El mínimo

El mínimo

En breve, la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos violará, por enésima vez, el mandato constitucional establecido en el artículo 123, que a la letra expresa: “Los salarios mínimos generales deberán ser suficientes para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural y para proveer a la educación obligatoria de los hijos…”

Es decir, deberían alcanzar para calzar, vestir, educar, vivir en vivienda digna y para el esparcimiento. La realidad es que el salario mínimo actual y el que se acordará para 2010, será tan raquítico que no servirá ni para adquirir lo necesario en alimentos.

La trampa de la CNSM es que los incrementos se determinan en diciembre de cada año, y lo hacen en base al pronóstico inflacionario del año siguiente, y lo que ha venido sucediendo invariablemente es que el aumento es mayor y en consecuencia, año con año se deteriora el salario.

Ejemplo: La inflación de 2006 a 2009 –este año presumo que será 5.5%– suma 20.05%, mientras que el aumento al mínimo será de 16.4%. En los tres años de Calderón la pérdida ha sido de 4.1 puntos. Sumado al rezago histórico desde Miguel de la Madrid a la fecha, resulta más del 70%.

La situación es más grave si la valoramos en función a los incrementos de los artículos que integran la llamada canasta básica. Éstos han aumentado más que los componentes que sirven de base para el índice inflacionario. Según estudios de la Facultad de Economía de la UNAM, de diciembre de 2006 al mismo mes del 2008, en promedio ha aumentado anualmente 22.33% y el salario sólo 4.19%.

Al perro más flaco se le cargan las pulgas, reza el refrán. ¿Y los representantes de los asalariados que dicen al respecto? Ya ni siquiera firman bajo protesta como en tiempos de Fidel Velázquez. De ese tamaño es su traición.

Fuente: El Periódico

Difusión AMLOTV