El PRIAN aprueba la política oficial

El PRIAN aprueba la política oficial

Antonio Gershenson

La llamada Estrategia Nacional de Energía, documento que supuestamente va a regular el sector energético de aquí a 2024, tuvo como base (o por lo menos una de sus bases, pero la participación es mencionada oficialmente) un trabajo de la trasnacional McKinsey, de triste memoria para este país. Pues bien, el documento fue aprobado por los diputados del PRIAN y con la oposición de los legisladores de izquierda.

Ese escrito tiene supuestas metas que no dice cómo ni con qué medios se van a lograr. Pero hay varios elementos que indican fundamentos de la política oficial. Un caso importante es el Ciclo de Portafolio de Proyectos de Pemex Exploración y Producción (Figura 5 del escrito oficial). Es una línea que primero aumenta, y esta parte se califica de desarrollo; luego sigue arriba, con el nombre de producción, y va bajando con el nombre principal de declinación y mantenimiento. Lo más grave es que lo que se usa como unidad de medida principal es lo que llaman Reservas 3P, que traducido al mexicano son las reservas probadas, pero también las no probadas, y dentro de éstas las llamadas posibles, que en otros escritos se equiparan con 10 por ciento de probabilidad de que se conviertan en realidad. En este esquema, lo mismo cuenta nada barril de reservas probadas, que otro de reservas posibles.

Con esto, Chicontepec está apenas al principio de la subida; le falta por subir más de las tres cuartas partes. La realidad es que no sube nada, como veremos. Y se apoya en sus enormes reservas 3P, a pesar de que sus reservas probadas no llegan a 3 por ciento del total.

En paralelo, el documento insiste en la mayor participación privada, en los contratos de desempeño y contratos de largo plazo. Esto, a pesar de que la Auditoría Superior de la Federación, al revisar la Cuenta Pública de 2008, señala que es más barato perforar pozos con medios propios de Pemex que contratarlo con particulares.

También en el sector eléctrico se prevé que continúe la liquidación de las plantas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para que siga el creciente predominio de las empresas extranjeras. En la Figura 11 compara una serie de datos de cada forma de generación de electricidad. Están, por ejemplo, las plantas de ciclo combinado y las hidroeléctricas. Pero no están las termoeléctricas que funcionan con derivados del petróleo, que son la mayoría de las que quedan en CFE. Y en este cuadro, las condenan a muerte. Además de la privatización, funcionarios importantes detestan estas plantas porque el combustóleo o el diesel se los vende Pemex; entonces, no hay concursos ni ganadores agradecidos del concurso.

Uno de los problemas de Chicontepec es el uso del fracturamiento hidráulico, que en Estados Unidos ha causado problemas a los vecinos y se ha dado un conflicto, sobre todo por contaminación del agua potable. Aquí también puede estar causando problemas, pero no hay ninguna autoridad que lo verifique. En un informe, Pemex dice que este fracturamiento consiste en inyectar arenas de grano más grande que el de la formación productora, acarreadas por un fluido viscoso a alta presión, capaz de romper la roca. Preguntamos: ¿en qué medida ese líquido se mezcla con depósitos de agua? ¿En qué medida lo que puede romper las rocas puede también dañar las casas cercanas?

Hace poco se publicó un estudio de la Comisión Nacional de Hidrocarburos llamado Proyecto Aceite Terciario del Golfo (ATG, otro nombre de Chicontepec). Primera revisión y recomendaciones. Uno de los temas mencionados es el del fracturamiento. De un total de 2 mil 26 perforaciones, mil 737 han sido fracturados, y de ellos, mil 323 lo fueron con fracturamiento hidráulico. Notamos que del total, 905 pozos están ya tapados, y seguían produciendo los otros mil 121. El estudio muestra datos en el sentido de que, por más que se perfora, la producción no crece. La producción de aceite en el proyecto ATG se estancó en 29 mil barriles por día, a pesar de que la petrolera perforara 794 pozos de desarrollo.

¿No que Chicontepec va en una cuarta parte de la subida? Lo que sí es productivo es el negocio del contratismo. Siguen destinando más dinero a ese lugar que a cualquier otro, sin ningún beneficio real. Podrán seguir diciendo que ahí hay más reservas inexistentes que en cualquier otro lado; lo que hay son más perforaciones, más daños a la población y más beneficios para quienes reparten los contratos y para quienes los reciben. Otro problema señalado por el estudio es que en 2009 el proyecto sólo aprovechó 64 por ciento del gas. Lo demás es quemado o, incluso, venteado, o sea, que lo dejan salir sin siquiera quemarlo, sin importarles la mayor contaminación del aire.

De la misma fuente, el volumen original de crudo en Chicontepec fue de 136 mil 184 millones de barriles. Pero su producción acumulada fue de 160 millones, poco más de una milésima parte. En cambio, Ku tuvo un volumen original de 4 mil 474 millones y su producción acumulada hasta la fecha es de mil 999 millones, como 45 por ciento. En Po, de 2 mil 253 acumuló una producción de 936, 42 por ciento. Y con cualquier caso veríamos que la producción acumulada en comparación con el volumen original es muchas veces mayor que la de Chicontepec.

Esto es parte de lo que pretende defender la Estrategia Nacional de Energía. Y ni con los votos del PRIAN van a salir adelante.

gershen@servidor.unam.mx

Fuente: La jornada

Difusión AMLOTV