viernes, 25 de septiembre de 2009

El “Palacio” indigna



Por Anabel Hernández
25 Sep 2009
Diputados exigen a la Presidencia de la República que informe sobre los gastos del palacete de La Herradura. Incluso analizan la posibilidad de que se abra una investigación para saber cuánto cuesta mantener un bien público que sólo se utiliza para fines privados.

"Éstas son las cosas que no podemos permitir, más del doble discurso, cuando se está hablando de austeridad".

Así habló desde la tribuna de la Cámara de Diputados el secretario general del Congreso, el diputado del Partido del Trabajo Gerardo Fernández Noroña, quien mostró a los más de 400 legisladores presentes una impresión de la edición 147 de Reporte Índigo.

En esa edición, se revela la existencia del "palacio de los excesos" que utiliza la Presidencia de la República para hacer eventos privados pagados con recursos públicos.

Mientras el diputado agitaba desde la tribuna la fotografía de la Residencia Ávila Camacho -en pleno debate con el panista Javier Corral-, la bancada del partido azul hizo mutis.

Con este episodio inició el martes pasado la sesión de la comparecencia de Ernesto Cordero, secretario de Desarrollo Social, quien intentó convencer a los diputados de la necesidad de gravar el consumo, incluyendo alimentos y medicinas, con un impuesto de 2 por ciento etiquetado como Contribución para el Combate a la Pobreza.

"Hoy esas familias necesitan del gobierno y de los mexicanos (...), por eso estamos pidiendo la solidaridad de todos, para apoyar los esfuerzos de las familias más pobres", afirmó Cordero después de que las fracciones parlamentarias fijaran su postura en el tema de desarrollo social.

En sus curules, diputados de oposición preguntaban en tono de burla: "¿para los pobres o para su palacete?".

"(...) cuando nosotros hablamos de corrupción de este gobierno de facto, estamos hablando de casos concretos. Reporte Índigo acaba de presentar una investigación muy fuerte de una residencia en Bosque de Antequera 60, que fue la residencia del entonces presidente Manuel Ávila Camacho.

"Es increíble que un presidente de la República pueda tener una residencia de estas características, de más de cinco hectáreas, hecha al estilo deLe Petit Trianon, en Versalles, que tiene muestras de muebles, arte, cultura, que incluyen pinturas de Clemente Orozco, de David Alfaro Siqueiros, de Diego Rivera, y que fue donada a partir de 1997, asumida por el gobierno federal, para poder ser utilizada en visitas de jefes de Estado.

"A la fecha no ha venido más que un jefe de Estado, y es un lugar de fiestas privadas, primero de los hijos de Ernesto Zedillo, después de Vicente Fox y su esposa, después del finado español Mouriño y ahora de otros funcionarios de la Presidencia de facto, incluido Calderón", afirmó Fernández Noroña durante su intervención.

El palacio de los excesos

El viernes de la semana pasada, Reporte Índigo reveló la existencia de un palacete administrado por la Presidencia de la República y ubicado en Bosque de Antequera No. 60 en La Herradura, Estado de México. (INSERTAR FOTO DE FACHADA y la portada del número pasado con una liga para que la gente pueda volver a verlo)

La llamada Residencia Ávila Camacho tiene 5 mil 363 metros cuadrados de construcción -más de la mitad de lo que mide el Castillo de Chapultepec- y se ubica en un terreno de bosques y jardines que ocupa más de 5 hectáreas.

La propiedad perteneció al ex presidente Manuel Ávila Camacho. Su viuda, Soledad Orozco, la donó al gobierno federal en 1989 con la condición de que fuera usada únicamente como residencia temporal de mandatarios extranjeros en visita oficial.

Sin embargo, en una investigación realizada durante un año por Reporte Índigo, se descubrió que la casa fue utilizada el sexenio pasado para cenas de gala cuyo objetivo era recaudar fondos para el Centro Fox. Hoy es sede de fiestas particulares que comienzan en la tarde y terminan al día siguiente. Todo pagado con recursos públicos.

Durante 20 años, el gobierno federal ha pagado el mantenimiento de ese inmueble, pero la Presidencia de la República se niega a informar sobre los gastos, los usuarios y el inventario de todos los bienes que hay, y había, dentro de la residencia.

Reconoce diputado uso para fiestas

Después de que el diputado Fernández Noroña subió a tribuna el tema de la Residencia Ávila Camacho, Reporte Índigo solicitó una entrevista con la coordinadora de la fracción parlamentaria de Acción Nacional, Josefina Vázquez Mota, pero no hubo respuesta.


