viernes, 14 de mayo de 2010

ESTADO DE LOS ESTADOS

ESTADO DE LOS ESTADOS


Por: Lilia Arellano
“Los estados poderosos sólo pueden sostenerse por el crimen”: Mijail Bakuni
• Calderón al servicio del narco
• Clinton y el “lavado” de dólares
• De Nixon a Obama fracasa EU
• Abierta la guerra contra México
• Liberan a esposa de “el chapo”
• “No me bajen”, pide “Greg” a PRD



Mayo 13, 2010.- Doña Hillary Rodham Clinton, esposa del ex presidente Bill Clinton y actual secretaria de Estado de Estados Unidos, oculta sus cadáveres en el closet y ve la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio al señalar que no hay una estrategia efectiva en la lucha antinarcóticos en el país vecino, es decir México, y en otras partes del hemisferio. Aunque la ex senadora del poderoso estado de Nueva York tiene toda la razón al referirse a la fallida estrategia de Felipe Calderón y su perdida “guerra” contra algunos cárteles del narcotráfico mexicano, parece olvidar que los gobiernos de su propia Nación, United States of America, incluidos el de su esposo y el de su actual jefe, Barack Obama, en las últimas cuatro décadas han fracasado estrepitosamente en su propia “guerra” contra la drogadicción que depreda a la juventud estadounidense y que en cálculos conservadores son 30 millones de adictos.

Gil Kerlikowske, el pomposamente llamado “zar antidrogas” de Estados Unidos, admitió la escandalosa derrota de las administraciones de los presidentes estadounidenses Barack Obama, George W. Bush, Bill Clinton, George H. W. Bush, Ronald Reagan, Jimmy Carter, Gerald Ford y Richard Nixon, y reconoció públicamente la necesidad de cambiar la estrategia seguida hasta el momento en el propio territorio norteamericano en los últimos cuarenta años. El cambio de táctica de Obama para combatir el grave problema de la drogadicción de los estadounidenses -y del hasta el momento indestructible círculo vicioso que representa la enorme dependencia de los cárteles de la droga locales e internacionales, la gran red de delincuencia que abarca prácticamente todo su territorio, en donde las aduanas de la frontera con México y las de sus grandes costas son apenas el inició de los tentáculos de ese poderoso pulpo- es la aceptación de su aplastante fracaso en la primera década del Siglo XXI.

Doña Hillary nos quiere hacer creer que el global negocio del narcotráfico es manejado por los capos de Latinoamérica o países de Asia, que se esconden en lugares remotos, apartados o desconocidos en México, Colombia, Perú, Bolivia, Afganistán, o el país que se les ocurra de acuerdo con el momento político que se viva. La realidad es muy pero muy distinta. La verdad es que el opio, la cocaína, la mariguana y las anfetaminas, entre otras drogas, mueven más de 300 billones de dólares al año. De acuerdo con reportes de la Oficina de las Naciones Unidas para las drogas y el Crimen (Unodc, por sus siglas en inglés), la producción mundial de cocaína, por referirnos sólo a una droga, supera las 992 toneladas. Esta droga en Harlem, en Broadway, o en los selectos pasillos de Harvard se consigue entre los narcotraficantes locales en 30 mil dólares el kilo y puede ser adulterada hasta obtener por cada gramo de piedra crack entre 40 y 80 dólares. Este gran negocio ilegal requiere una gran y eficiente organización, superior en muchos casos a las que tienen las grandes trasnacionales de los Estados Unidos.

Desde muchas de las regiones más apartadas de América Latina y el Caribe, así como otras importantes regiones de Asia y África, pero también dentro del territorio estadounidense, se producen, trasladan y distribuyen más de 50 millones de kilos de sustancias ilícitas, que aparentemente son objeto de una “guerra a muerte” contra los productores y vendedores... pero del tercer mundo. Sin embargo, la Clinton pasa por alto que las decenas de miles de toneladas de drogas que se consumen en Estados Unidos pasan por sus puertos y fronteras que son vigiladas por sus autoridades. Además, casi un centenar de oficinas de la DEA se reparten en 63 países – sin contar las casi 300 que se hay en territorio estadounidense- para recordarle al mundo que esa “guerra” es prioridad de los Estados Unidos de América, la mayor potencia económica, militar y policial. Los “grandes zares” de la droga que maneja mediáticamente el gobierno estadounidense, incluyendo al famoso capo mexicano consentido de los sexenios de Vicente Fox y Felipe Calderón, Joaquín “el chapo” Guzmán, no son más que pequeños intermediarios.

