Juanito y la democracia

Juanito y la democracia

Iztapalapa respaldó y llevó a la delegación a Clara Brugada. Sin embargo, “Juanito” respaldado por el PAN y su militante Alejandra Núñez –a quien nombró directora de Jurídico y Gobierno– pisotea la voluntad popular. Y está empeñado en aferrarse a un puesto que no le corresponde.

Los medios (que por lo general desinforman) ocultan el fondo del problema. Fue el Tribunal Federal Electoral el que de manera perversa la quitó la candidatura a Clara y ahí comenzó el problema.

Clara tenía derecho a ser candidata, es indudable que era la principal opción, pero la ley electoral, el IFE y el Tribunal se lo impidieron. ¡No hay derecho! Ahí comienza el problema. Para que haya una elección democrática tiene que comenzarse por una selección democrática de candidatos y la posibilidad de que los electores puedan contar con sus propios candidatos.

Al cerrar el Tribunal la salida, se optó por apoyar a Rafael Acosta “Juanito”, quien se comprometió (hasta lo juró) a servir como medio para la realización de la voluntad popular y lograr que Clara, fuera la delegada. ¡La victoria de Iztapalapa el 5 de julio fue una gran hazaña!

Pero otra vez, el problema de fondo es que en la ley, los candidatos no tienen un mandato. Una vez en el poder hacen lo que quieren.

Así, los candidatos del PRI y el PAN dijeron que no iban a subir los impuestos y lo hicieron, Calderón dijo de candidato que iba a promover el empleo, despide a 44 mil electricistas y tiene a 3 millones en el desempleo. Y Juanito actúa a capricho.

La lección principal y la conclusión necesaria es que en México hace falta la renovación democrática y que los electores puedan proponer libremente a sus candidatos y para que éstos –una vez electos– sean fieles a sus compromisos de campaña y de lo contrario es necesario un mecanismo para que los electores los destituyan, revocándoles el mandato. Mientras tanto –y el caso “Juanito” lo prueba– en México no hay sino un remedo de democracia.

Fuente: El Periódico

Difusión AMLOTV