jueves, 25 de junio de 2009

Fraude de TELMEX contra consumidores

22 de junio 2009, tomado de El poder del consumidor en línea.

La empresa Teléfonos de México, Telmex, viene realizando un cobro fraudulento en contra de los consumidores mexicanos al exigir el pago por servicios no prestados. Ante ello, El Poder del Consumidor ha solicitado la intervención de las autoridades de Profeco y Cofetel para detener esta ilegalidad.

El primero de estos cobros fraudulentos ocurre en telefonía fija. Ante la ola de extorsiones y amenazas telefónicas, cientos de miles de usuarios han acudido a las oficinas de Telmex para solicitar que su teléfono sea privado. La sorpresa para los usuarios es que Telmex les cobra $10.40 pesos cada mes, de manera permanente. El cobro se realiza por un no servicio, por no aparecer en el directorio telefónico y en el 040.

El propio contrato de la empresa para telefonía fija establece en la décimo segunda cláusula que “Telmex proporcionará a EL SUSCRIPTOR en forma gratuita un directorio telefónico impreso que cubra el área urbana del domicilio donde se contrató la línea y que contenga el nombre, número telefónico asignado, domicilio y código postal de los suscriptores. Estos servicios no incluirán aquellos números que El SUSCRIPTOR haya contratado con carácter de privado”.

“El propio contrato de Telmex establece que el directorio y el hecho de aparecer en ese directorio son servicios. Anotemos que es un servicio que brinda de manera gratuita porque a eso lo obliga la concesión que el Estado otorgó a Telmex. Por lo tanto, cobrar por no aparecer en el directorio ni en el 040 significa exigir un pago por un no servicio. Un cobro por no hacer nada, que le permite a Telmex obtener millones de pesos mensualmente”, señaló Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor (EPC).

El cobro, autorizado por la Comisión Federal de Telecomunicaciones, contraviene el artículo 86 de la Ley Federal de Protección al Consumidor que establece claramente que el contrato de adhesión “no podrá implicar prestaciones desproporcionadas a cargo de los consumidores, obligaciones inequitativas o abusivas”.

EPC pide al Procurador Federal del Consumidor, Antonio Morales de la Peña, actuar a favor de los usuarios de telefonía de Telmex revisando este cobro indebido. Asimismo, solicita al presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones, Héctor Osuna Jaime, revisar la autorización que dio la COFETEL al cobro de este no servicio.

Otro fraude de Telmex

EPC alertó acerca de otro abuso de Telmex. En el contrato de telefonía móvil con Telcel, en la cláusula décimo séptima, se establece que con el fin de “garantizar el cumplimiento de las obligaciones de pago” el cliente “otorga fianza a favor de Telcel para que a su nombre y representación contrate y obtenga una fianza”.


El cliente no tiene conocimiento de esta fianza ya que al contratar es común que aparezca como “gratis en el primer año” y no se le cobre. En el segundo año es cuando se cobra una cantidad de alrededor de 200 pesos. La cláusula establece “Telcel en ningún caso reembolsará al Cliente el importe del cargo por la fianza”.

“El negocio de la fianza es redondo. La compañía con la cual Telcel contrata la fianza se llama Fianza Guardiana Inbursa, propiedad de Carlos Slim. Aquí hay otro elemento de fraude: una fianza que se establece como obligatoria en un servicio en el que no debería de existir y, más aún, una fianza que no regresa al cliente que la pagó, aunque no se haya utilizado para cubrir una falta de pago”, señaló el director de EPC.

Para estimar los ingresos que representan estos cobros indebidos basta decir que hay 18 millones de teléfonos fijos y más de 70 millones de teléfonos celulares. Telmex tiene la mayor parte de la telefonía fija y alrededor del 74% de los móviles. Si solamente 4 millones de usuarios de telefonía fija de Telmex fueran privados, la empresa tendría un ingreso anual de $480 millones de pesos por no hacer nada. En telefonía móvil, si consideramos que 10% de los usuarios de Telcel tienen contrato pospago, la empresa obtiene alrededor de $100 millones de pesos por concepto de fianzas, que como establece el contrato, “en ningún caso reembolsará al cliente”.

El grado de la riqueza de esta empresa se explica con el fraude a los consumidores ante la complacencia de los organismos gubernamentales.

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