El Estado es un concepto político que se refiere a una forma de organización social soberana y coercitiva, formada por un conjunto de instituciones, que tiene el poder de regular la vida nacional en un territorio determinado.
Funciones del estado: a) Protección, b) Mantener el Estado de Derecho y aplicación de la legalidad en forma expedita, y c) Proporcionar bienes que el libre intercambio no puede suministrar pero que se requieren para que el país funcione adecuadamente, nos estamos refiriendo a los bienes públicos o infraestructura. Por ejemplo las carreteras, puertos, aeropuertos, etcétera.
El Estado, para llevar a cabo sus obligaciones, obtiene los recursos de los impuestos que pagamos y la explotación de nuestros recursos naturales. Es decir, el Estado es un simple administrador del dinero recaudado por los integrantes de la sociedad y éste debe ser utilizado para satisfacer las demandas de salud, educación, empleo, cultura y alimentación de la población.
La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece un conjunto de derechos y obligaciones que todos debemos acatar. Sin embargo, los responsables de hacer guardar la Constitución y las leyes que de ella emanen, la han violado sistemáticamente. Incluso, han legislado violando los principios constitucionales, modificando y adecuando las leyes para su beneficio.
Esta clase política parásita ha violentado los principios constitucionales de la mayoría de los artículos escritos en la Carta Magna, entre los que destacan los siguientes: Artículo 1º, Artículo 3º, Artículo 6º, Artículo 7º, Artículo 9º, Artículo 16, Artículo 22, Artículo 25, Artículo 27, Artículo 28, Artículo 41, Artículo 123, Artículo 128, Artículo 129, Artículo 130, Artículo 134, Etcétera.
En base a los artículos constitucionales anteriores, podemos afirmar que los responsables de guardar la Constitución y las leyes que de ella emanan no lo hacen. Los poderes Ejecutivo, Judicial y Legislativo han violentado la ley de manera sistemática.
Tomando como base el Artículo 39 Constitucional que establece: La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno. Considero que ha llegado el momento de pasar de la resistencia civil pacífica a la desobediencia civil pacífica. Para ello propongo lo siguiente:
1.- Que todos los que estamos conscientes nos unamos en una sola fuerza que actúe coordinadamente. Necesitamos que las ONG`s, sindicatos independientes, luchas indígenas, el movimiento de resistencia civil pacífica, luchas campesinas, asociaciones, etcétera, dejen de lado sus diferencias y se coordinen en uno solo para librar la batalla contra la mafia que nos desgobierna.
2.- Pasar de la resistencia civil a la desobediencia civil y no pagar impuestos. Para ello requerimos que la ANAD, Unión de Juristas de México, SERAPAZ, derechos humanos para todos, etcétera, preparen la argumentación jurídica y constitucional necesaria para ampararnos y no pagar impuestos a los parásitos que nos desgobiernan.
3.- Informar a toda la población de estas acciones y que se unan los que deseen un verdadero cambio. Los que por ignorancia, temor, mediocridad, sumisión y/o pendejes, no quieran adherirse, no tendrán derecho al amparo.
4.- Evitar la confrontación con las fuerzas entrenadas para reprimir al pueblo que están al servicio de la mafia. No podemos caer en la provocación y permitir que los pefepos y el ejército nos repriman.
5.- Para seguir manteniendo a las instituciones del estado que si funcionan, lo que nos corresponda pagar de impuestos, lo hagamos de manera directa depositando la cantidad correspondiente de impuestos a dichas instituciones. Tales como la UNAM, IPN, UAM, UACM, IMSS, etcétera. Con ello, seguimos cumpliendo con nuestras obligaciones fiscales, pero no se los entregamos a quienes se lo roban, despilfarran y/o entregan a los mafiosos del poder. Ni un peso más para la delincuencia que está en Los Pinos, en las cámaras legislativas y en las instituciones fallidas como son la SCJN, IFE, TRIFE, Secretarias de Estado, etcétera.
6.- Una vez que estemos organizados, concientizados y con la voluntad necesaria de ejercer nuestro derecho a cambiar la forma de nuestro gobierno, hagamos plantones en las instituciones secuestradas por la mafia e impongamos a nuestros representantes. Por ejemplo: hacer un plantón en la SCJN y no quitarnos de ahí hasta que todos los presos políticos y de conciencia sean liberados, que paguen su crimen los responsables del infanticidio en la guardería de Hermosillo, que se declare la inconstitucionalidad del decreto de extinción de LyFC, etcétera. Sacar a los parásitos de la corte para poner a nuestros jueces y magistrados en ella. Sería muy difícil que los represores detengan una manifestación de millones. Por eso es importante tomar conciencia y participar todos en las movilizaciones y plantones hasta que logremos nuestro objetivo.
7.- Obligar al Congreso a que reparta las concesiones de radio y televisión para todos los sectores. Necesitamos tener medios de comunicación imparciales en cadena nacional con señal abierta para combatir la enajenación, manipulación, idiotización y perversión, que ejercen Televisa y tvazteca en toda la población.
La clase gobernante utiliza nuestro dinero para acrecentar sus fortunas personales y/o de grupo, dejando a un lado su obligación para con la población.
La grave crisis política, económica y social que vivimos, es culpa exclusiva de esta bola de parásitos enquistados en el poder. No podemos permitir que sigan repartiéndose el botín que significan para ellos nuestros recursos naturales, económicos y patrimoniales.
