"Mientras mas quieran reprimir, hacer daño, que entre más quieran evitar que la gente se exprese, más personas salen y quieren hacer justicia en nuestro país. Por eso estamos aquí", aseveró la primera dama, quien estuvo durante cinco días en un retén cerca de la frontera con Nicaragua (El Paraíso) para reencontrarse con Manuel Zelaya, pero las autoridades de facto le impidieron el paso junto a su familia.
La primera dama de Honduras, Xiomara Castro de Zelaya, aseveró este viernes que, junto al pueblo, se dirigirá al Congreso del país centroamericano para introducir un recurso de amparo "con el que se solicitará que en El Paraíso se suspendan los retenes policiales, así como los toques de queda".
Al asisitir a una multitudinaria manifestación, que se convocó a raíz de las crudas represiones a los seguidores del presidente legítimo, Manuel Zelaya, este jueves que dejó al menos seis heridos y 88 detenidos, Castro de Zelaya declaró a teleSUR que se mantiene en la lucha, sobre todo "por solidaridad con las personas agredidas ayer (jueves)".
Pese a que este jueves se registraron fuertes y recrudecidas acciones violentas de los policías y militares hondureños contra las manifestaciones que exigen el retorno del hilo constitucional en Honduras, así como de su presidente, la población tomó fuerza y salió a las calles del país centroamericano para mantener la lucha en el vigésimo cuarto día de movilizaciones sin descanso.
"Mientras mas quieran reprimir, hacer daño, que entre más quieran evitar que la gente se exprese, más personas salen y quieren hacer justicia en nuestro país. Por eso estamos aquí", aseveró la primera dama, quien estuvo durante cinco días en un retén cerca de la frontera con Nicaragua (El Paraíso) para reencontrarse con Manuel Zelaya, pero las autoridades de facto le impidieron el paso junto a su familia.
Bajo esta arista, Xiomara Castro de Zelaya declaró a la corresponsal de teleSUR en Tegucigalpa, Madeleine García, que "vamos a seguir en la lucha, vamos a continuar, no vamos a desmayar".
Más adelante, frente a la multitudinaria concentración, la primera dama recordó que estuvo cinco días en un retén junto a sus dos hijos, Xiomara Zelaya y José Manuel Zelaya, así como con la madre del presidente, Hortencia Rosales.
"Cinco días en un retén sin movernos de ahí. Muchas veces suplicamos a aquellos que reprimen, aquellos que estuvieron en la mesa de mi casa comiendo (...) Suplicamos que nos permitieran pasar. Que lo que queríamos era, como familia, volver a reunirnos; que el pueblo lo que quería era saludar a su presidente y manifestarle su voluntad", dijo Castro.
La voluntad a la que se refería la primera dama es la "que decidimos (los hondureños) que usted iba a ser el presidente de Honduras, y usted era quien iba a velar por todos los hondureños".
Por otro lado, relató que durante los cinco días que permaneció en El Paraíso, también exigía porque había mucha gente que estaba impedida de transitar también por el toque de queda que "tenía hambre, tenía sed, que necesitaban medicamentos", por lo que exigían el paso de las "caravanas interminables y los vehículos que transportaban la solidaridad" a los más necesitados.
Bajo esta arista, insistió en que la exigencia continúa para que se suspendan los retenes a nivel nacional, "se suspenda el toque de queda, que se suspenda la represión que ha sufrido el pueblo hondureño", por parte de las autoridades golpistas, presididas por Roberto Micheletti, de quienes consideró estar "equivocados", porque la represión en vez de adormecer al pueblo, lo despiertan aún más a permanecer en pie de lucha.
"Se equivocaron, escogieron el mal camino, no entendieron que cuando el pueblo siente que se le quitan sus derechos, el pueblo sale a las calles", dijo Xiomara Castro de Zelaya, al tiempo que agregó que "hemos sido una Honduras pacífica".
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