MAGNA LAVANDERIA

Un punto que resulta por demás importante es la extraordinaria cantidad de recursos financieros que moviliza el cada vez más floreciente negocio del narcotráfico y que al decir de los expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), del Fondo Monetario Internacional (FMI), de la Drug Enforcement Administration (DEA), superan los 500 mil millones de dólares, que simple y sencillamente se “lavan” en el sistema financiero internacional, predominantemente, por supuesto, de Estados Unidos, Gran Bretaña y los paraísos fiscales, como los de Las Bahamas y las Islas Caimán, en el Caribe, pero que también funcionan sobre todo en el centro de Londres, en Mónaco, en Tokio, y a unos pasos del propio estado de doña Hillay Clinton, en Delaware, a pocos minutos de Nueva York y de Wall Street, la capital financiera de los Estados Unidos de América. En dichos paraísos fiscales, funcionan más de un millón de sociedades amparadas por el anonimato: empresas –virtuales o reales- a las que nada ni nadie obliga a presentar balances, establecer su composición accionaría o, incluso, tener capital alguno. Estas empresas suman más 4 mil bancos offshore con depósitos conjuntos que superan los cinco billones de dólares.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que agrupa a los países más ricos del mundo, incluyendo a México, ha reportado que el volumen del comercio mundial que pasa por los paraísos fiscales de manera documentada crece constantemente desde la década de los 70s, lo que indica que la mayoría de las principales corporaciones aprovechan la movilidad trasnacional de sus capitales para lavar sus ganancias a través de los paraísos físcales y de regímenes de impuestos bajos. La mayoría de las “empresas” asentadas en tales “territorios” no muestran nunca al cliente ni oficinas ni empleados, así también lo hacen la mayoría de los bancos offshore, que en la realidad son sólo instituciones virtuales, conocidas como “corresponsales”, que sólo requieren de una cuenta abierta en una institución bancaria físicamente establecida en ese u otro “paraíso” fiscal. Los grandes “lavadores” de dinero cuando requieren borrar una pista que vincule a depositario y depósito, recurren al nesting o enniedado, es decir, una cuenta en un banco que a su vez tenga cuenta en otro banco que tenga cuenta en un offshore. Esta banca virtual tiene serios respaldos en los más importantes bancos de Suiza, Inglaterra, Alemania, Japón, Estados Unidos y muchos más. Doña Hillary también parece olvidar o nos hace creer que desconoce que la mayoría de los bancos investigados por el Senado de su país, del cual ella formó parte fundamental hace apenas unos meses, tienen cada uno más de mil cuentas en bancos corresponsales, y tienen depositados decenas de miles de millones de dólares.

La “amnesia” de Hillay Rodham Clinton parece provocada por el hecho de que como abogada estuvo involucrada en la defensa de uno de los grandes socios del BBCI (Bank of Credit and Commerce Internacional), uno de los diez bancos más importantes del mundo, el mismo que en las últimas dos décadas estuvo involucrado en los escándalos por el financiamiento al terrorismo y lavado de dinero, así como las cuentas personales de Manuel Noriega, Saddam Hussein, Ferdinando Marcos, y depósitos de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), y el servicio secreto israelí (Mossad), y la contra nicaragüense, y que con ese escándalo se vino abajo la gigantesca trasnacional de auditorías, si leyó usted bien, de auditorías, Price Waterhouse.

La abnegada esposa de Bill Clinton, que le perdonó su pecadillo con Mónica Lewinsky, también parece pasar por alto que el Citibank ha sido investigado por sus prácticas de lavado de dinero, con referencias a regímenes altamente corruptos como el de Carlos Salinas de Gortari, el peruano Alberto Fujimori y el filipino Joseph Estrada, que presidieron países productores de drogas. También nos quiere hacer creer que desconoce que la gigantesca trasnacional de la ingeniería y la construcción, la KBR, cuyos socios claves son la familia Bush, de la cual han tenidos dos presidentes los Estados Unidos de América –uno de ellos “amigazo” de Vicente Fox- y su segundo al mando Dick Cheney, se hizo de grandes contratos, multimillonarios todos ellos, en los grandes centros de distribución de drogas, y en los corredores que van de Pakistán a Bosnia y de Colombia a México.

¿Por qué no doña Hillary Clinton, secretaria de Estado de Estados Unidos, apunta sus baterías a los cuarteles generales de la industria del narcotráfico y el lavado de dinero? Por una sencillísima razón, explicada por los administradores de los fondos de inversión de Wall Street: cada dólar que se apunta en el renglón ganancias de una empresa trasnacional, como General Motors, Toyota, British Petroleum, por mecionar sólo algunas, representa automáticamente un incremento de seis dólares en el valor de las acciones. Si los 500 mil millones de dólares que produce el narcotráfico se prestan a bajo interés, o incluso en canje simple por acciones, son 300 billones de dólares, totalmente “lavaditos”, legales, cambiables, usables. Estos cuantiosos recursos financieros, por supuesto, no se dejan ni se dejarán al alcance de potenciales competidores.

