DESCOMPOSICIÓN ACELERADA

DESCOMPOSICIÓN ACELERADA

Por: Claudia Rodríguez

Qué remedio. Tuve que decir la verdad pese a que muchos puedan opinar que mi percepción del país está equivocada y que necesito un curso intensivo de optimismo y esperanza.

Hace unas horas llegó a mi correo un saludo y deseos de un feliz año acompañado de un ¿cómo van las cosas allá en México?

El mail proviene de Japón desde la localidad de Yashiro y lo escribe una entrañable amiga.

Mi primera reacción fue de un gusto terrible por saber que mi compañera de estudios se acordaba de mí, y por un momento pensé solamente desearle buenos momentos y salud, así como apuntar que todo iba muy bien. Pero me retracté. Ella pedía en específico que le comentara cómo iban las cosas en el país, así que hice catarsis y le comenté:

“Querida Martha Eva, me apena mucho tener que darte el parte de nuestro querido país en donde ambas crecimos y el que tanto queremos y tú añoras, pero el diagnóstico no es nada alentador.

Puedo apostar que tú, como buena geógrafa estarás documentada e informada y sabrás que en México hay una guerra contra los criminales de altos vuelos que a la sociedad nos ha traído mucho miedo y muchas muertes, de entre estas se cuentan vidas perdidas de manera cruel y violenta lo mismo de delincuentes, autoridades e inocentes. Es una guerra que fue impulsada por el señor Felipe Calderón --sabes a quien me refiero— pero que ahora el mismo no reconoce haberlo hecho, es más, ni haberla nombrado así.

Ya sabes Martha, seguimos moviéndonos en el mismo México de hace muchos años en donde pareciera que el que no transa no avanza y así los actos de corrupción están a la orden del día, incluso practicados de forma cotidiana por muchos mexicanos que no precisamente son o políticos o gobernantes.

El asunto de la economía va de mal en peor. Ahora sí te puedo afirmar de forma categórica que no hay dinero que alcance para los asalariados. Ir de compras a abastecerse de víveres constituye un alto peligro en dos posibles vías: gastar todo el dinero que se trae consigo en esa compra, o bien, acortar la adquisición de lo necesario por lo excesivo de los precios. Pagar los servicios como el agua, la luz, el gas y otros es un asunto de terror. De verdad que los recibos respectivos apuntan cifras increíbles y estratosféricas. Todo está más que encarecido.

¿Te puedes imaginar querida amiga que he llegado a pagar el limón en $50.00 el kilo?

El hecho Martha, es que creo que muchos millones de mexicanos a diario se van a la cama con decenas de preocupaciones que gobiernos y administradores abordan en el discurso y pareciera que nada más.

Discúlpame por lo trágico de mi reporte, pero así lo veo yo. México está en descomposición acelerada.”…

Al menos contestar el correo me permitió desahogarme un poco.

Acta Divina…En marzo del año anterior, el presidente Felipe Calderón defendió el uso del presupuesto que se integra con las aportaciones que “con enorme trabajo contribuyen los mexicanos” y afirmó: "Sabemos que a todos los mexicanos cuesta un enorme trabajo poder contribuir al gasto público, pero puedo asegurarles que esos gastos públicos se concentran precisamente en lo que la gente más necesita".

actapublica@gmail.com

Fuente: Indice Político

Difusión: AMLOTV