Mientras Vázquez Mota callaba, un diputado del PAN reconoció, de manera extraoficial, que le constaba que la casa de La Herradura es utilizada para fiestas privadas.

Explicó que en el sexenio de Vicente Fox, el gobierno federal supuestamente había tratado de deshacerse de la casa, pero no pudo.

En entrevista, el diputado panista Javier Corral señaló que desconocía la existencia de esa casa y su uso. Afirmó que no corresponde a la pobreza y desigualdad que vive el país y que el gobierno federal debe deshacerse de ella.

Piden investigación

El coordinador de la fracción parlamentaria del PRD en la Cámara de Diputados, Alejandro Encinas, señaló que conoció la casa cuando tenía 13 años, en una visita que él y compañeros de escuela hicieron a doña Soledad Orozco viuda de Ávila. Recuerda sus impresionantes jardines, el mausoleo a Ávila Camacho y el lujoso mobiliario.

Explicó que la bancada del PRD analiza proponer un punto de acuerdo para que la Presidencia de la República informe al Congreso sobre lo que gasta en el uso y mantenimiento de la residencia, además de iniciar una investigación al respecto.

Fernández Noroña afirmó en entrevista que la Residencia Ávila Camacho es un monumento a la corrupción. Recordó que en el libro "Una Vida en la Vida de México", escrito por Jesús Silva Herzog padre, el autor señala que un día fue a visitar a Ávila Camacho a su mansión y salió descorazonado por la evidencia de los niveles de corrupción.

Advirtió que la sociedad está harta de esos excesos, y aunque parezca que no pasa nada, la inconformidad social se va acumulando hasta que un día estalla por una nimiedad.

El diputado Jaime Cárdenas afirmó que considerando que la Presidencia violó los términos de la escritura de donación, ésta puede ser revertida por los herederos del patrimonio de los Ávila Camacho. Agregó que la residencia es un claro ejemplo de la "corrupción" y los "excesos" del gobierno de Felipe Calderón.

Fernando Lerdo de Tejada, diputado del PRI, advirtió que el gobierno federal tiene un doble discurso. Por un lado quiere aumentar los impuestos y por otro sigue derrochando el dinero público en alta burocracia y en "frivolidades" como la Residencia Ávila Camacho.

Operación avestruz

Reporte Índigo solicitó una entrevista con Patricia Flores Elizondo, jefa de la Oficina de la Presidencia de la República, instancia responsable de la administración de la casa, para que informara sobre el costo de mantenimiento y uso de la residencia.

Hasta el cierre de esta edición, no ha habido respuesta de Flores Elizondo, una de las colaboradoras más cercanas del presidente Felipe Calderón.

Aun así, a través de la ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública, la Presidencia tendrá que ofrecer toda la información requerida porReporte Índigo porque está catalogada como "pública". Su fecha límite para responder es el 14 del octubre. De no hacerlo, el IFAI deberá analizar el caso y, si procede, obligar a la Presidencia a presentar todo lo solicitado.

Durante esta semana, Reporte Índigo realizó recorridos nocturnos alrededor de la Residencia Ávila Camacho. Unos faroles de baja intensidad apenas iluminan sus jardines, la mansión luce en penumbras y no se ve más actividad que la de unos perros sueltos en los jardines.

Quizá las autoridades están esperando a que pase la tormenta para que "el Palacio de los Excesos" vuelva a su esplendor.

---



Caprichos del gobierno

Por Olga Villegas

Clemente Orozco Valladares reprueba la actitud del gobierno federal.

Afirma que las pinturas que se encuentran en la Residencia Ávila Camacho deberían ser expuestas en lugares de acceso público.

Para el hijo de José Clemente Orozco, uno de los grandes muralistas de México, el mal uso de esa propiedad se debe a que "son caprichos".

Orozco Valladares dice que ha visitado un par de veces la Residencia Ávila Camacho, donde se encuentra uno de los mejores autorretratos que pintó su padre.

Este lugar también alberga obras de David Alfaro Siqueiros y Diego Rivera que son consideradas monumentos artísticos.

En 2005, Adriana Siqueiros, Guadalupe Rivera y Clemente Orozco, hijos de los muralistas, junto con Manuel Ávila Camacho, sobrino del ex presidente del mismo nombre, propusieron a Vicente Fox convertir la residencia en un centro de investigación.

Orozco Valladares afirma que la iniciativa nunca prosperó porque a las autoridades no les interesa procurar el beneficio social. Hoy, la residencia donada por Soledad Orozco, la viuda de Ávila Camacho, sólo es utilizada por el gobierno federal para realizar actividades de carácter privado.



No hay comentarios: