Miércoles, 12 de Enero de 2011 00:00
Escrito por Jaime Luis Brito
El asesinato del presidente municipal de Temoac, Abraham Ortiz Rosales y de su pequeño hijo, representa el escalamiento de un nuevo nivel de violencia en la entidad, y la continuación de la oleada que vive el país con mayor rigor desde 2006, con la llegada del régimen de Felipe Calderón Hinojosa, el último presidente monotemático que hemos padecido.
La impunidad, la corrupción y la terrible incapacidad de las autoridades de seguridad pública y de procuración de justicia, así como el atrasado sistema de administración de la justicia, alienta la criminalidad, el irrespeto por la ley y la burla a cualquier figura de autoridad. El Ejército presume que puede controlar al crimen organizado, no tiene de otra, se lo han ordenado; pero a las primeras de cambio demuestra su falta de conocimiento de la zona y el enemigo. Los últimos operativos han dejado ver la falta de información de inteligencia que le permita acudir a un hecho con los antecedentes necesarios para vislumbrar al menos una estrategia.
Por su lado el procurador está más interesado en posar para los reflectores. La noche del lunes simplemente declaró una serie de barrabasadas con la idea de tratar de alejar el asesinato del tema del narcotráfico. Para fundamentar su “teoría” de la venganza, señala que el alcalde se detuvo en su vehículo, mismo que identifica como una camioneta Windstar blanca, luego asegura que el alcalde recibió un solo balazo. Entonces que alguien explique por qué la camioneta volcada, que por cierto era una color cobre.
Mientras tanto, el gobernador Marco Adame elude referirse a sí estos hechos no advierten la necesidad de hacer cambios en su equipo de gobierno, particularmente ahí donde se tratan estos temas, en el ámbito de la seguridad y la procuración de justicia. Y, nada. Se limita a afirmar que lo único que importa es la coordinación efectiva entre fuerzas, dependencias y niveles de gobierno para poder dar con los responsables.
En tanto, habrá que preguntarle a Avelino Velázquez Peña si está dispuesto a tomar posesión del cargo de presidente municipal de Temoac, en sustitución de Ortiz Rosales.
A partir de hoy, nos unimos a la campaña: Porque Calderón no ha sido capaz de detener al crimen organizado: Basta de Sangre.
Fuente: La Jornada de Morelos
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