MATA ILUSIONES

MATA ILUSIONES

Por: Claudia Rodríguez

Me sucede de forma muy cotidiana que ante diversas reflexiones de mis pequeños hijos, me quede sin argumentos contundentes para calmar las inquietudes que les producen tantos flagelos cotidianos.

Los temblores, los tsunamis, las inundaciones, las matazones y hasta la mala actuación de los futbolistas de la selección mexicana son temores y angustias con las que ellos viven, y aún cuando trate de darles explicaciones, la pesadumbre los invade y después de las ilustraciones verbales, sus miradas demuestran sus inquietudes y ansiedades.

La última pena que carga uno de mis pequeños, es la mala actuación de la selección mexicana de futbol en el Mundial de Sudáfrica.

-Mami. Yo quisiera que México ganara la Copa. Así se expreso con gran desilusión uno de mis hijos. A este deseo me sume y se lo hice patente. -Yo también lo quisiera. Advertí, mientras en nuestra conversación se escuchaba de fondo la fiesta de los españoles porque su selección de fútbol fue la campeona del evento mundialista del balompié.

Y del querer, al hacer --me quedé pensando--, no se suscitan acciones concretas en el deporte nacional. Quien logra destacar en cualquier disciplina deportiva lo hace por su propia cuenta o apenas con el esfuerzo sumado de unos cuantos más.

En México, los deportistas toman a la cultura del esfuerzo con límites, cuando en la misma no deberían existir.

En la cultura del esfuerzo a la mexicana siempre hay excusas. Que si se es joven, que si se tienen problemas emocionales, que si les está explotando, que si son figuras públicas y del espectáculo antes que deportistas. Esos, y otros pretextos, acompañan a las figuras del deporte en nuestro país.

¿Cómo decirle a mi hijo que los futbolistas de la selección mexicana combinan el deporte con la parranda? La mediocridad por delante cuando se está expuesto ante millones de ojos en toda la Tierra.

Me duele decirle a mis pequeños que pese a todas las exigencias que les hago como madre en sus diferentes entornos, la realidad es que los mexicanos sumamos ineficiencias con ineficacia en muchos de los ámbitos de nuestra vida cotidiana, lo que da como resultado, eventos negativos y nefastos.

Los futbolistas de la selección mexicana no pueden seguir siendo promotores de expectativas y a la vez, en corto y en contubernio, ser unos verdaderos negociantes que engañen a sus seguidores.

Mis hijos apenas inician el camino de los sinsabores deportivos a la mexicana. Yo, estoy curada de espanto y acostumbrada. Y todo indica que la niñez de México recorrerá el mismo camino que muchos de nosotros. Vivir y convivir con los mata ilusiones.

Acta Divina…El técnico del Tottenham, Harry Redknapp, aseguró apenas la semana pasada, que el rendimiento del delantero mexicano Giovani dos Santos se ve perjudicado por su “gusto a la vida nocturna”, lo que provocó su salida del club.

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Fuente: Indice Político

Difusión: AMLOTV