Amenazas, detenciones, hostigamiento e intimidación, recibieron organizaciones sociales
Fuente: La Jornada de San Luis
“Le voy a dar un recado de Héctor Vega, que si algo llega a pasar, si llegan hasta allá, habrá detenciones, y que inclusive el Estado Mayor Presidencial tiene órdenes de actuar”, advirtió Antonio Martínez Portillo, asistente del secretario de gobierno, a la asesora de la Coordinadora del Movimiento Amplio Popular (CMAP), Bertha Manzanares Castañeda, durante la marcha hacia el Centro de Convenciones donde Marcelo de los Santos Fraga rindió su último informe de gobierno a los potosinos.
Los contingentes de la CMAP designaron como punto de reunión la esquina formada por las avenidas Chapultepe y Salvador Nava para llegar caminando hasta el centro de convenciones, donde se manifestarían en contra el aún gobernador, Marcelo de los Santos Fraga. Esta pretensión se vio obstruida por las fuerzas policiacas locales y federales que vigilaron su marcha sobre la avenida Chapultepec e hicieron intentos de frenar su avance primero, con soluciones a sus demandas; luego con amenazas que culminaron con la disolución del contingente. La misma historia se repitió con otros grupos de inconformes que habían anunciado manifestaciones para ese día.
Los contingentes del Movimiento Pueblo Libre contaron con “escolta oficial” de policías federales, a lo largo de la avenida Chapultepec, que les impidió bajarse de los vehículos frente al inmueble donde el panista rendía su sexto y último informe. Acción Ciudadana recibió amenazas de aprehensión por parte de agentes locales.
Los integrantes de la Canacar recibieron las presiones más decididas toda vez que el gobierno marcelista acudió a la Sedena para hacer desistir a los transportistas de su intención de quemar un vehículo frente al centro de convenciones durante el informe marcelista. A los comuneros les fue peor, detuvieron a dos de ellos.
Espectacular, sin duda, pero igual de efectivo que el hostigamiento de que hicieron víctima a los cemapistas que, caminando, pretendían llegar para instalarse frente a la sede del informe.
Dijeron que nos tienen bien identificados: cemapistas
Con la rabia y la decisión plasmadas en el rosto, Bertha Manzanares y Ma. De Jesús Castillo relataron a La Jornada San Luis cómo, primero policías locales, luego federales y por último miembros del equipo personal de seguridad de Marcelo de los Santos, negociaron, propusieron, advirtieron y por último intimidaron a los cemapistas que caminaban imperturbables hacia el periférico.
Martínez Portillo se acercó varias veces a hablar conmigo; primero quería que yo fuera a hablarle al licenciado Héctor Vega, luego que saliera de la fila para hablar con él y después me comunicó con el licenciado desde su teléfono celular, relata Manzanares Castañeda y agrega que cuando llegaron a la altura de la puerta del balneario le dieron la noticia de que los vales de material para agremiados de la zona Media estaban listos, que había que ir por ellos.
Cuando se negó a hacerlo y les informó que ya alguien estaba en camino para recoger los citados vales, las patrullas cambiaron sus posiciones a los lados del contingente para cerrarles el paso, por lo que decidieron entrar al parque Tangamanga por la puerta del balneario.
En ese momento, relata Manzanares, llegó Rafael Aguilar Fuentes El Chiquilin, que traía como 20 mantas y nos pidió que le ayudáramos con algunas, porque su gente era muy poca. Estábamos sacando las mantas cuando se acercaron los agentes para decirnos que debíamos guardar las mantas y que iban a llevarse detenido a El Chiquilín, pero él se defendió, les dijo que tenía derechos y les dijo en qué artículos estaban esos derechos. Luego El Chiquilín sacó su celular y se puso a hablarle a los medios de comunicación, sólo así lo dejaron en paz, pero a nosotros nos siguieron. Hasta para ir al baño llevábamos guardia. Cuando dejamos la marcha también nos siguieron y los “orejas” preguntaron por nuestros domicilios, durante todo este tiempo nos grabaron y con la evidente intención de asustarnos dijeron que ya nos tenían bien identificados.
El respeto a los militares nos detuvo: Torres
El dirigente de la Canacar, Adolfo Torres Mendoza, dijo que por al gran respeto que los transportistas le tienen al Ejército no fueron violentos en su protestas del pasado viernes durante la visita del presidente Felipe Calderón, ya que las cuatro marchas que tenían en sus puntos cardinales, fueron obstruidas por efectivos militares.
Mencionó que si la Policía Federal les hubiera tratado de impedir al acceso a donde iba el presidente Calderón a la inauguración de hospitales no terminados por el gobernador Marcelo de los Santos Fraga, ellos sí iban sobre ese personal corrupto y agresivo con ellos en las carteras, y hubieran lanzado y quemado dos tractomotores.
Indicó que no se vale que en un país como dice ser México, con democracia, “a los jodidos los supriman como a ellos y los dirigentes sociales como sucedió ayer en el centro de convenciones donde el emperador Marcelo de los Santos daba su último informe, solamente por decir la verdad. Todo ello, agregó, debe cambiar por el bien de las futuras generaciones que si nosotros no hacemos nada por ellos, serán los próximos delincuentes.
México, afirmó, necesita ya de nuevos lideres, ya son nueve años de mal gobiernos del Partido Acción Nacional, han hecho reflexionar al pueblo mexicano y la muestra fue en San Luis Potosí y Querétaro, en donde, antes ganaba el PAN y ahora es el PRI.
El ladrón tiene nombre y apellido: Chiquilín
Marcelo de los Santos se escudó en la figura del espurio presidente Felipe Calderon, señaló el activista de Acción Ciudadana, Rafael Aguilar Fuentes, el Chiquilin,.
Aseveró que fue tanta la represión contra los líderes sociales que dos kilómetros antes de llegar a su último informe en el centro de convenciones, que las policías federal, estatal y municipal les negó el paso.
Esos sujetos (los policías), indicó, que en esos momentos deberían estar cuidando a la ciudadanía de robos, estaban resguardando al mayor ladrón de San Luis Potosí, que tiene nombre y apellido, Marcelo de los Santos Fraga.
No puede ser, externó, que un gobernador nefasto diga que antes de concluir su mal gobierno, el 25 de este mes, ande inaugurando obras inconclusas como el centro de convenciones, que lo único grande para Marcelo de los Santos, fue la placa, al decir que es una magna obra para el pueblo de San Luis Potosí, cuando no está terminada, y los selectos asistentes lo vitorearon, cuando al pueblo potosino no lo dejaron llegar.
Las policías federal, estatal y municipal, afirmó, que su deber es cuidar a la ciudadanía de los delincuentes como Marcelo de los Santos y familia, el viernes, la ciudad estuvo libre para el hampa, en donde hicieron lo que quisieron, puesto que los guardianes de la ley estuvieron protegiendo al máximo delincuente de San Luis Potosí, Marcelo de los Santos Fraga.
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