En uno de los casos, los militares ya habían cateado su casa, pero no hallaron nada
A Raúl Evangelista se lo llevaron de su vivienda; Roberto González fue sorprendido en su taller
MARGENA DE LA O
Chilpancingo, 6 de febrero. Familiares de Raúl Evangelista Alonso y de Roberto González Mosso denunciaron que en hechos distintos, efectivos militares fueron los que levantaron a sus parientes y desde hace días desconocen su paradero.
En conferencia de prensa en las instalaciones del SNRP, los familiares de las víctimas dieron los detalles en la forma en que actuaron los soldados.
Martha Luz Salas Rodríguez, esposa de Raúl Evangelista, denunció que los militares ya los habían acosado, pues el 14 de enero pasado a las 11 de la mañana catearon su domicilio, ubicado en la calle Ricardo Flores Magón número 13 de la colonia Obrera, día en que exigieron a su esposo que entregara las armas y droga que supuestamente tenía en su poder.
Al no encontrar nada, detalló, los soldados se retiraron, pero antes destrozaron puertas, ventanas y muebles, y les robaron unos 10 mil pesos y alhajas.
Mencionó que en esa ocasión, los militares llegaron en vehículos oficiales.
Posteriormente, el pasado 3 de febrero a las 3 de la mañana, llegó nuevamente un convoy con unos 15 soldados, pero esta ocasión camuflados con vestimenta color negro y vehículos particulares, aunque resguardados por automóviles oficiales, relató.
Contó que después de revisar la casa, los militares obligaron a su esposo a salir del domicilio, tomaron las llaves de su vehículo y se retiraron.
En esa ocasión también les robaron unos 40 mil pesos, una cámara de video y otras alhajas. El coche lo encontraron más adelantem encendido y con las puertas abiertas, “de mi esposo no sé desde ese día”.
Dijo que su cónyuge, de 35 años, es originario de Carrizal de Bravo, del municipio de Chichihualco, y que se dedica a la venta de aguacate en el mercado central Baltazar R. Leyva Mancilla.
“Sabemos que los militares ahora se dedican a robar gente; si lo que quieren es un rescate, que digan, nosotros vemos de dónde reunimos el dinero”, señaló Martha Luz Salas.
Agregó que ya interpuso su denuncia ante el Ministerio Público y la Comisión Estatal de Defensa de Derechos Humanos (Coddehum), incluso manifestó que ya solicitó información a la zona militar 35, pero les dijeron que no conocían del paradero de su esposo.
Aclaró que en el primer cateo no interpusieron denuncia, porque fueron amenazados por los militares, “además no me imagine que después fueran a llevarse a mi esposo”.
Por su parte, Rogelio González Mosso denunció que su hermano también fue levantado por los militares el mismo día y en las mismas condiciones, alrededor de las 10 de la mañana, de la talachería en que trabaja, ubicada cerca de la entrada a la comunidad de Petaquillas, cerca de la tienda Liverpool.
Manifestó que un comando de ocho hombres que se trasladaba en un Tsuru rojo y una camioneta Colorado gris, resguardados por vehículos militares, llegó hasta la talachería y se lo llevaron.
Añadió que él y su hermano conocen a Raúl Evangelista porque son originarios de la misma comunidad, ubicada en Chichihualco.
Fuente: La Jornada de Guerrero
Difusión: Soberanía Popular
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