La globalización impulsada por los gobiernos conservadores de Gran Bretaña y los Estados Unidos de América, en la que se inscribió de inmediato México con Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo, y en la que navegó con la misma bandera Vicente Fox y ahora Felipe Calderón, posibilitó el crecimiento explosivo de un mercado financiero fuera de la ley, “motor de la expansión capitalista lubricado por las ganancias del gran crimen”, como los señaló un reconocido periodista de Europa. Las grandes ganancias del narcotráfico constituyen el motor de un pequeño pero sumamente poderoso grupo de empresas que realmente dominan al mundo. Las guerras, incluyendo en los último años “las guerras contra el narcotráfico”, les permite apoderarse de países enteros, como ahora es el caso de México, con la “guerra al narcotráfico”, declarada estúpidamente o maquiavélicamente, según el ángulo desde el que se le quiera ver, por Felipe Calderón, quien sirve a esos intereses, mientras que la carne de cañón, los más decenas de miles de muertos que ha dejado en lo que va de su fallida administración los siguen poniendo los pequeños narcos, los menudistas, y la ciudadanía en general, cuyas muertes cínicamente son calificadas como “daños colaterales”.

LIBERAN A LA ESPOSA DE “EL CHAPO”

Un operativo implementado el miércoles por el Ejército y la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) en Culiacán, Sinaloa, dio como resultado la captura de Griselda López, segunda esposa de Joaquín “el chapo” Guzmán Loera, y madre del joven Edgar Guzmán López, asesinado hace dos años. Vehículos artillados conducidos por militares cercaron el fraccionamiento Las Quintas para catear el antiguo hogar de Griselda López, que se ubica en el cruce de la avenida El dorado y el boulevar Sinaloa.

Funcionarios de la Procuraduría General de la República confirmaron la noche de ayer que se dejo en libertad bajo las reservas de la ley a Griselda López, quien había rendido su declaración ante el Ministerio Público y posteriormente fue liberada pues, argumentaron, hasta el momento no hay señalamientos en su contra que la vinculen con algún delito. También sostuvieron que en los operativos que se llevaron a cabo el martes y el miércoles pasado “no hubo” personas detenidas.

De acuerdo con la revista Forbes, Joaquín “el chapo” Guzmán es el segundo delincuente más buscado del mundo, y sólo es superado por el líder talibán Osama Bin Laden, a quien el gobierno de Estados Unidos responsabiliza por los ataques terroristas del 11 de septiembre en Nueva York. El gobierno de Estados Unidos ofrece una recompensa de 5 millones de dólares por el dirigente del cártel de Sinaloa.

DE LOS PASILLOS

“Es un complot” grita a los cuatro vientos el candidato de la alianza PRD-PT-Convergencia, Gregorio “Greg” Sánchez Martínez, para intentar defenderse de las órdenes de aprehensión en su contra como ampliamente han publicado los medios de comunicación de todo el país. “Greg” dice que son falsos los reportes de que entregó su expediente judicial a Jesús Ortega y que no cree que el PRD quiera “bajarlo” como candidato. Sin embargo, fue incapaz de presentar una prueba de sus señalamientos. Lo cierto es que el cada vez más acorralado “Greg” y Rafael Quintanar, dirigente local del PRD, estuvieron el miércoles “horas” con el “chucho mayor”, dirigente nacional perredista, para intentar salvar su candidatura.

El candidato del PAN a la alcaldía de Valle Hermoso, Tamaulipas, Mario Guajardo Varela, así como su hijo Luis Mario Guajardo Adame, y un trabajador, fueron ejecutados por un grupo de tres sicarios dentro de las instalaciones de su empresa, la “Promovedora Agrícola Guajardo”. El candidato del PAN a la gubernatura de Tamaulipas, José Julián Sacramento Garza, confirmó por su parte que tres municipios de la entidad carecen de candidatos de su partido por el miedo y la violencia que se registran en Mier, Camargo y Nueva Ciudad Guerrero. Sin embargo, descartó que se de una desbandada de candidatos panistas.

(lilia_arellano@yahoo.com; www.fuego-cruzado.tv; www.estadodelosestados.com.mx)


Fuente: Indice Político
Difusión: AMLOTV

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