadalupe, localizada en el municipio de Ecatepec.
El cuerpo de la víctima, de 23 años, quedó tirado en la calle Jalisco a unos pasos de Sonora, en la sección B de esa colonia, luego de que sus agresores le dispararon desde una camioneta.
En Morelos, cinco hombres fueron acribillados a tiros: dos en el municipio de Jojutla, zona sur del estado, y tres más en el área metropolitana de Cuernavaca, informó la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJEM).
La policía de Jojutla, uno de los municipios más disputados por el crimen organizado, confirmó que en la gasolinería de la colonia Centro dos personas fueron asesinadas a tiros.
Los primeros testimonios indican que varios sicarios a bordo de una camioneta simularon una carga de gasolina y sorpresivamente tirotearon al despachador y una persona más, quienes murieron instantáneamente.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 6:40 horas de este martes en la gasolinería localizada enfrente de la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Los cuerpos sin vida de estas personas quedaron tendidos a un costado de las bombas de gasolina.
Por las redes sociales se difundió la versión de que la policía estatal llegó 20 minutos después al establecimiento, lo que contribuyó a que los sicarios escaparan sin problema.
Casi a la misma hora, pero en la colonia el Pochotal, del municipio de Jiutepec, colindante con Cuernavaca, otro hombre fue atacado a tiros por hombres armados.
La tarde de ayer, también alrededor de las seis de la mañana, fueron encontrados los cuerpos de dos comerciantes ejecutados a tiros y abandonados en los ejidos de la colonia Acapatzingo, en la capital.
La PGJEM informó que en este caso las víctimas se encontraban dentro de un Altima gris con placas PXG-8470. La unidad fue encontrada con el motor encendido.
El conductor, aún con el cinturón de seguridad puesto, recibió por lo menos tres impactos de arma de fuego; el segundo cuerpo se encontraba en el asiento trasero del lado izquierdo.
Las víctimas fueron identificadas como René Ramón de la Concha Chapa e Isaú Yáñez Lozano.
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