POR SALUD MENTAL, APAGA LA TELEVISIÓN.
Funciones del estado: a) Protección, b) Mantener el Estado de Derecho y aplicación de la legalidad en forma expedita, y c) Proporcionar bienes que el libre intercambio no puede suministrar pero que se requieren para que el país funcione adecuadamente, nos estamos refiriendo a los bienes públicos o infraestructura. Por ejemplo las carreteras, puertos, aeropuertos, etcétera.
El Estado, para llevar a cabo sus obligaciones, obtiene los recursos de los impuestos que pagamos y la explotación de nuestros recursos naturales. Es decir, el Estado es un simple administrador del dinero recaudado por los integrantes de la sociedad y éste debe ser utilizado para satisfacer las demandas de salud, educación, empleo, cultura y alimentación de la población.
La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece un conjunto de derechos y obligaciones que todos debemos acatar. Sin embargo, los responsables de hacer guardar la Constitución y las leyes que de ella emanen, la han violado sistemáticamente. Incluso, han legislado violando los principios constitucionales, modificando y adecuando las leyes para su beneficio.
Esta clase política parásita ha violentado los principios constitucionales de la mayoría de los artículos escritos en la Carta Magna, entre los que destacan los siguientes: Artículo 1º, Artículo 3º, Artículo 6º, Artículo 7º, Artículo 9º, Artículo 16, Artículo 22, Artículo 25, Artículo 27, Artículo 28, Artículo 41, Artículo 123, Artículo 128, Artículo 129, Artículo 130, Artículo 134, Etcétera.
En base a los artículos constitucionales anteriores, podemos afirmar que los responsables de guardar la Constitución y las leyes que de ella emanan no lo hacen. Los poderes Ejecutivo, Judicial y Legislativo han violentado la ley de manera sistemática.
Tomando como base el Artículo 39 Constitucional que establece: La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno. Considero que ha llegado el momento de pasar de la resistencia civil pacífica a la desobediencia civil pacífica. Para ello propongo lo siguiente:
1.- Que todos los que estamos conscientes nos unamos en una sola fuerza que actúe coordinadamente. Necesitamos que las ONG`s, sindicatos independientes, luchas indígenas, el movimiento de resistencia civil pacífica, luchas campesinas, asociaciones, etcétera, dejen de lado sus diferencias y se coordinen en uno solo para librar la batalla contra la mafia que nos desgobierna.
2.- Pasar de la resistencia civil a la desobediencia civil y no pagar impuestos. Para ello requerimos que la ANAD, Unión de Juristas de México, SERAPAZ, derechos humanos para todos, etcétera, preparen la argumentación jurídica y constitucional necesaria para ampararnos y no pagar impuestos a los parásitos que nos desgobiernan.
3.- Informar a toda la población de estas acciones y que se unan los que deseen un verdadero cambio. Los que por ignorancia, temor, mediocridad, sumisión y/o pendejes, no quieran adherirse, no tendrán derecho al amparo.
4.- Evitar la confrontación con las fuerzas entrenadas para reprimir al pueblo que están al servicio de la mafia. No podemos caer en la provocación y permitir que los pefepos y el ejército nos repriman.
5.- Para seguir manteniendo a las instituciones del estado que si funcionan, lo que nos corresponda pagar de impuestos, lo hagamos de manera directa depositando la cantidad correspondiente de impuestos a dichas instituciones. Tales como la UNAM, IPN, UAM, UACM, IMSS, etcétera. Con ello, seguimos cumpliendo con nuestras obligaciones fiscales, pero no se los entregamos a quienes se lo roban, despilfarran y/o entregan a los mafiosos del poder. Ni un peso más para la delincuencia que está en Los Pinos, en las cámaras legislativas y en las instituciones fallidas como son la SCJN, IFE, TRIFE, Secretarias de Estado, etcétera.
6.- Una vez que estemos organizados, concientizados y con la voluntad necesaria de ejercer nuestro derecho a cambiar la forma de nuestro gobierno, hagamos plantones en las instituciones secuestradas por la mafia e impongamos a nuestros representantes. Por ejemplo: hacer un plantón en la SCJN y no quitarnos de ahí hasta que todos los presos políticos y de conciencia sean liberados, que paguen su crimen los responsables del infanticidio en la guardería de Hermosillo, que se declare la inconstitucionalidad del decreto de extinción de LyFC, etcétera. Sacar a los parásitos de la corte para poner a nuestros jueces y magistrados en ella. Sería muy difícil que los represores detengan una manifestación de millones. Por eso es importante tomar conciencia y participar todos en las movilizaciones y plantones hasta que logremos nuestro objetivo.
7.- Obligar al Congreso a que reparta las concesiones de radio y televisión para todos los sectores. Necesitamos tener medios de comunicación imparciales en cadena nacional con señal abierta para combatir la enajenación, manipulación, idiotización y perversión, que ejercen Televisa y tvazteca en toda la población.
La clase gobernante utiliza nuestro dinero para acrecentar sus fortunas personales y/o de grupo, dejando a un lado su obligación para con la población.
La grave crisis política, económica y social que vivimos, es culpa exclusiva de esta bola de parásitos enquistados en el poder. No podemos permitir que sigan repartiéndose el botín que significan para ellos nuestros recursos naturales, económicos y patrimoniales.
POR SALUD MENTAL, APAGA LA TELEVISIÓN.
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