*Los espectáculos de luz y sonido no deben destruir el patrimonio cultural
TEOTIHUACAN AFECTADO POR INTERESES POLÍTICOS Y COMERCIALES
Al Presidente de la República
Al pueblo de México
Los trabajadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia, como especialistas en la investigación y conservación del patrimonio arqueológico de la Nación, denunciamos la destrucción que se está realizando a las pirámides del Sol y de la Luna, en Teotihuacán, para colocar un espectáculo nocturno de luz y sonido. Este proyecto llamado “Resplandor Teotihuacano” forma parte del interés del gobierno del Estado de México para desarrollar un corredor turístico y comercial, utilizando la zona arqueológica como polo de atracción.
Consideramos que el inaplazable desarrollo social y económico de los municipios y regiones no debe ser enfrentado artificialmente a la conservación del patrimonio arqueológico de la Nación. La mejora social, si es que realmente fuera el resultado del proyecto “Resplandor Teotihuacano”, no implica ni justifica los daños al legado de nuestros antepasados. Se perforaron las piedras originales en cada uno de los cuerpos de ambos basamentos piramidales para introducir taquetes de ajuste y palancas de expansión, que a su vez sirvieron para montar bases y rieles de aluminio, donde se pondrán las luminarias. Estas estructuras metálicas serán recubiertas con armazones de fibra de vidrio con apariencia de empedrado, de modo que las pirámides quedarán rodeadas de una banda volumétrica perimetral discontinua, enteramente ajena a los monumentos, que desvirtúa su forma original.
Teotihuacán es para los mexicanos uno de los más importantes referentes de identidad con el pasado prehispánico y también es reconocido por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad. Desde las menciones en la historiografía mexica hasta nuestros días, eta mítica urbe conocida como Teotihuacán (ciudad de dioses), ha sido presencia en nuestro imaginario colectivo como marco para el nacimiento del Quinto Sol. Esta ciudad mesoamericana fue la más importante del centro de México durante el Periodo Clásico y constituye el testimonio histórico de una civilización que en su tiempo irradió su influencia cultural hasta Centro América y después de su caída fue base para el desarrollo de las distintas culturas prehispánicas que la sucedieron.
La UNESCO inscribió a Teotihuacán en la Lista del Patrimonio Mundial desde el 11 de septiembre de 1987, considerando que reúne los siguientes valores: es una obra maestra del genio creativo humano (criterio I), es un testimonio importante de intercambio de valores humanos en un periodo o dentro de un área cultural del mundo (criterio II), aporta un testimonio único, excepcional, de una tradición cultural o de una civilización existente o ya desaparecida (criterio III), ofrece un ejemplo eminente de un tipo de edificio, conjunto arquitectónico o tecnológico o paisaje que ilustra una etapa significativa de la historia humana (criterio IV) y, es un ejemplo eminente de una tradición de asentamiento humano representativo de una cultura y de la interacción humana con el medio ambiente (criterio V). Para conservar estos valores mundiales, Teotihuacán debe mantener su autenticidad e integridad. Ambos conceptos se salvaguardan en la medida de que este legado conserve sus materiales originales, sistemas constructivos y disposición arquitectónica, así como su entorno o paisaje, sea éste construido o natural.
El Proyecto “Resplandor Teotihuacano” , al introducir el volumen que contiene las luminarias en cada uno de los cuerpos de las pirámides, está alterando la disposición arquitectónica y la expresión formal de los monumentos. No sólo afecta a las pirámides del Sol y de la Luna sino a la zona arqueológica en su conjunto, alterando así dos de los elementos constitutivos de la integridad de la zona, el paisaje y la volumetría, elementos sustanciales de la autenticidad del sitio.
En virtud de todo lo anterior y por las alteraciones a la autenticidad e integridad de zona arqueológica y de las pirámides del Sol y de la Luna, exigimos que de manera inmediata sean retiradas las estructuras de fibra de vidrio, así como toda la instalación.
Reprobamos enérgicamente la decisión tomada por el Consejo de Arqueología de autorizar el mencionado proyecto, debido a que contraviene la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos y porque sienta un precedente extremadamente negativo para la conservación, preservación y uso social de los valores culturales sustentados en las zonas arqueológicas de nuestro país.
Los trabajadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia agrupados en las delegaciones Sindicales D-III-24-Organización Nacional, D-II-IA-I y D-II-IA-2
Responsable de la publicación: Cuauhtémoc Velasco Ávila
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