Leña al fuego
El gobierno o desgobierno calderonista no cesa con sus absurdos para hacer daño a la nación. Tras de que el país sufre la más dramática embestida de la violencia que se produjo a raíz de que Calderón sacó al Ejército a hacer funciones de policía, sin haber limpiado antes a la misma PGR, fuente de la que se valía el narcotráfico para conseguir la complicidad de las policías estatales y municipales.
Ahora usa la misma policía federal y al Ejército para tomar por la fuerza Luz y Fuerza del Centro, vengarse del sindicato de electricistas que no ha querido ser lambiscón y encubridor de las tropelías de su gobierno como el SNTE, la CTM, el SUTERM o la CROC.
El pretexto: la ineficiencias de la administración de Luz y Fuerza del Centro, sin decir que él y su antecesor Fox, nombraron a los directores generales, que junto con sus contratistas han salido archimillonarios, asesta un golpe militar apoderándose de las instalaciones de la Compañía un sábado en la madrugada lanzando, a la calle a los trabajadores e imponiendo a los del SUTERM, sus incondicionales.
Todos hemos sufrido en ocasiones apagones y al hablar a la Compañía de Luz nos han hecho esperar y, cuando al fin llega una cuadrilla a reparar las líneas, se retira diciendo que ellos son de líneas aéreas y que el mal está en las subterráneas por lo que habrá que esperar otros días para arreglar las averías.
Pero tal deficiencia no está en los trabajadores, sino en el Consejo de Administración de la Compañía, que lo forman el secretarios del gabinete calderonista, que no han querido atender las propuestas de los trabajadores para mejorar el servicio y sólo piensa en dañar al mismo para echarle la culpa a los trabajadores, excluyéndolos para poder explotar con concesionarios privados (Canales Clariond y Martens asociados con españoles) las líneas de transmisión de electricidad agregándoles líneas de fibra óptica para telefonía y televisión.
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