• De las falsas denuncias y las falsas declaraciones…

ulio Ricardo Blanchet Cruz

• De las falsas denuncias y las falsas declaraciones…

• Del General de seis estrellas…

26 enero 2010

jrbc@diariolibertad.org.mx

En el colmo de la burla, don Genaro García Luna, flamantísimo secretario de Seguridad Pública, sale con que el 80 y tantos por ciento de las denuncias que hacen los ciudadanos, son falsas…

Y desde luego que hacen perder el tiempo de los sabuesos (y el dinero del Erario) que bien podría ser utilizado en perseguir delitos reales, no ficticios. De esa manera muchos de los ilícitos denunciados que hoy no se resuelven por estar ocupados persiguiendo fantasmas, podrían ser atendidos…

Lo que ciertamente que no suena mal como excusa; si fuera cierto…

Pero resulta un poco increíble que los mexicanos se pongan a perder el tiempo y gastar los escasos pesos que se tienen en un asunto que podría traerles consecuencias serias…

Porque ir ante un Ministerio Público a denunciar algo que es falso, que es el delito al que se expondrían, francamente cualquiera pensaría que es de una manera innecesaria…

Sin dejar de comentar que las cifras que don Genaro les dio a los honorables diputados sobre los precios y los consumos de drogas, son tan falsas (hechas sobre las rodillas) como las mismas denuncias falsas que dice que se presentan…

Pero hubo más. Y se llegó a considerar una verdadera imprudencia por parte de don Genaro, el declarar que en los últimos seis meses se había duplicado el mercado de las drogas, y por lógica su consumo…

Pues con ello automáticamente descalificó las palabras de don Felipe. Quien no se cansa de decir cuantas veces puede, que les va ganando el combate a los narcotraficantes…

Cuando prácticamente no es posible que se vaya ganando la guerra a los mafiosos, cuando el mercado se ha duplicado en cosa de seis meses…

Y cuando Calderón tuvo que retirar al Ejército de Ciudad Juárez. Hoy se sabe, por las declaraciones de Carlos Pascual, que fue el propio Carlos Pascual quien dio las instrucciones de lo que debía de hacerse con el Ejército…

Pues de facto se ha convertido en General de seis estrellas, que le da ordenes al de cinco estrellas, que manda al de cuatro estrellas. Ante el silencio de los divisionarios (los de tres estrellas) que de nueva cuenta se quedan callados ante la ofensa…

Antes se quedaron callados cuando José López Portillo, siendo Presidente, nombró General de División a Arturo el “Negro” Durazo. Y hoy guardan silencio a pesar de sus tropas fueron retiradas por indicaciones del Embajador de los EEUU, hoy convertido en General de seis estrellas…

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.