Queridos miembros de la comunidad de Avaaz,
Nos acaba de llegar este conmovedor llamamiento de uno de nuestros miembros:
"Mi hija Oxana era una joven maravillosa y hermosa, con talento para los idiomas. Se fue de casa cuando tenía 20 años al aceptar el trabajo de sus sueños, como traductora en Europa. Nos alegramos mucho por ella. Tres semanas más tarde, la policía nos dijo que Oxana había muerto al caer de una ventana desde un quinto piso, mientras intentaba escapar de los hombres que la engañaron acerca del trabajo y la forzaron a trabajar en un prostíbulo. Me sentí morir cuando ella murió. Ahora sólo vivo para evitar que esto les suceda a otras jóvenes. Por favor, ayúdenme."
Oxana fue asesinada por una cruel industria que sigue creciendo a nivel mundial: la trata sexual. Una gran parte de este comercio afecta a niñas y jóvenes rusas enviadas a otros países europeos y a Estados Unidos donde les espera un futuro aterrador de violaciones diarias y de brutalidad.
Nosotros podemos ayudar a poner fin a este horror. Para detener la trata sexual, la nueva Convención Internacional requiere que se adopten medidas contundentes. Nikolai, el padre de Oxana, está reclamándole al Primer Ministro Putin que firme dichas leyes. Putin ha cultivado la imagen de hombre duro: ahora podemos persuadirle de que esta es su oportunidad de convertirse en un genuino defensor de las mujeres rusas. Nuestro objetivo es sumar, en los próximos días, un millón de voces a la de Nikolai para lograr que Putin pase a la acción. Haz clic abajo para firmar y reenvía este email a todos tus contactos. Luchemos juntos contra este horror ofreciendo un millón de razones para la esperanza:
La Convención Europea del Consejo de Europa contra el Tráfico de Personas establece los más altos estándares de cumplimiento de la ley para hacer frente a los criminales que explotan el comercio sexual. Si Rusia firmase dicha Convención, casi con seguridad, miles de niñas y jóvenes podrían salvarse cada año.
Esto supondría un duro golpe al negocio mundial de la trata sexual, en el que Rusia es un nexo clave. Cada año, en Europa, unas 50.000 mujeres y niñas rusas son forzadas a prostituirse en el marco de la industria sexual. Rusia representa además una importante ruta para el tráfico de niñas y mujeres que llegan a Europa desde Asia. Si Putin se involucrase personalmente en este tema, podría hacer que las autoridades rusas tomasen medidas más enérgicas, enviando así una clara señal a las redes mundiales de crimen organizado. Por Oxana, por su padre y por millones de mujeres como ella, alcemos nuestras voces:
Una gran parte de los problemas de nuestro mundo se derivan de la existencia de poderoso intereses, como el crimen organizado global. Pero a menudo, estos problemas persisten porque el resto del mundo hacemos la vista gorda. Si todos nosotros actuamos ahora, podemos convencer a Putin y al gobierno ruso para que se unan a esta causa. Juntos podemos escribir el último capítulo de la trágica historia de Oxana y de su padre: un capítulo de esperanza.
Con agradecimiento por todo lo que esta increíble comunidad es capaz de lograr,
Ricken, Alice, Luis, Paula, Maria Paz, Philippe y el resto del equipo de Avaaz.
Más información:
El flujo del tráfico de personas en Europa no se detiene (Euronews):
Corte europea de DDHH condena a Rusia y a Chipre por tráfico de personas (Boletín de Amnistía Internacional, Chile):
Difusión: Soberanía Popular
No hay comentarios:
Publicar un comentario