Finanzas débiles en lo que va del sexenio
El desempeño económico del país en la primera mitad de la administración de Felipe Calderón es el más mediocre en casi 30 años
Marco Antonio Durán
El desempeño económico del país en la primera mitad de la administración del presidente Felipe Calderón es el más mediocre en casi 30 años, esto es, desde Miguel de la Madrid, con un crecimiento económico durante su mandato de 0.4 por ciento.
La lista de indicadores económicos que demuestran la ineficiencia es larga: una tasa de desempleo arriba de 6 por ciento, incremento en los pobres que entre 2006 y 2008 sumaron 6 millones, al contabilizar 37 millones de mexicanos, cantidad superior a los 31 millones registrado en 2006 cuando tomó posesión.
La deuda total neta suma 230 mil millones de dólares, algo así como 45 mil millones más de la que encontró (181 mil millones de dólares). En términos porcentuales se ha incrementado 28 por ciento, pese a que como señaló en su momento prefirió ser responsable con el futuro de los mexicanos al no aumentar el déficit público.
De acuerdo con los datos financieros, la inflación pasó de 3 por ciento a casi 6.5 por ciento en la actualidad. Un tipo de cambio que promediaba 10 pesos a su llegada, frente a 13.3 pesos que promedia en su mandato y una devaluación máxima hace un año de 30 por ciento. Pero en aras de apuntalar el peso, el gobierno de Calderón ha propiciado que las reservas internacionales se reduzcan 14 mil millones de dólares. Y las tasas de interés de los hogares se dispararon hasta un 40 por ciento promedio.
A pesar de que sus promesas de campaña y que de hecho lo llevaron a la presidencia, el desempleo se ha duplicado, pues ahora hay casi 2.8 millones de desocupados respecto de la Población Económicamente Activa (PEA) desde los 1.5 millones que se reportaron en enero de 2006, y la tasa de desempleo abierto paso, de 3.5 por ciento a 6.5 por ciento.
Lo único que incremento en forma exponencial fue el empleo informal, esto es uno 700 mil mexicanos por año, para acumular uno 12.5 millones en este sector.
El PIB per capita de los mexicanos era de 9 mil dólares al año en 2006 y pasó a 7 mil 500 dólares en 2009, confirmando la pobreza de los mexicanos.
En cuanto a la distribución de la riqueza, según el INEGI y de acuerdo con los datos de la encuesta Ingreso Gasto de 2006- 2008, del total de los ingresos de los hogares, los seis primeros deciles o 60 por ciento de la población concentraron en el año 2008 al 26.7, cuando en el año 2006 tenían 27.6; en contraste, el último decil o un 10 por ciento de la población recibe casi el 40 del total de los ingresos.
Pero aún así el presidente del empleo decidió aumentar los impuestos rompiendo todas sus promesas de no incrementarlos e incluso desaparecer la tenencia.
Si bien es cierto que ha enfrentado una crisis de dimensiones inéditas, también es cierto que el país contaba con mayores elementos técnicos y económicos que en cualquier otra época para enfrentar la crisis, como: reservas internacionales suficientes, una deuda total manejable, ahorros por excedentes petroleros, precio del petróleo en niveles máximos, fondos con dinero para enfrentar cualquier desastre natural
De hecho, en los últimos años ha perdido competitividad económica y nos encontramos a niveles de países africanos como Bosguana.
La industria se encuentra en recesión desde hace 14 meses, es decir la mitad de su mandato, las remesas de los migrantes acumulan una caída del 30 por ciento, el consumo de los mexicanos se contrajo debido a su perdida de empleo y caída en el ingresos de 6.5 por ciento, las exportaciones en el último año se ha desplomado un 30 años.
Fuente: El Periódico
Difusión AMLOTV
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